Esperanza 11: novela histórica emplazada en General Alvear

- ¿Cómo te presentarías?

-Soy Alejandra Gil y siempre me vi como una lectora apasionada que de vez en cuando escribía. Últimamente recordé que de chiquita tenía un cuaderno en el que inventaba cuentos, imitando los clásicos que mi abuela, con grandes habilidades de narradora, nos contaba antes de dormir. También colaboré con el periódico de mi escuela primaria y al ir creciendo participé en diversos talleres literarios. Recientemente fui parte de un concurso a nivel nacional denominado "Maratón Epistolar", obteniendo la alegría de que una de mis cartas resultara seleccionada para la antología que se publicó en forma de libro.

- ¿Cómo se te ocurrió escribir este libro?

-"Esperanza 11" nació como un proyecto intrafamiliar, un deseo de dejar por escrito una recopilación de recuerdos, anécdotas y testimonios para que los descendientes de aquellos inmigrantes de principios del siglo XX, supieran quiénes habían sido sus padres y abuelos, qué sueños y pasiones tenían, qué dificultades habían vencido. La cantidad de documentación que reunimos y la fuerza misma que tenía la historia, venció la barrera de lo doméstico: en algún momento sentí que el relato iba a ser disfrutado más allá de la familia.

- ¿De qué se trata tu obra?

-En el inicio de la novela, el gran protagonista es don Abdón Prieto, quien emigra de Zamora, España a nuestro país y pasa algunos años en distintas localidades de la provincia de Buenos Aires. Luego elige el lugar donde formará su empresa y su vida, la que era conocida como "Colonia Alvear", en el sur de Mendoza. En los primeros capítulos vemos quién es él, su formación, sus valores, sus sueños y cómo se va forjando a sí mismo. Paralelamente, puede vislumbrarse el crecimiento del pueblo donde don Abdón se instaló, que por esos años, se separa de San Rafael para convertirse en un departamento independiente: General Alvear.

En la segunda parte, se profundiza la historia de amor, uno de los puntos más emotivos e interesantes para mí. ¿Quién no disfruta de un buen romance? Todo es mucho más interesante y complicado teniendo en cuenta la resistencia y las barreras que impedían la concreción de esa pasión. La protagonista de esta parte de la historia es María, la sobrina de Abdón, una mujer admirable en todo sentido.

- ¿Qué tiene de especial el índice?

-Frente a esta pregunta, debo nombrar a quienes me ayudaron con la documentación que tuve a mi disposición para escribir la novela. Algo que no había mencionado aún, es que la historia está basada en la familia de mi esposo, Rubén. En cierto momento en particular, a él y a mí; a su tía Piqui y a su marido, Miguel, nos ocurrió algo muy especial. Todos sentimos al mismo tiempo la necesidad de concentrar los recuerdos que estaban diseminados en distintas casas y de ordenar la historia. Nos bautizamos y constituimos como la "Comisión histórica". Comenzamos a reunirnos para sacar a la luz tesoros guardados, hacernos preguntas, formular teorías y buscar las piezas perdidas del rompecabezas. Fueron meses de revolver cajas, de reírnos y emocionarnos. Jornadas en que se nos quebraba la voz al releer una carta, al descubrir hechos que nadie sabía, que habían quedado esperando su tiempo de salir a la superficie.

Estas cajas, rescatadas de sótanos y viejos armarios, contenían carpetas de papeles de negocios, tarjetas postales, muchas fotografías, correspondencia personal, etc. Como estaban etiquetadas con nombres y fechas, nació así la idea de designar los capítulos de la misma forma, mostrando el transcurso del tiempo y quiénes son los protagonistas de cada uno.

- ¿Todos los personajes que aparecen son reales?

-La gran mayoría de ellos son reales, tanto los que vinieron a Argentina como los que quedaron en España. Piqui es sobrina nieta del tío Abdón y mi marido es un sobrino bisnieto. Hay otro personaje que aparece en momentos muy puntuales... Voy a dejar que el lector descubra quién es y qué relación mantiene con los demás. Su presencia es fundamental para hacernos reflexionar sobre la influencia de los flujos migratorios en la historia de nuestro país.

Me pasa algo muy gracioso con los familiares directos de don Abdón y María. Sucede que desde que escribí el libro, ellos toman como versión oficial la mía, y a veces he tenido que recordarles que algunas escenas o caracteres secundarios son solamente fruto de mi imaginación, para aportar mayor fluidez o coherencia al relato.

- ¿Qué instituciones alvearenses aparecen citadas en el libro?

-Afortunadamente, el negocio que fundó de la nada el tío Abdón, aún hoy existe. Funciona como ferretería y corralón y se encuentra en su ubicación original. Sus actuales dueños, fueron en su momento empleados del comercio, cuando todavía pertenecía a la familia. También siguen existiendo el Sport Club Pacífico, la Sociedad Española, la Cámara de Comercio de General Alvear, la Farmacia Española, la Escuela de Comercio. Y en la Iglesia Sagrado Corazón de Jesús, sigue repicando la campana donada por Doña Martina. Lamentablemente, la Primera cancha de golf de la provincia de nueve hoyos, fundada entre otros por nuestros protagonistas, no subsistió.

Quisiera destacar el impulso que esta generación de inmigrantes imprimió al desarrollo de numerosas ciudades del interior del país. Sus historias personales y las de los pueblos que fundaron están íntimamente entrelazadas. Creo que por esto "Esperanza 11" fue distinguida con la "Declaración de Interés" por parte de la Honorable Cámara de Diputados de la Provincia, según la Resolución N°232/23, impulsada por el Diputado José Vilches.

- ¿Qué compartirás con los asistentes el próximo jueves en Antü?

-Les contaré qué elementos me conmovieron profundamente a la hora de enfrentar la escritura y aclaro que hay de forma material y verbal. Un valioso ejemplo es cierta bolsa tejida al crochet, que contenía cartas de un profundo romanticismo. A través de ellas pude conocer detalles que de otro modo se hubieran perdido para siempre. Prometo leerles algunos párrafos. Les mostraré una selección de fotos y documentos en papel de la década de 1920 en adelante y podrán llevarse de recuerdo una pequeña producción artística basada en el imaginario de la novela. Todo esto será coronado con buenos vinos y música en vivo a cargo del dúo de saxos de Walter Casciani y Romina Sopelssa.

- ¿Proyectos futuros?

-Luego de la hermosa experiencia de escribir "Esperanza 11" sin tener formación académica en letras, decidí tomarme este año para estudiar ¿Y qué mejor forma de aprender que haciendo? Con la guía de Agustina Caride, reconocida y premiada escritora argentina, he estado elaborando mi segundo libro, que ya se encuentra en etapa de corrección profesional. A través de personajes imaginarios, novelo la experiencia personal más fuerte de mi vida, como fue el nacimiento prematuro de mi hijo.

Los espero a todos el próximo jueves 5 de diciembre a las 18,30 horas en la Librería Antü de La Barraca, para compartir un momento especial junto a mí y la "Comisión Histórica".