Kirchnerismo

Todas las teorías K, juntas: "Quilombo. Ya se armó. Porque la tocaron"

El kirchnerismo alega que ha desatado el "quilombo" preanunciado en sus cánticos porque "la tocaron". Se refieren a Cristina Kirchner. El portal mediante el cual baja línea y la canonización militante de la vicepresidenta.

"QUILOMBO. Ya se armó. Porque la tocaron. Y no sólo a Cristina: a la Argentina", escribe en título y bajada compuesta Marcelo Figueras, el periodista que acompañó a Cristina Kirchner por todo el país para presentar el libro que lleva la firma de la actual vicepresidenta, "Sinceramente". Marcelo Figueras desarrolla en el portal "El Cohete a la Luna" que dirige Horacio Verbitsky una respuesta del núcleo duro a los hechos que conmocionaron al país y que están en debate e investigación.

Con uso de un recurso poético, Figueras -de notable pluma- transforma los hechos y los cuenta de la siguiente manera:

La conjetura es un ejercicio al que nos dedicamos pocos -los artistas, los científicos-, pero que en horas como estas deberíamos intentar en masa, a escala nacional. Para entender cabalmente lo que acaba de pasar, lo que sigue pasando. Para ponernos en condiciones de alumbrar lo que vendrá. Es preciso tener el coraje de imaginar lo que habría ocurrido si el primer gatillazo, o el segundo, no hubiesen percutado en falso.

Ataque a CFK: En vez de un feriado, la primera medida era echar a Aníbal Fernández

El balazo a quemarropa. En plena cara, tal vez entrando a través de uno de los ojos. El desastre que hubiese producido en el cráneo, rebotando entre sus paredes internas. La imagen movida que las pantallas congelan y se queda a vivir con nosotros para siempre, persiguiéndonos hasta en sueños. El segundo de consternación en los presentes -un instante eterno-, antes de la explosión de dolor y de furia. El improbable destino del agresor, en manos de una multitud herida en el alma. La noticia rebotando fronteras adentro del país, produciendo desastres a su paso.

Actos de violencia impotente en la noche, el resplandor de mil fuegos. Apocalipsis de todas las vidrieras. Su resaca prolongándose como los días, el humo negro espesa incertidumbre en cada esquina. Nadie está a salvo. Y nadie se siente menos a salvo que aquellos que hasta entonces, paradójicamente, estaban más protegidos: quienes practicaban a diario la violencia verbal y gestual, sabiendo que la agresión no regresaría a morderles los talones. Ahora que contribuyeron a romper el contrato que sostenía la convivencia, ahora que decretaron el vale todo, ahora que rompieron el espejo a pesar de tanta advertencia (¿cuántas veces se les dijo: «Con la pelota en el living, no»?), ven sombras dentro de cada sombra y no concilian otro sueño que no sea químico.

Equipara más adelante, para hacerle a la presidenta un lugar en la historia, en momentos en que afronta un juicio por gravísimos hechos de corrupción por los que se la acusa junto a una docena de imputados, que "en términos de la aspiración democrática que devino contrato social en el '83, el intento de asesinato de Cristina es tan grave como las asonadas militares que tuvieron lugar entre el '87 y el '90". El resto del artículo puede leerse haciendo clic aquí.

Fuego a discreción

Desde la publicación, se sospecha de todo el mundo que no esté alineado totalmente a la líder del sector, y mientras cuestionan que se la critique, descalifican a todo el no alineado con el kirchnerismo, al punto de formular fuertes acusaciones.

Una guía de la paranoia K:

- Un comentario editorial de El Cohete a la Luna afirma todo lo contrario a lo que sucedió, desde su título: "El pueblo te cuida". No sucedió. Se la descuidó desde su propia custodia a la vez que se obligó a la Ciudad de Buenos Aire a retirarse de la zona y quitar las vallas de protección. Se pueden leer los argumentos aquí.

- Con la firma de Guillermo Wierzba, un artículo titulado "Gatillo neoliberal" afirma: "Coincide el intento de asesinato de Cristina con un alto grado de intervencionismo norteamericano". El hecho sucedería en su propio gobierno con el aval de sus integrantes. Leer aquí.

- Araceli Bellota es el nombre que aparece en un artículo que cuestiona que se la haya querido proteger desde la Ciudad de Buenos Aires. "De confusiones y vallas", se titula y allí se afirma: "La Ciudad de Buenos Aires no es una provincia y su intendente nunca debió vallar el domicilio de la Vicepresidenta. Hay que volver a federalizar el pensamiento de los argentinos". Cristina Kirchner fue una de quienes aprobó en la reforma constitucional de 1994 el actual status de la capital del país. Sin embargo, palabras en contrario se pueden leer haciendo clic aquí.

- Pero el artículo conspiranoico más contundente lo firma Horacio Verbitsky, quien abiertamente sostiene la teoría cristinista de que los fondos buitre la quieren matar. Su nota, extensa y plagada de alusiones a los años '70, se puede leer haciendo clic aquí.

Esta nota habla de: