Alerta roja por los pagos al FMI y la falta de reservas para poder cumplir
Ante la demora para lograr un acuerdo con el Fondo, el gobierno nacional tuvo que recurrir a reservas netas que -según analistas- podrían quedar en apenas US$300 millones si se paga un vencimiento de enero. No hay plata para pagar el vencimiento de marzo.
Aunque no hay información oficial en torno a la cantidad de reservas netas que tiene el Banco Central, analistas de mercado estiman que los US$39.000 millones que se conocen como reservas totales, quedarían reducidos a US$300 millones netos, si es que la Argentina paga el vencimiento de enero con el FMI. Lo peor, es que para marzo, cuando hay un vencimiento aún más grande, no hay fondos para poder pagar.
En un estado de alerta roja por la situación, el problema que se le generó al gobierno nacional fue la demora en cerrar el acuerdo con el FMI por los US$44.000 millones que le prestaron a Macri, cuestión que esperaban tener resuelta antes de fin de año, pero que no es posible cerrar por la negativa de la administración Fernández a aplicar un ajuste y presentar un plan económico serio.
La próxima semana se le tienen que pagar al Fondo US$1.100 millones, los que se suman a los US$5.160 millones que se pagaron durante el año pasado, especialmente a fin de año, vencimientos a los que se les hizo frente con los dólares que llegaron de los DEG del FMI, los cuales terminarán este mes de vuelta en su totalidad en las arcas del organismo.
El problema mayor es que el acuerdo no se logra y en marzo el vencimiento por la deuda es de US$2.900 millones y en Casa Rosada no descartan incumplir con los pagos.
A todo esto, se suma la situación interna con el dólar que está presionado y con el paralelo en un valor histórico.
De acuerdo a analistas consultados por Infobae, no hay poder de fuego en el BCRA para intervenir en el mercado interno y se quedaría con unos US$300 millones netos.
En este caso, los especialistas estiman que la única forma que tiene la entidad para contener el precio de la divisa irá por por activar el swap con China, transformando yuanes en dólares, o utilizar alguna porción de los encajes bancarios.
Sea cual sea el escenario, todo es muy complicado y la única pequeña luz en el horizonte es lograr el acuerdo con el FMI y no tener la presión de los vencimientos, una situación que aún parece lejana.