Los tiempos en los que Bonadio dudaba de la figura del "arrepentido"

Una entrevista realizada al juez federal a mediados de 2017, un año antes del surgimiento de la causa de los cuadernos de la corrupción. Qué decía sobre el sistema judicial de Brasil que, gracias a la "delación premiada", había encarcelado a políticos y empresarios en el "Lava Jato".

En una entrevista realizada en medio de la campaña electoral de 2017, el recientemente fallecido juez Claudio Bonadio fue consultado sobre el escándalo de corrupción más importante de la historia de Brasil y el sistema de justicia de aquel país. También se refirió específicamente a la "delación premiada" que había permitido que mediante el testimonio de "imputados colaboradores" o "arrepentidos" hayan caído en la cárcel dirigentes políticos y empresarios de peso por el lava jato.

-¿El sistema de delación premiada es otra ventaja para los jueces brasileños?

-No desconozco que es un sistema efectivo, parecido al que tienen los fiscales en Estados Unidos, pero premiar a un tipo o a una empresa porque, en su avaricia por hacer negocios, le ofrece y paga coimas a un empresario corrupto y después se lo premia sacándolo de la causa porque entrega al funcionario, no es muy ético a mi gusto. Creo que este tipo de cosas hay que pensarlas bien, en términos del balance entre la ética y la efectividad de avanzar en las causas.

En aquel entonces, en Argentina la legislación había incluido hacía meses la figura del "arrepentido" en las causas por corrupción y quizás Bonadio no imaginó que un año después él terminaría aceptando las confesiones de más de 30 imputados, entre ellos algunos de los empresarios más poderosos de Argentina como Enrique Pescarmona o Angelo Calcaterra, para que avance la causa de los cuadernos e incluso iniciar otras paralelas basándose en las declaraciones de imputados colaboradores.

Durante aquella entrevista, publicada originalmente en MDZ pero de la cual no quedan registros en ese diario, Bonadio consideró que la labor del entonces juez del lava jato Sergio Moro, actual ministro de Justicia de Brasil, hubiese sido muy distinta en Argentina: "Quisiera ver si Moro con mi código de procedimiento federal y la jurisprudencia de la Cámara Federal habría avanzado en el Lava Jato. Además, Moro atiende una sola causa, con un grupo de fiscales federales a su disposición y un grupo de la Policía Federal en Brasil trabajando exclusivamente para esa causa. Yo tengo 500 causas por secretarías que tengo que atender".

Repasá la entrevista completa, realizada el 17 de julio de 2017:

-¿Qué maniobra implementó Manzanares para evitar el embargo de activos de la sociedad Los Sauces?

-En el manual del buen juez, en causas de lavado una de las prioridades que tiene el juez es cerrar el circuito de tránsito de dinero para impedir el proceso de lavado. Había propiedades alquiladas que fueron sujetas a una intervención judicial. Los inquilinos debían pagar los alquileres (de inmuebles de Los Sauces) a la cuenta corriente de la intervención judicial, pero se hicieron bypass que permitieron depositar ese dinero en otras cuentas. Esto es lo que nos informó la intervención de la sucesión Néstor Carlos Kirchner: los inquilinos recibieron cartas de Manzanares donde decía que los alquileres se debían depositar en la cuenta del señor (Carlos) Sancho, socio de la inmobiliaria Sancho-Sanfelice (Osvaldo ‘Bochi' Sanfelice era amigo de Néstor Kirchner y socio de la familia; está procesado en la causa). Entonces, ordenamos la detención del contador, y la indagatoria del señor Sancho.

-¿Quién habría ordenado esa maniobra?

-El doctor Fayt tenía un dicho: ‘Los hechos son sagrados, las opiniones son libres'. Los periodistas tienen opinión y los jueces nos tenemos que atar a los hechos probados. Yo lo que tengo acreditada es la carta en la que el contador ordena el pago. En principio, el autor material de la obstrucción es Manzanares. Si el trámite de la investigación sugiere quién es el que ordenó esto, ahí se tomarán las decisiones procesales que correspondan.

