Condena a CFK

Los fueros no anulan la condena de inhabilitación para ocupar cargos públicos

La vicepresidenta fue condenada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. ¿Qué pasará cuando eventualmente la condena quede firme?

Casi cuatro años después del inicio del juicio por la Causa Vialidad, este martes 6 de diciembre de 2022 la vicepresidenta Cristina Kirchner fue condenada a 6 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por "administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública".

Se sabía de antemano que ninguna condena haría que Cristina Kirchner sea detenida, ya que como vicepresidenta tiene fueros: por más que rápidamente la condena sea ratificada en Casación y por la Corte Suprema, los fueros evitarían que vaya presa, tal como reconoció la condenada ayer al decir que recién desde el 10 de diciembre de 2023 podría ir a la cárcel (algo que también evitaría por tener más de 70 años).

Ahora bien, los fueros no anulan la otra parte de la condena: la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Tanto la Constitución nacional como la Ley de Fueros hacen mención a que este tipo de inmunidad sólo evita "medidas restrictivas de la libertad"; es decir, la prisión.

El día después: se inicia el operativo para que CFK no vaya a la cárcel

De todas maneras, la condena de primera instancia conocida ayer debe ser ratificada por Casación y, luego, por la Corte Suprema. Recién allí habrá quedado firme tanto la pena de prisión como la inhabilitación para ejercer cargos públicos.

Llegado ese momento, si CFK aún tiene un cargo con fueros, no irá presa por contar con esa inmunidad. Sin embargo, no podría presentarse como candidata a un nuevo cargo público, ya que la condena de inhabilitación perpetua, eventualmente ratificada por la Corte, se lo impediría.

Abogados mendocinos de distintos partidos políticos coincidieron en que bajo ese escenario (ratificación de condena con CFK aún con fueros), la pena de inhabilitación no implicará su salida automática del cargo que esté ocupando.

En concreto: si la condena queda firme mientras Cristina Kirchner tiene fueros, automáticamente estará inhabilitada para ser candidata y, a la vez, sería causal de juicio político y destitución, tal como marca el artículo 53 de la Constitución nacional.

No está proscripta para 2023

Sin embargo, tal como se ha dicho, para que efectivamente esté inhabilitada para ser candidata, la condena debe ser ratificada por Casación y la Corte Suprema, algo que bajo ningún punto de vista ocurriría durante 2023. Por lo tanto, tranquilamente podrá ser candidata del Frente de Todos, más allá de que ayer dijo que no lo será.

Asimismo, si no es candidata y efectivamente el 10 de diciembre de 2023 se queda sin fueros, tampoco irá presa porque para entonces la condena no estará firme.

Esta nota habla de: