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Las cámaras empresarias buscan asumir nuevos liderazgos en Mendoza

La Federación Económica de Mendoza (FEM) y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) trabajarán en conjunto. Un camino de crecimiento y visibilización de lo que alguna vez fueron conocidas como "las fuerzas vivas".

El gremialismo empresario tiene en Mendoza una vida activa notoria. Los municipios más lejanos a la fuerza centrípeta del área metropolitana tienen allí un verdadero capital en lo que alguna vez se denominó como "las fuerzas vivas": los sectores de la producción, la industrialización y el comercio, unidos o cada uno por su cuente.

Son estructuras de defensa, pero también de propuesta; de acción y también de lobby. En muchos casos, inclusive, han dedicado espacio al diagnóstico a fondo y a la planificación de cuestiones que, siendo jurisdicción del Estado, este no ha sabido, podido o querido encarar.

En los últimos tiempos, sacudidas por igual por la falta de un rumbo económico claro en el país y la ausencia de una variada matriz productiva en Mendoza, han reunidos esfuerzos para cobrar mayor dimensión y poder decir con más fuerza lo que quieren decir y que las une.

Ahora, hacia adentro de cada una de las asociaciones empresarias y productivas han también procesos que buscan su transformación. Se vive en cada una de ellas en una puja que es silenciosa, pero real y que, al final de cuentas, busca construir poder.

En ese contexto se mueven como en un sistema solar que las mantiene conectadas el CEM, la UIM, la UCIM, la FEM, la Camarco, la Cecim y muchas más que se agrupan detrás de alguna de estas o de otras. A su vez, algunas tienen referentes nacionales a las que adscriben a veces amistosamente y otras no, como fue el caso de la Cámara Argentina de la Construcción de Mendoza con la Camarco nacional a raíz de Portezuelo del Viento, en donde la local asumió una defensa a rajatablas del proyecto. La Unión Industrial de Mendoza consiguió una silla en la conducción de la UIA. Y la Federación Económica de Mendoza tanto como la Cámara de Empresas Constructoras Independientes de Mendoza, se vinculan al sector pyme nucleado en la CAME nacional.

Ahora, FEM y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) firmaron ayer un convenio de colaboración "para articular en forma conjunta acciones que tengan como fin contribuir al desarrollo integral de la provincia de Mendoza". Alfredo Cecchi y Carlos Iannizzotto firmaron el acuerdo y Cecchi fue a los bifes, tras los mensajes protocolares: Queremos tener mayor peso y decisión en la provincia", dijo.

Allí está la clave de las alianzas de sectores, ya que sabido es que no se tratan precisamente de comisiones de festejos parroquianos, sino de grupos que buscan beneficios para sus asociados. Son entidades gremiales, aunque empresarias. Y en cierto punto, en el caso de Mendoza, al menos, han logrado una sucesión y cierta democracia interna, a diferencia de los otros gremios, los de trabajadores que parecen pugnar por ser patrones y no empleados.

Iannizzotto, un hombre a quien la política no le es ajena y, además, tiene un rol preponderante a nivel nacional en la Comisión de Enlace del Campo, sostuvo en el encuentro con la FEM que "hora podemos integrar a todos los núcleos productivos, no solamente al agro, sino también a la unión de las pymes con las cooperativas y a actividades comerciales con agroindustriales". 

Agregó que "hay una diversidad de aspectos que hacen a la economía y hoy en día están desunidos". Y fue claro y concreto al dar cuenta de su reunión con Cecchi: "La intención de este convenio es solucionar temas logísticos, ver aspectos ferroviarios y fundamentalmente darle de vuelta a Mendoza una envergadura a nivel nacional, sobre todo también en la comercialización hacia el exterior con la salida al Pacífico".

Cecchi, a su turno, dio cuenta de la intención de su conducción, asumida no hace mucho tiempo: "Queremos nacionalizar los temas para tener mayor peso en la provincia. Además la idea viene con logística, con conectividad, trata temas de regionalización de convenios colectivos de trabajo y demás".

El camino que empiezan recorrer seguramente será acompañado por otros sectores, necesaria y complementariamente. Porque las decisiones centralizadas en Buenos Aires solo puede ser corregidas y mejoradas si quienes pretenden hacerlo saben del tema y además, tienen estatura suficiente para afrontarlo.

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