-¿Cristina podría haber sido el cerebro de esta estrategia?

-No querría avanzar en ese sentido, por lo menos discursivamente. Acá hubo obstrucción en la tarea judicial.

-Todos los procesados son de Santa Cruz, excepto un contador chaqueño -Lisandro Donaire- que incluso trabaja en el Tribunal de Cuentas de Chaco

-Aparece en una serie de maniobras bancarias de Los Sauces. No tengo la lista en la cabeza de memoria, todos han declarado.

-¿Cuándo se elevaría a juicio la causa Los Sauces?

-Una vez que hay semiplena prueba y se ordena una indagatoria, se tiene 10 días para hacer el procesamiento. Si éste se apela y la Cámara Federal lo confirma, hay un trámite más que es la acusación definitiva del fiscal. Pero ya está en condiciones de ser elevada a juicio. En este momento, la causa está elevada a estudio de la Sala 1 de la Cámara Federal. Las cámaras no tienen plazos para expedirse.

-¿Cómo afecta su trabajo la campaña electoral?

-Hace muchos años tomé una decisión: si voy a consultar el cronograma electoral, tengo muy pocos días para trabajar. Hace mucho tiempo que manejo la agenda en función de cómo las causas van evolucionando y determinando los pasos procesales que hay que hacer. Insisto: los hechos son sagrados y las opiniones libres. Cada uno puede pensar y decir lo que sea. Yo no me ato y no miro si estamos en campaña.

-¿Por qué, mientras en Argentina la Justicia avanza muy lentamente, en Brasil ocurre lo contrario?

-La comunidad política argentina le debe a la sociedad y a la democracia sentarse y discutir reformas procesales y de fondo, que hace muchos años que no se hacen. Acá se procede reactivamente. Sin desmerecer las funciones de (juez del Lava Jato Sergio) Moro y otros colegas brasileños, quisiera ver si Moro con mi código de procedimiento federal y la jurisprudencia de la Cámara Federal habría avanzado en el Lava Jato. Además, Moro atiende una sola causa, con un grupo de fiscales federales a su disposición y un grupo de la Policía Federal en Brasil trabajando exclusivamente para esa causa. Yo, aparte de Los Sauces, tengo 500 causas por secretarías que también tengo que atender.

-¿El sistema de delación premiada es otra ventaja para los jueces brasileños?

-No desconozco que es un sistema efectivo, parecido al que tienen los fiscales en Estados Unidos, pero premiar a un tipo o a una empresa porque, en su avaricia por hacer negocios, le ofrece y paga coimas a un empresario corrupto y después se lo premia sacándolo de la causa porque entrega al funcionario, no es muy ético a mi gusto. Creo que este tipo de cosas hay que pensarlas bien, en términos del balance entre la ética y la efectividad de avanzar en las causas.

-¿Por qué imputó a Cristina en la causa dólar futuro cuando la denuncia inicial no la incluyó, ni tampoco el fiscal?

-Que una denuncia y un fiscal no incluyan a una persona no impide que se avance contra ella. El fiscal no requiere por personas, sino por hechos. Si en la investigación se arranca con un solo imputado y aparecen cuatro más, van los cinco. Ahí (en referencia al supuesto ilícito) hay una responsabilidad funcional del presidente como del ministro de Economía en la autorización a realizar esa maniobra financiera que hizo el Banco Central.

-También está a cargo de la causa por supuesto encubrimiento de los responsables del atentado a la AMIA, donde fue recusado por Cristina

-El viernes rechacé la recusación contra mí y esto va a ser elevado a la Sala 2 de la Cámara Federal que decidirá si tiene andamiaje el planteo de la defensa de la señora de Kirchner. Desde el punto de vista procesal, al rechazar la recusación, tengo plena facultades para seguir la investigación.

-¿Gils Carbó tiene que continuar en su cargo?

-Tengo opinión formada, pero le pido que me releve porque no quiero hablar de un tema que es un sindicato aparte. No quiero cometer el acto de soberbia de opinar públicamente de cuestiones del Ministerio Público Fiscal. No corresponde.

Esta nota habla de: