"Dos Argentinas": Bermúdez analizó el presente económico entre consumo dual
En su columna radial, el periodista Ismael Bermúdez abordó el freno en el precio del petróleo tras la tregua en Medio Oriente, el crecimiento de la desigualdad en el consumo y la fallida mejora de la calificación crediticia del país. "Hay una Argentina dolarizada y otra pesificada", sostuvo.
En su habitual columna sobre economía en Radio Post, el periodista Ismael Bermúdez trazó un panorama marcado por tres ejes: el impacto de la tregua internacional en el precio del petróleo, el fenómeno del consumo dual en el país y la frustrada mejora de la calificación crediticia de la Argentina.
El análisis arrancó con un tema de coyuntura internacional: la baja en el precio del petróleo tras el cese del fuego en Medio Oriente. Bermúdez destacó que "el precio internacional estuvo en retroceso y esperemos que esto también se manifieste aquí en la Argentina", al tiempo que cuestionó a las petroleras que remarcaron los combustibles durante el alza global. "Ahora que está reduciéndose, que también esto se manifieste directamente... a ver si lo bajan ahora", lanzó con tono irónico.
Pero el eje más fuerte de su intervención fue la creciente desigualdad en el consumo interno. "Ya son varias las consultoras que hablan de una Argentina dividida en dos", advirtió, y explicó: "Algunos hablan de una Argentina dolarizada y otra pesificada". Según detalló, mientras el consumo masivo sigue deprimido y no repuntan las ventas en supermercados, hay una parte de la sociedad que compra departamentos en dólares, viaja al exterior y accede a autos nuevos.
"El poder de compra fuera del país es muy superior para esos sectores", señaló, y agregó: "Se trata de sectores que tienen capacidad de ahorro, que pueden hacer viajes y que también dentro del país tienen un consumo mucho más elevado que el grueso de la población".
En cuanto al frente financiero, Bermúdez se refirió a las expectativas de una mejora en la calificación crediticia internacional de la Argentina, que finalmente no se concretó. "No hubo mejora. Seguimos con la misma calificación que venimos teniendo prácticamente en los últimos años. Va a haber que esperar otro año más", afirmó. Según explicó, esto frena el ingreso de fondos de inversión internacionales que necesitan mejores calificaciones para operar con activos argentinos, lo que también limita el acceso al crédito externo del país.
Finalmente, Bermúdez mencionó la euforia pasajera que generó un falso rumor sobre una inminente suba en la calificación. "Hubo una ilusión o información muy mal manejada que hablaba de que nos iba a calificar muy bien y por lo tanto las acciones argentinas en Wall Street aumentaron notablemente con esa expectativa. Y después no pasó nada", resumió.
Cerró con una reflexión sobre la volatilidad de los mercados: "Está claro que esas son las reglas de juego. Hay momentos en que se gana y momentos en que se pierde".