La explicación del dueño de HLB Pharma por la contaminación del fentanilo
El empresario Ariel García Furfaro declaró ante la Justicia y afirmó que alguien contaminó las ampollas del medicamento que ha llevado a la muerte de cerca de 100 personas. Además, apuntó contra un exdiputado provincial.
La investigación por el fentanilo contaminado avanza y suma testimonios clave. En su declaración indagatoria, el dueño de HLB Pharma y principal apuntado en la causa Ariel García Furfaro, sostuvo con firmeza que la tragedia se debió a un acto intencional y no a irregularidades en la producción.
El acusado declaró ante el juez federal Ernesto Kreplak e insistió: "Esa bacteria alguien la metió". El empresario reiteró que la hipótesis central es la de un sabotaje externo. Furfaro fue directo en sus acusaciones: apuntó contra Andrés Quinteros, exdiputado provincial vinculado al kirchnerismo, con quien supo tener una estrecha relación pero hoy está enfrentado. "No tengo dudas de que Quinteros está detrás de esto", lanzó durante la audiencia en los tribunales federales de La Plata.
Por otro lado, el dueño de HLB Pharma defendió a sus equipos de trabajo: "La gente que tengo en Ramallo es impecable. Si algún empleado mío hizo una maldad, me hago responsable, pero son gente de trabajo". Sobre las condiciones de higiene, aseguró que la limpieza se realiza "todos los años" y que las máquinas están "impecables y nuevas". No obstante, informes del Instituto Malbrán contradijeron esa versión al detectar irregularidades en los procedimientos.
Furfaro, sin embargo, fue categórico: "Es imposible que la bacteria esté dentro del laboratorio. Alguien la puso". El empresario también se refirió a los controles de la ANMAT, cuestionando la burocracia en la presentación de planillas. "Habrá cosas con las planillas, puede ser, pero cada vez que venía ANMAT te pedían cinco hojas más", señaló. En tono desafiante, cerró: "Que me corten la cabeza si tengo responsabilidad", descartando cualquier admisión de errores internos y reafirmando que todo se debió a un sabotaje.
El juez Kreplak cuenta con un plazo de diez días hábiles para definir la situación procesal de García Furfaro. Podría dictar su procesamiento por homicidio culposo o doloso, en un expediente que ya tiene a casi un centenar de víctimas fatales y que sigue bajo investigación.