Salud mental: la importancia de la prevención y los desafíos generacionales

La psicóloga Greta Chardullo habló sobre la importancia de estar atentos a las señales, la prevención y las diferencias generacionales al momento de abordar el tema.

Conte, Argüello y Bitar
Conductores del programa "Tenés que saberlo", de lunes a viernes a las 7 por Radio Post 92.1.

La salud mental es una epidemia silenciosa que existe en nuestra sociedad y que atenta contra todos los grupos de la población: solo en 2024, se registraron casi 800 intentos de suicidio en la provincia de Mendoza. La psicóloga Greta Chardullo habló con "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y se refirió al tema.

"Es un tema complejo y realmente preocupante. Refleja el resultado de una serie de factores sociales, económicos, psicológicos, culturales, y de lo que implica también esta franja etárea de lo que es la adolescencia, de toda la vulnerabilidad que conlleva también a nivel de desarrollo: están expuestos a todo tipo de situaciones y hoy en día, con lo que son las redes sociales, lo que es la visibilidad también genera mucha ansiedad ya de por sí", señaló Chardullo.

La especialista señaló que la adolescencia es una etapa crucial, con una transición física, mental y social en donde empiezan a verse cambios reflejados en nuestro entorno: "Todo esto en una edad donde tampoco tenemos experiencia, pero sí mucho deseo de cosas buenas y a la vez cosas nuevas, por ahí nos exponemos a situaciones de riesgo".

Frente a los jóvenes que han legado a este punto, la psicóloga señaló que es necesario que haya un abordaje profesional terapéutico, que casi siempre va acompañado de una psicofarmacología: "Hoy en día hemos avanzado mucho a nivel social, hemos evolucionado en un montón de ámbitos, pero el tema de salud mental sigue siendo tabú en muchas personas. Si hablamos de medicación, si hablamos de tratamiento psicológico y a la vez psiquiátrico, las personas prefieren directamente no exponer qué es lo que les sucede para no tener estas críticas o esta falta de aceptación del entorno, más cuando hablamos de la edad crítica del adolescente: la necesidad también de ser parte, de que lo acepten. Es muy difícil el tema del abordaje cuando no hay un pedido de ayuda. Muchas veces se encierra el adolescente y el abordaje termina siendo un poco complejo".

A su vez, marcó que cuando se detecta lo que le está pasando a la persona se generan diversas redes de apoyo e intervenciones para realizar un seguimiento constante: "Hay muchos mitos sobre el suicidio, como que una persona que tuvo un intento de suicidio, cuando ya se conoció qué era lo que quería hacer, posteriormente no va a haber una posibilidad de que lo vuelva a realizar. Hay muchos mitos y la verdad es que no es así. Hay riesgo, eso se puede repetir y se puede terminar con su vida. Es un monitoreo constante que se tiene que hacer. Y es un papel fundamental el que ejerce la familia, la educación, el rol también del acompañamiento de parte de la escuela. En esa edad, la mayor parte del tiempo se pasa en la familia, con amigos y en la escuela. Muchas veces los principales observadores son los docentes, que empiezan a ver que el alumno se está comportando de manera distinta como lo venía haciendo".

Además, Chardullo señaló que la tecnología ha cambiado la exposición de los adolescentes y de los niños: "Todo lo que sea una situación de riesgo incluye hoy en día a los niños: intentos de suicidio, consumo problemático, cada vez la transitabilidad baja más, empieza desde más temprano. Casi siempre comienza por la autolesión, que es lo que está más al alcance. Como esa principal forma de poder descargar tensión porque hay mucha represión en esto de la expresión de lo que siento, de lo que me pasa".

En esa línea, señaló que las redes sociales marcan la aceptación a la que hoy recurren los adolescentes: "¿Cómo me puedo mostrar vulnerable y cómo puedo mostrar que no me estoy sintiendo bien, cuando en realidad el sentirme bien y el mostrar que mi vida es perfecta es lo que a mí me hace estar inserto en una sociedad y con mi grupo? Es un factor fundamental. El tema también de la misma vorágine del día a día. La sociedad hoy no para, las familias no paran, las sobremesas se han perdido en muchas familias, ¿cómo puedo reconocer que a mi hijo le está pasando algo si no puedo comparar en una línea de tiempo porque no comparto tiempo de calidad con él? Lo que yo veo es la punta del iceberg. Yo veo que hubo una autolesión, hubo un intento de suicidio ¿qué pasó previamente a eso? ¿Desde cuándo hubo señales que yo no vi o que no quise ver también? Porque muchas veces es doloroso reconocer que hay un trastorno en el estado de ánimo porque previamente vamos a ver una depresión y previo a la depresión, probablemente un trastorno de ansiedad", explicó.

