Mendoza: turismo y algo más
Juan Marcelo Calabria recuerda el Día del Turismo, que en Mendoza se vive de una manera particular en el contexto argentino por su enorme potencial.
El Día Mundial del Turismo se celebra cada año el 27 de septiembre, en virtud de haber sido instituido por la Organización Mundial del Turismo (OMT) dependiente de la ONU, con el objetivo de sensibilizar a la comunidad internacional sobre el valor social, cultural, político y económico de esta antigua actividad; promoviéndolo especialmente en los últimos años dentro del marco de los ODS - Objetivos de Desarrollo Sostenible, en tanto que "es una herramienta poderosa para construir un futuro más prometedor para todos. A nivel global, es una fuente principal de empleo, sustentando millones de puestos de trabajo y promoviendo el progreso económico tanto local como nacional" (OMT, 2019).
En ese marco el desarrollo del turismo sostenible, es fundamental para el impulso de las economías vedes, promoviendo prácticas que minimizan el impacto ambiental y fomentan la conservación y correcta utilización de los recursos naturales disponibles, lo que hemos destacado en diversas oportunidades, y que esta semana resulta oportuno recordar. También resulta oportuno destacar que el turismo actúa como catalizador de equidad e inclusión laboral ya que en muchas regiones, genera empleos de calidad tanto para jóvenes, mujeres, adultos mayores y especialmente para comunidades rurales o alejadas de las grandes urbes, y por ello la promoción del turismo rural, la producción artesanal y las propuestas de productos a cielo abierto o en espacios de conservación natural son un complemento ideal en tanto permite aportar al desarrollo local y a la sustentabilidad de actividades productivas y comerciales para las familias de la comunidad local.
Mendoza, como destino turístico por excelencia, tal como hemos resaltado continuamente desde Vinos y Comidas, ofrece una combinación única de naturaleza, historia, cultura, enoturismo, gastronomía y aventuras, que la posiciona como un destino y una marca a nivel mundial, recibiendo a millones de visitantes por año: según datos oficiales 3,8 millones de viajeros llegaron a nuestra provincia en 2023.
Es sabido que la Fiesta Nacional de la Vendimia y todo el calendario vendimial a lo largo y ancho de nuestro territorio es una de las mayores atracciones para los turistas que nos visitan, pero también hay que destacar, siguiendo el "Informe especial: Rasgos que identifican el turismo de Mendoza", elaborado por la provincia a principios de este año, que la más de 200 bodegas abiertas al turismo, de un total de 900, conforman la red de enoturismo más amplia e importante de Latinoamérica, en tanto que aquí se produce el 70% de los vinos de Argentina y se concentran el 91% de exportaciones de vinos, lo que también contribuye a difundir la "Marca Mendoza" en todo el mundo.
Estas bodegas no sólo ofrecen degustaciones premium, las que claramente no están pensadas para los bolsillos locales, en breve daremos a conocer un detalle que estamos realizando sobre precios y propuestas, también presentan experiencias accesibles para todo los bolsillos con visitas guiadas, en muchos casos sin costo, o degustaciones con precios muy accesibles hasta clases de cocinas, maridajes, experiencias artísticas, paisajes y aventuras; y que en muchos casos fomentan la economía local y ofrecen experiencias únicas y muy ricas por su contexto y entorno, especialmente aquellas que se encuentran en los departamentos de la provincia, y aquí como siempre destacamos nuestro terruño: Mendoza Este, que está impulsando un camino turístico totalmente novedoso y que presenta un gran potencial, a partir de la formación del clúster del este, con cientos de bodegas, restós, museos, recorridos, ferias, exposiciones, etc.
Mendoza se destaca, desde hace tiempo, por ofrecer experiencias inmersivas que van más allá del turismo tradicional, así quienes nos visitan pueden disfrutar de la naturaleza en paisajes únicos como la Cordillera de los Andes, pero también los que ofrecen todos los oasis mendocinos, donde destaca nuestra historia, cultura y gastronomía local, jugando un rol cada vez más importantes programas de sostenibilidad que llevan adelante tanto empresas privadas del sector, como muchos departamentos. Y es que el turismo es un motor esencial para la economía mendocina en tanto aglutina alrededor del 7% del empleo registrado de la provincia y genera alrededor del 6% del PBG - Producto Bruto Geográfico de la provincia, porque como dijimos el turismo general empleo, fomenta la inversión y promueve el intercambio cultural fortaleciendo la identidad mendocina.
Así destacan museos, monumentos, sitios e hitos históricos relevantes para la historia de Argentina y América, pero además la gran cantidad de programas particulares, ferias, degustaciones y maridajes en vinerías, restaurantes, bodegas e incluso en paseos y espacios públicos que generan una gran atracción, desde pequeños a grandes encuentros que abarcan todos los gustos y bolsillos. Un ejemplo son las degustaciones en bares ocultos, cavas y vinotecas, para pequeños grupos que brindan una experiencia personalizada, tal el caso del Ciclo Privado de Degustación & Maridaje de cuatro pasos con vinos premiados de edición limitada que realiza el enólogo y propietario de Luna Roja, Nicolás Gabardós, quien es además músico y compositor, y acompaña estos exclusivos encuentros con algunas de sus canciones en formato acústico, en la Cava Subterránea de la Cantina y Bodegón Don Hefesto ubicado en Chacras de Coria. Al igual que las degustaciones y visitas que ofrecen las moradas vitivinícolas como el caso de Bodegas y Viñedos Los Haroldos a través de su ciclo Bodega Abierta en el histórico departamento de San Martín.
Esta gran variedad de propuestas logra que la marca Mendoza se fortalezca día a día gracias a la combinación de su oferta enoturística, su desarrollo urbano, su historia, cultura, paisajes, constante innovación y su creciente compromiso con la sostenibilidad. Así la provincia no solo es un destino turístico de primer nivel, sino también un ejemplo, con luces y sombras, pero siempre con la visión a futuro, de cómo el turismo puede impulsar el desarrollo económico y social de una región. Por todo ello, ¡salud y a disfrutar Mendoza!