Milei, con el mayor subibaja de funcionarios desde 1983
Las alteraciones sufridas por el Funcionariato en el primer aniversario del gobierno de Javier Milei, en un estudio del Observatorio de Élites, del que aquí publicamos un fragmento. ¿Por qué? ¿Cuántos? ¿Quiénes?
Un informe del Observatorio de las Élites de Citrea Conicet, elaborado por Ana Castellani y Pablo Salinas, da cuenta de una de las marcas con las que se puede etiquetar al primer año de gobierno de Javier Milei: la inestabilidad en el Funcionariato.
Para llegar a esa conclusión general, los investigadores tomaron como fuente los cambios en el gabinete, hasta concluir que se trata de la mayor movilidad de funcionarios en los gobiernos desde 1983 hasta la fecha.
En su investigación, los autores dan cuenta de que:
- El 27 de enero, a tan solo 48 días de comenzada la gestión libertaria le fue solicitada la renuncia al ministro de infraestructura, Guillermo Ferraro. El anuncio oficial aduce "razones personales", pero luego el propio gobierno dejó trascender que obedecía a filtraciones en la prensa de lo acordado en las reuniones de gabinete nacional. En el mismo comunicado donde se anuncia la renuncia, se informó que se fusionaría el área de Infraestructura dentro del Ministerio de Economía.
- La renuncia finalmente fue aceptada a partir del 25 de febrero y formalizada en el boletín oficial el 5 de marzo. De esta manera, el 26 de febrero se firma el DNU 195/2024, con la particularidad de que la firma de Ferraro fue subrogada por el ministro de justicia, Mariano Cúneo Libarona. Así conocemos entonces la segunda conformación del gabinete ministerial: 8 ministerios, la Jefatura de Gabinete y el área de Presidencia de la Nación.
Agrega que:
- La tercera conformación ministerial trajo dos récords a nuestra joven democracia: la renuncia más rápida de un jefe de Gabinete y la eliminación por primera vez en la historia de Argentina del Ministerio del Interior.
- Esto se desencadenó cuando el 27 de mayo se conoció a través de un breve comunicado de Presidencia que Milei le solicitó la renuncia al entonces jefe de gabinete Nicolás Posse, a tan solo 169 días de gestión. El motivo que se filtró en los medios de comunicación habla de una sospecha de espionaje hacia miembros del propio gobierno por instrucciones del funcionario desplazado, utilizando los recursos de la entonces Agencia Federal de Inteligencia que, que a mediados de julio fue disuelta y reemplazadas sus funciones por la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE, mismo nombre que tuvo la repartición en épocas siniestras de nuestro país).
- En el mismo comunicado se anuncia que el entonces ministro del interior Guillermo Francos pasaría a ocupar la estratégica Jefatura de Gabinete de ministros y que dentro de esa misma estructura sería absorbido el Ministerio del Interior que, como mencionamos antes, por primera vez pierde el rango ministerial para quedar subsumido a una vicejefatura.
- Todo esto se formaliza con el DNU 484/2004 publicado el 4 de junio del corriente y estableciendo la nueva configuración del gabinete: 7 ministerios, la Jefatura de Gabinete y el área de Presidencia de la Nación.
Y hubo novedades al respecto, poco después:
- Sólo 31 días después se publicó una nueva modificación a la Ley de Ministerios, que a través del DNU 585/2024 crea el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, y nombra a su cargo de Federico Sturzenegger, quien ejercía tareas de asesor presidencial desde inicios de la gestión y al que se lo considera el principal artífice del proyecto de la "Ley de Bases". De esta manera, el gabinete ministerial adoptó su forma actual: 8 ministerios, la Jefatura de Gabinete y el área de Presidencia de la Nación.
- Dentro de esta misma configuración ocurrieron dos hechos relevantes más que involucraron la renuncia de dos ministros, tal como se desprende de observar las últimas dos tablas: el 26 de septiembre dimitió el ministro de salud Mario Russo, quien tenía internas con quien fue su sucesor, Mario Lugones; y el 30 de octubre hizo lo propio la ministra de relaciones exteriores, comercio internacional y culto, Diana Mondino, sobre quien también se ejerció mucha presión desde el entorno presidencial para forzar su salida, previas "intervenciones" de hecho en su cartera, con desplazamiento de funcionarios incluidos.
- Ahora bien, más allá de los reiterados cambios en la configuración del gabinete y de la renuncia de 3 ministros y un jefe de gabinete en menos de 12 meses de gestión es importante analizar el peso relativo de cada una de las carteras del gabinete a los efectos de calibrar los recursos de gestión puestos al servicio de las diversas áreas de política pública. Si analizamos el peso que hacia el final de este primer año de gobierno tienen cada una de las jurisdicciones de la Administración Pública Nacional centralizada considerando los cargos de: Ministro/a, Vicejefe/a de Gabinete, Titular de Unidad de Gabinete de Asesores (UGA), Secretario/a y Subsecretario/a se observa que las áreas que concentran la mayor cantidad de cargos son el Ministerio de Economía, la Jefatura de Gabinete (que incluye al ex ministerio del Interior), las secretarías de Presidencia y el Ministerio de Capital Humano.
- Como se observa, aún con una estructura de gabinete que era un 34% mayor (18 ministerios contra los 8 vigentes), el peso de Presidencia de la Nación bajo la presidencia de Fernández era solo del 4% del total. Si bien es cierto que, con la reducción de ministerios, secretarias y subsecretarias, las jurisdicciones en el gobierno de Milei incrementaron su peso en el total; no guarda ninguna relación el crecimiento de la estructura de las secretarías de Presidencia.
- Para complementar lo anterior, vemos que durante el gobierno de Milei hay otras dos jurisdicciones que superan en tamaño a Presidencia de la Nación, pero eso si respeta proporciones: Jefatura de Gabinete absorbió toda la estructura de las tradicionales carteras de Interior, Ciencia y Tecnología, Turismo y Deportes, y Ambiente y el Ministerio de Economía hizo lo propio con las áreas de infraestructura, vivienda, transporte, producción y energía, entre otras.
- Queda claro en función de los sucesivos diseños del gabinete que las áreas que mayor peso concentran en materia de cargos de estructura son Economía y Jefatura de Gabinete, pero en el gabinete de Milei, las secretarías de Presidencia son las terceras en peso relativo, y esto es una novedad con respecto a otras gestiones presidenciales. De hecho, la expansión de esa estructura se da en la segunda mitad del primer año: hasta el 25 de junio, el área de Presidencia tenía 4 secretarías (General, Legal y Técnica, de Prensa y de Planeamiento Estratégico Normativo) y 12 subsecretarías. Progresivamente, Presidencia fue absorbiendo más funciones y para el 26 de noviembre incorporó 3 nuevas secretarías: Inteligencia del Estado (ex AFI), Cultura (que estaba antes bajo la órbita de Capital Humano) y Comunicación y Medios (ex subsecretaría de Vocería y Comunicación de Gobierno). De esa manera, no sólo creció en estructura, pasando de 4 a 8 secretarías y de 12 a 17 subsecretarías, sino que concentró un enorme poder en torno a las figuras de la secretaria General, Karina Milei, el titular de la SIDE, Sergio Neiert y el vocero presidencial, Manuel Adorni. Además, la magnitud de las estructuras de las secretarías a cargo de Milei y Adorni son inéditas: 70 cargos de función ejecutiva en el primer caso y 50 en el segundo, entre direcciones nacionales, simples y coordinaciones.
- Finalmente, otros dos aspectos que llaman la atención son, por un lado, que aún 5 ministerios no cuentan con diseños de estructuras aprobadas para el segundo nivel de apertura, o sea que sólo tienen definidas las jerarquías hasta el nivel de subsecretarías, sin indicar cargos de direcciones y/o coordinaciones. Por otro lado, hay 14posiciones de la Administración Pública Nacional Centralizada que aún no han sido cubiertas, representando el 6,7% del total. Si bien es habitual que los plazos de tramitación de los expedientes lleven a tener siempre alguna posición vacante, durante todo este primer año el gobierno tuvo en simultáneo al menos una docena de cargos políticos de nivel autoridad superior, sin cubrir.
Inestabilidad de las personas: el mayor nivel de recambio de funcionarios/as desde 1983
Las renuncias y, en raras ocasiones, expulsiones de funcionarios/as políticos son un elemento constitutivo de los regímenes políticos. Es lógico que un gobernante o alguno de sus delegados (ministros) elijan personas para ocupar los cargos que debe completar y que no todos ellos respondan de la manera deseada o se adapten al ritmo de gestión.
También es razonable que haya rotaciones de funcionarios ante determinados desequilibrios en la gobernabilidad, ante escándalos públicos o simplemente por desgaste en sus funciones. El ministerio de Economía es la cartera que más funcionarios ha rotado en Argentina desde 1983 a la fecha.
Cuando se hace un análisis de las performances de cada uno de los gobiernos, en promedio se advierte que a medida que pasan los años de cada mandato, es mayor el número de funcionarios/as políticos que dejan sus cargos: las causas principales suelen ser producto de una mala elección de medio término o desequilibrios macroeconómicos que obligan a los presidentes a realizar un "golpe de timón" que les permita refrescar la gestión.
Sin embargo, la cantidad de rotaciones en el primer año de gobierno de Milei son muy superiores a las de cualquier otro gobierno desde el retorno de la democracia.