Solanum Tuberosum: Oda a la papa
En un notorio y eficaz cambio de género literario, el médico y lector de Memo, asiduo colaborador con columnas de opinión, utiliza la poesía como herramienta para comunicar, en esta oportunidad.
Papa: vocablo quechua = tubérculo
Soy un frecuente escritor
más mucho menos poeta,
sí un asiduo lector
y observador del planeta
A veces tomo coraje
y con la pluma por vector
suelo rimar algún pasaje
surgido de mi interior
En mi lejana juventud,
me asombraron del hombre sus facturas
hoy cambié de actitud
y a quien admiro es a natura
La silvestre en especial,
la maravilla de su origen;
la planta al natural
nacida en su tierra virgen.
Me gustan montañas nevadas
y los valles florecidos,
de los arroyos sus cascadas
con su hídrico sonido.
También el libre animal,
de sus leyes los arcanos,
antes de sufrir el mal
producido por humanos.
Padecieron daños terribles
cuando el hombre les impuso
calidad de comestibles,
a la fuerza y con abuso.
Esta oda está dirigida,
a una planta en especial:
la papa es mi elegida
y aquí va mi recital
Vaya a ti, oh papa generosa
este merecido homenaje
por ser nutritiva, sabrosa
y de americano linaje.
La naturaleza te parió
en este lado del planeta,
y el quechua te descubrió
sin mediar ningún cometa.
¿Fue mera casualidad
tu origen en occidente?
No lo creo, de verdad,
que fuera un mero accidente.
Nacer en el altiplano
fue decisión de deidades,
para alimento del humano
cualquiera sean sus edades.
Fue tu matriz la terraza,
tallada en la andina pendiente´
obra genial de esa raza:
el Inca, más que inteligente!
Te acunó en bellos escalones
sin necesidad de la ciencia
tenía sobradas razones
amén de labor, tesón y paciencia.
Te uniste a la Pacha Mama,
al agua, el calor y la luna,
y como gran samaritana,
paliaste del pobre la hambruna.
Fuiste hermana del tomate
la quínoa, el poroto y el maíz´
del zapallo, cacao y aguacate,
todos de andina raíz.
El respetuoso aborigen,
se valió bien de tus nutrientes,
volviendo a la tierra de origen
tus magnánimas simientes.
Tu genoma no profanó,
Pues su existencia ignoraba,
tampoco a la Pacha alteró,
con sus dotes le bastaba
Hoy se llama ecología
el respetar a natura,
y aquello que el I hacía
no era ecología pura?
Por siglos te cultivó
según los ciclos naturales,
lo mismo que realizó
con todos los animales
Más el mal yacía latente,
hombre mediante de hecho,
se gestaba en otro continente
escondido y al acecho.
No imaginó el Inca que el caos,
el genocidio y la rapiña,
ya viajaban en tres naos,
la Santa María, la Pinta y la Niña.
Venían de allende los mares
exultantes de codicia,
munidos de armas y altares
que ocultaban su impudicia.
Fue la corona ibérica
quien financió la aventura
y descubrieron América
para tu mal y desventura.
Arrasaron con crueldad
toda aquella maravilla,
con total complicidad
de los reyes y Sevilla.
Hombre, planta y animal
fueron víctima inocente´
de todo el horrendo mal
que escondía aquella gente.
Eran orondos portadores
de las verdades divinas,
despreciando los valores
de las creencias andinas.
Primero el oro y la plata
se robaron los maleantes,
y luego fue la patata
que partió para levante.
Desconociendo el valor
del americano alimento
te raptaron por tu flor
y te usaron de ornamento.
Luciste en elegantes jardines
para los ricos refinados,
sin saber los malandrines
de tus tesoros soterrados.
Tu consumo fue censurado,
pues en la Biblia no figuras,
hasta llegó a ser pecado
incluirte en la verduras.
Hubo de ser un francés
Parmentier(*) apellidado,
quien dándoles un revés,
iniciara tu reinado.
Demostró por propia experiencia
avalando su postura,
no con Fe sino con su ciencia,
que no producías locura.
Argumentó con buen criterio,
que por ti salvó su vida,
cuando estando en cautiverio,
fuiste su única comida.
Del Imperio envejecidas
solo hay ruinas remanentes,
mas tus virtudes son conocidas
en los cinco continentes.
Pomme de terre te bautizaron
los franceses ignorantes,
pero nunca se enteraron
como te llamabas antes.
Pomme de Pomona (**) deviene,
de la antigua diosa romana;
quien ninguna relación tiene
con la tierra americana.
Allende la Tour Eiffel,
con las trufas confundido,
el alemán te llamó kartoffel
y te ingirió sorprendido.
Mas allá de montañas y valles
asiento del Imperio Inca,
te encuentres donde te halles,
el universo el diente te hinca.
Hervida, frita o asada
sea fría o bien caliente
incluso a veces ahumada
según lo prefiera el cliente.
Adornas distintos manjares
adjetivados en francés,
servidos a maharajáes
y ofrecidos en inglés
Solo en tu tierra natural
te veneran respetuosos,
pues alimentas por igual
a los viejos y a los mozos.
Eres comida principal
presente en todas las mesas,
mejor que la carne animal,
las frutillas o las fresas.
Para el pobre eres la vida,
le aseguras la subsistencia
al ser la principal comida
le brindas salud y vigencia.
ADENDA
Si a este humilde aprendiz,
Calíope(***) volviese a inspirar,
prometo al azteca maíz
ofrecerle un canto similar
REFERENCIAS:
(*) Antoine-Augustin Parmentier (Montdidier, 17 de agosto de 1737-París, 17 de diciembre de 1813) fue un agrónomo, naturalista, nutricionista e higienista francés.
Su experiencia como cautivo en Prusia durante la Guerra de los Siete Años lo llevó a defender la patata como alternativa alimentaria dado que fue el único alimento que le proporcionaban (en Francia, como en casi toda Europa, se la consideraba no comestible). Consiguió que se levantaran las leyes que prohibían su cultivo y promovió su consumo.
(**) Pomona era, en la mitología romana, la diosa de la fruta, y por extensión de los árboles frutales, los jardines y las huertas.
(***) Calíope en la mitología griega era la musa de la poesía épica y de la elocuencia.