Tras el fin de las facultades delegadas, el Gobierno buscará modificar las competencias de la ANMAT
El ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenegger quiere modificar las competencias de la ANMAT. Uno de los objetivos es reducir "trámites innecesarios".
Con la finalización de las facultades delegadas, que dejarán de regir este miércoles, el Gobierno avanzará en la modificación de los procedimientos que lleva adelante la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica).
Según confirmaron fuentes oficiales, la intención es simplificar la operatoria del organismo para facilitar la entrada de productos extranjeros que ya cuenten con avales internacionales. "Buscamos que las competencias de la ANMAT tengan coherencia", comentaron desde el Ejecutivo.
En ese sentido, el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, bajo la conducción de Federico Sturzenegger, evalúa cada gestión a cargo del organismo. La revisión apunta a reducir trámites considerados innecesarios.
Uno de los cambios centrales sería aceptar certificados emitidos en países como Estados Unidos o de la Unión Europea. La idea es evitar la doble verificación y así recortar costos y tiempos. "Se reconocería documentación que tiene validez global, lo que elimina la necesidad de realizar la certificación dos veces", detallaron desde el entorno gubernamental.
Algunas de estas modificaciones ya comenzaron a implementarse. En mayo pasado, por ejemplo, se anuló la exigencia de autorización sanitaria de la ANMAT para traer termos Stanley del exterior. Antes se requería un permiso porque el recipiente estaba en contacto con alimentos, pero ahora las compras individuales ya no necesitan esa habilitación previa
Cómo se organiza la ANMAT
La ANMAT está compuesta por cinco institutos:
INAME - Instituto Nacional de Medicamentos.INAL - Instituto Nacional de Alimentos.INEI - Instituto Nacional de Productos Médicos.INPB - Instituto Nacional de Productos Biológicos.INFAR - Instituto Nacional de Farmacología.Entre los tres institutos relacionados con medicamentos y productos biológicos, se encargan de tramitar más de 10 certificados, entre los que figuran la etiqueta del Registro Nacional de Establecimiento (RNE), de las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF), tanto nacionales como del país de origen del producto, y las autorizaciones previas de importación, donde se registra el producto y el laboratorio donde se realizó.
Por otro lado, el INAL realiza más de cinco certificaciones, que buscan garantizar la calidad y legalidad de los productos que se producen, según el sitio de la ANMAT.
Los juguetes: otro de los objetivos del Gobierno
La intención de darle prioridad a los certificados internacionales también llegó a los juguetes, en medio de la proximidad del Día del Niño. "Estamos trabajando con el Ministerio de Salud (ANMAT) y con Producción para que los juguetes ingresen a la Argentina sin necesidad de pasar por el test de ftalatos acá. Eso bajaría fuertemente el precio de los juguetes", aseguró Sturzenegger, en diálogo con LN+.
Los ftalatos son un grupo de compuestos químicos que se utilizan como plastificantes para hacer los plásticos más flexibles, y a veces pueden aparecer en los muñecos que consumen los niños.
Aunque todas estas medidas ya están en la carpeta del Ministerio de Desregulación, este medio pudo confirmar que aún no hay una fecha definida para publicarlas.