Además, señaló que la prevención es prácticamente inexistente y si bien se habla un poco más de salud mental, no se habla de lo que se tiene que hablar: "En una sobremesa se tiene que hablar de salud sexual integral, se tiene que hablar de salud mental, se tiene que hablar de miedo. La depresión crece a partir de cuántos miedos y cuánto dolor encierro en mí mismo, me expreso y tengo esa carga. Y de alguna manera necesito expresarla. Entonces considero que tal vez la "solución" intento quitarme la vida. Funciona así, irracionalmente, pero no es de un día para el otro".

Además, marcó que las diferencias generacionales cada vez son más notorias: "Ahí se ponen en juego las estructuras mentales, se pone en juego la flexibilidad, el arte debe ser flexible ante las situaciones que tampoco sé cómo enfrentarlas como adulto de otra generación porque tal vez no entiendo ni siquiera lo que es TikTok, lo que son redes sociales. El tema de la tolerancia a la frustración, si hablamos a nivel neurocognitivo, hay una comparación con lo que son las sustancias: estas sustancias que nos generan placer, como la dopamina, la oxitocina, la serotonina y demás. Cuando hay un consumo de algún tipo de sustancia se segregan en mayor cantidad, se siente esta sensación distinta, de placer. Cuando empiezo a dejar de sentir ese placer, necesito volver a sentirlo, entonces vuelvo al consumo".

En esa línea, explicó que las redes sociales funcionan de esa misma manera: "Se denomina circuito de recompensa: a vos te dice que a partir de lo que haces, vas a tener una respuesta y si esa respuesta es favorable, vas a buscarla de nuevo y así constantemente. Hoy en día ese circuito de recompensa es muy rápido: agarro el celular, googleo algo o me meto a Instagram, busco algo y ahí nomás lo tengo. En generaciones anteriores, si yo quería buscar el significado de una palabra, tenía que moverme físicamente, ir a buscar el diccionario, buscar letra por letra y ver en qué parte estaba la palabra. El circuito de recompensa era mucho más tardío. Ese circuito de recompensa tardío hace que yo esté más acostumbrada y más entrenada a tolerar la frustración, a persistir más en el tiempo".

La psicóloga explicó que hoy en día, si la respuesta y la satisfacción no es instantánea, no lo quiero y eso eleva los niveles de ansiedad y la poca tolerancia a la frustración: "Vuelvo al tema de los consumos problemáticos, porque todo va a estar interrelacionado a nivel social y a nivel de salud mental también. El consumo problemático termina siendo una escapatoria más rápida y comienza acá en la niñez. Todo está comenzando desde muy temprano porque hay una sobreestimulación en toda esta segregación de neurotransmisoria a nivel cerebral. Es un tipo de entrenamiento darle el celular a un niño para que se entretenga mientras estamos comiendo. En ese cerebro, estás generando un circuito de recompensa momentáneo pero rápido. Si al primer llanto yo le doy el celular, él ya sabe que si llora o que si hace un berrinche, va a tener el celular. Es un entrenamiento constante, como cualquier tipo de hábito".

Además, marcó que el acceso a la información hoy es más rápido y fácil y que eso dificulta la crianza para una generación diferente: "Hay momentos donde tengo que poner límites y los límites se tienen que poner. Muchas veces se cree que esta crianza respetuosa, hay mucha divulgación de información de salud mental y de formas de crianza que no son las correctas o que las personas que hablan no son profesionales. Todos empezamos a aprender cosas porque lo vimos en un reel de Instagram o lo vimos en TikTok. A partir de la situación de crianza, de cómo es tu hijo o tu hija, y a partir de ahí, de ese conocimiento, de este compartir la sobremesa, el tiempo de calidad, es que yo voy a ir adaptando mi crianza a partir de cómo es mi hijo y cómo soy yo".

Finalmente, la psicóloga volvió a marcar la importancia de priorizar la salud mental: "A nivel físico, ante lo primero que sacude, voy al médico. A nivel mental, como no es algo que sea tangible, es simplemente algo que siento y que tal vez puedo ir sobrellevando. Sigo yendo a trabajar, sigo en la misma vorágine. Todo eso se va acumulando y de un momento al otro, por algún lugar termina explotando y siempre repercute en lo físico. Una ansiedad, que vos creés que es un poco de nerviosismo que ya va a pasar, puede repercutir en tener palpitaciones y ahí te das cuenta".


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