Portezuelo del Viento, el malparido
Lo transcendental y transformador sería hacer Portezuelo. Le sirve a Mendoza, lo quiere Malargüe.
Sin dudas es "la obra pública del siglo" para los mendocinos y mendocinas. No sólo porque permitiría mejorar la utilización del agua, sino porque en la construcción del faraónico embalse se necesitaría mucho RRHH. De ella se espera una importante utilización de mano de obra en la cual las Pymes tendrían una destacada participación.
El gobierno nacional ha realizado los pagos que le corresponde a la provincia (U$S 1023000000.-), que no son otra cosa que dineros reclamados, o por regalías mal liquidadas, o aportes adeudados, por los cuales la Nación decide resarcir a las provincias ante la falta de la aplicación de la ley de Coparticipación.
En ese contexto el PEN firma compromisos de pago con Mendoza, los cuales tienen un uso específico, realizar la obra Portezuelo del Viento. A su vez escucha el reclamo de La Pampa, e insta a ambas provincias a no abandonar el diálogo y llegar a un acuerdo sobre el Uso de las aguas del Rio Grande (Mendoza) y así evitar que se reduzca el caudal aguas abajo del Río Colorado afectando a La Pampa. La propuesta de nuestro gobernador fue seguir las acciones jurídicas que no pongan en riesgo el patrimonio provincial y que lleven a una resolución del problema: solicitar el Laudo Presidencial.
Agotada toda instancia de negociación con la provincia de La Pampa y las demás afectadas que se sirven del caudal del río Colorado, se le pide al Presidente de la Nación que se expida al respecto, cosa que aún no hace y lo que permite que se abran variopinto de elucubraciones, o posibles respuestas y entonces montón de reacciones.
Malargüe, el más afectado de los departamentos de Mendoza, enfrenta a vecinos y gobierno municipal porque pierde la última posibilidad de reactivar su economía ( ya la ley 7722 del agua lo aleja de la actividad minera), generar trabajo por un largo tiempo, y con aires de rebelión indenpendentista hartos de tantos NO.
La provincia encerrada en sus decisiones sobre la minera, y aún con aciertos, no logrará dar respuestas a las pymes que esperanzadas conformaron ute's, hicieron y pagaron por estudios, presentaron documentación, estuvieron en cuánta licitación al respecto hubo, y hoy tienen menos de lo que invirtieron, menos dinero y menos tiempo.
Que la nación le quite el término de "uso específico" y le permita a la provincia de Mendoza planificar y utilizar esos fondos para otras obras que también son de importancia, se parece más a un arreglo extrajudicial que a una decisión política de que la obra se haga si o si.
Lo transcendental y transformador sería hacer Portezuelo. Le sirve a Mendoza, lo quiere Malargüe. Lo cómodo y políticamente correcto para la Nación es decirle a Mendoza que ocupe esos dineros para lo que quiera, menos Portezuelo!
En fin, el bebé viene de cola y solo saldrá con forces.
SERGIO GOMEZ