El dólar se disparó, las tasas subieron y crece la tensión
El periodista económico Ismael Bermúdez analizó en Radio Post la escalada del dólar, cuestionó la reacción del Gobierno ante la corrida y advirtió que la presión cambiaria continuará hasta las elecciones. "Si el kirchnerismo resucita, algo mal tuvo que haber hecho este gobierno", afirmó.
La fuerte suba del dólar en julio, que cerró el mes en $1380, refleja "cambios muy pero muy importantes" en la economía argentina, según el periodista Ismael Bermúdez, quien este viernes analizó en Radio Post la situación cambiaria y política del país. "Ese retroceso que hubo en la segunda mitad del año pasado se revirtió. Llegó al borde de la banda y eso es lo que alarmó un poco", advirtió.
El Gobierno reaccionó atribuyendo la corrida a razones políticas. El presidente Javier Milei culpó a la vicepresidenta Victoria Villarruel por haber habilitado en el Senado sesiones donde se votaron cambios jubilatorios y mejoras para personas con discapacidad. Por su parte, el ministro de Economía, Luis Caputo, habló del "riesgo kuka" para referirse al posible regreso del kirchnerismo.
Pero Bermúdez fue contundente: "Si una sesión del Senado puede llevar a una corrida cambiaria, evidentemente tiene que haber problemas más de fondo en la economía. Habla de una debilidad propia", sostuvo. Y agregó: "Si después del desastre que fue el gobierno de Alberto Fernández existe la posibilidad de que el kirchnerismo vuelva con fuerza, evidentemente algo mal tuvo que haber hecho este gobierno".
Para el periodista, el verdadero problema está en el deterioro de las cuentas externas. "Como siempre decimos, salen más dólares de los que entran. Y eso no se puede mantener en el tiempo", explicó. En ese sentido, recordó que el JP Morgan ya había recomendado hace semanas frenar el carry trade y pasarse al dólar, lo que fue una señal clara de desconfianza.
Además, la menor oferta de divisas tras la liquidación del agro, sumada a la estacionalidad, el contexto electoral y la brecha entre el costo argentino en dólares y el exterior, provocaron una mayor demanda de dólares que derivó en "una especie de mini corrida". El Gobierno, para evitar males mayores, elevó fuertemente las tasas de interés, pero ni así logró renovar la totalidad de la deuda en pesos. "Eso mostró una enorme debilidad para sostener la política cambiaria", subrayó.
Bermúdez también alertó sobre el impacto económico y social de la recesión. "La actividad económica está achatada. Hay grandes empresas que dicen que se les cae la demanda, no pueden seguir trabajando, tienen que hacer suspensiones. Hablamos de siderurgia, textil y metalmecánica. Eso va a tener correlato electoral", advirtió.
Sobre el clima político, el periodista trazó una metáfora inquietante: "Vivimos un momento de lucha libre, donde todo es meme. Falta una pelea reglamentada, con disciplina. El presidente no puede emitir una frase sin que vaya acompañada de un insulto. Eso demuestra una debilidad argumental muy pero muy importante".
Por último, anticipó que esta "tensión cambiaria se va a mantener con mucha fuerza" al menos hasta las elecciones del 27 de octubre, momento en el cual se podrían despejar algunas de las dudas que hoy agravan el frente económico.