Resultados: Quién gana las elecciones en Cataluña

Cataluña votó hoy en unos comicios regionales marcados por la pandemia, la necesidad de salir de la crisis política y una significativa baja en la participación, tres años después del fallido intento de secesión de España, con un Gobierno interino y el Parlamento disuelto.

Sefún los sondeos, el candidato del Partido Socialista de Pedro Sánchez que gobierna España, Salvador Illa, ganaría las elecciones en votos, pero los independentistas suman mayoría, según los sondeos. 

El independentista ERC será el partido con más escaños (entre 36 y 38), seguido de cerca por PSC (entre 34 y 36) y Junts (de 30 a 33). 

El ultraderechosta Vox entra con fuerza en el Parlament (6 o 7 escaños) y supera al PP (entre 4 y 5). Ciudadanos se desploma al bajar de 36 a entre 6 y 7 parlamentarios. 

Por decisión de la Junta Electoral Provincial (JEP) todas las mesas se han cerrado a las 20.00 para empezar el escrutinio, incluso las que se han constituido con retraso. 

La participación en las elecciones autonómicas en Cataluña ha caído 22,5 puntos a las 18.00 respecto a los comicios de 2017, con los datos del 97% de las mesas comunicados. Un 45,73% de participación frente al 68,26% de hace cuatro años. 

Sin embargo, el incremento de un 350% de los sufragios por correo y la distribución de los electores por franjas horarias dificultan la comparación con comicios anteriores. 

El conseller de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia, Bernat Solé, ha anunciado que el recuento se alargará para evitar contagios de coronavirus.

 Esta es la cuarta vez que se vota en la comunidad desde que comenzó el procés hace 10 años. 

Tres partidos se disputan la victoria: el Partit dels Socialistes (PSC), Esquerra Republicana (ERC) y Junts per Catalunya. La incógnita está, sin embargo, en cuál será el Gobierno resultante tras las elecciones, ya que se necesitarán alianzas entre partidos para alcanzar una mayoría suficiente. 

Los partidos independentistas cerraron la campaña poniendo por escrito que no negociarán con el PSC y este ha expresado su preferencia por Catalunya en Comú, el referente catalán de Unidas Podemos.

La elección de hoy

Cataluña votó hoy en unos comicios regionales marcados por la pandemia, la necesidad de salir de la crisis política y una significativa baja en la participación, tres años después del fallido intento de secesión de España, con un Gobierno interino y el Parlamento disuelto.Los independentistas, en el poder desde 2015, aspiran a mantener su mayoría en el Parlamento regional, pese a las divisiones internas, en unas elecciones, que se presentan como una ajustada lucha entre los dos partidos separatistas del gobierno regional, Juntos por Cataluña (JxC) e Izquierda Republicana (ERC), y los socialistas del presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez.Entre notables medidas de seguridad para minimizar el riesgo de contagio de coronavirus, los catalanes votaron para elegir a 135 diputados: 85 por Barcelona, 18 por Tarragona, 17 por Gerona y 15 por Lérida, las cuatro provincias de la región.A dos horas del cierre de los comicios ya estaba claro que la participación había sufrido un derrumbe: a las 18 (14 hora argentina) era la segunda más baja en la historia de las elecciones en Cataluña, con una caída de 22,5 puntos porcentuales con respecto a las elecciones regionales de 2017 y se ubica en 45,72%.Esta caída, que se vio mayormente en Tarragona y en menor medida en Lleida, se podría deber a las medidas preventivas tomadas por la pandemia.No obstante, las solicitudes de voto por correo ascendieron alrededor de 270% respecto de los comicios de 2017, es decir el triple, con 270.392, lo que implica la cifra más alta desde las primeras elecciones autonómicas de 1980.El consejero de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia del Gobierno regional, Bernat Solé, informó a la prensa que esperan que cuando se sume el voto por correo la participación aumente. Además, adelantó que el escrutinio podría tardar más por las medidas especiales del protocolo sanitario.Las medidas especiales marcaron el ritmo de votación de la jornada.Hasta las 12 solo pudieron votar las personas que pertenecen a grupos de riesgo, mientras que los contagiados, los que están en cuarentena o son casos sospechosos solo podrán sufragar en la última hora -de 19 a 20- cuando el personal del centro electoral estará equipados con monos de protección, guantes y pantalla facial, informó la agencia de noticias AFP.El escenario político se presenta fragmentado con nueve partidos y coaliciones, pero las chances de triunfos parecen reservadas a dos o tres fuerzas. No obstante, nada estará dicho hasta que se insinúen las alianzas que permitan una mayoría parlamentaria.Por eso, el expresidente de la Gobierno regional, el destituido Quim Torra, pidió hoy que todos los catalanes vayan a votar "masivamente, por Catalunya y por la vida": "Nos pueden inhabilitar, nos pueden reprimir, pero tenemos nuestro voto", según un comunicado citado por el diario La Vanguardia.La intendenta de Barcelona, Ada Colau, en tanto, llamó a participar para "frenar a la extrema derecha", en referencia al partido Vox, que en los últimos años consiguió representación parlamentaria en gran parte del país.Los resultados electorales deberían conocerse esta noche, pero la formación del gobierno se augura compleja en un escenario de alta fragmentación política y múltiples recelos entre partidos.El fuerte repunte de la pandemia experimentado en toda España después de Navidad llevó al Gobierno catalán a tratar de aplazar los comicios a finales de mayo pero la Justicia lo impidió, devolviéndolos a su fecha inicial.Los analistas prevén una alta abstención por el desgaste ciudadano ante el enquistamiento del conflicto político y el miedo al contagio.Este temor de la ciudadanía quedó reflejado en el hecho de que más del 40% de las 82.000 personas designadas por sorteo para formar parte del dispositivo electoral presentaron alegaciones para no acudir. Aunque muchas fueron aceptadas, las autoridades aseguran que el dispositivo electoral no estuvo en riesgo.Cataluña, de 7,8 millones de habitantes, vive sumida en la inestabilidad política con cinco elecciones regionales desde 2010, cuando empezó el auge independentista.La tensión alcanzó su punto máximo en octubre de 2017, por la celebración de un referéndum ilegal de autodeterminación y la fallida proclamación de una república independiente bajo la Presidencia de Carles Puigdemont, exiliado desde entonces en Bélgica.Después de ese fracaso, los independentistas mantuvieron el poder pero sus aspiraciones secesionistas se vieron frenadas por las fuertes desavenencias entre la línea más dura de JxC de Puigdemont y la estrategia moderada de ERC, y las detenciones de casi una decena de líderes.Los dos se disputan el liderazgo del movimiento, hasta ahora ostentado por los aliados de Puigdemont, que prometen reanudar el camino de la ruptura unilateral si se supera el 50% de votos por partidos separatistas. El desenlace de esta pelea interna puede repercutir en la estabilidad de Sánchez, cuyo gobierno de coalición minoritario se sustenta entre otros en los diputados de ERC en el Congreso español.

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