Subir al Aconcagua: costos, seguros y nuevas normas ambientales
La temporada estival se extenderá del 1 de noviembre de 2025 al 30 de abril de 2026, mientras que la invernal regirá entre el 1 de mayo y el 31 de octubre.
La temporada de montaña en el Parque Provincial Aconcagua quedó oficialmente definida: el período estival será del 1 de noviembre de 2025 al 30 de abril de 2026, mientras que la temporada invernal abarcará del 1 de mayo al 31 de octubre. El Gobierno publicó en el Boletín Oficial la reglamentación completa, que incluye nuevas tarifas, requisitos médicos, seguros obligatorios y medidas ambientales para visitantes y prestadores de servicios.
Para quienes deseen recorrer el circuito turístico de la Quebrada de los Horcones, el acceso diario costará $10.000. El trekking diario, disponible entre el 15 de noviembre y el 10 de abril, tendrá tarifas diferenciadas: $15.000 para mendocinos, $25.000 para argentinos residentes, $45.000 para latinoamericanos y $55.000 para turistas internacionales.
Los ascensos con asistencia de prestadores de servicios, por las rutas de Horcones o Vacas, tendrán un costo de $100.000 para residentes de Mendoza y hasta US$1.450 para visitantes extranjeros. En tanto, los ascensos sin asistencia oscilarán entre $140.000 y $330.000 para argentinos y hasta US$2.000 para extranjeros. Las actividades con pernocte, incluyendo trekking corto y largo, estarán habilitadas hasta Semana Santa de 2026, con tarifas diferenciadas según la ruta y la nacionalidad.
La normativa establece además nuevas exigencias sanitarias. Todo andinista deberá contar con un seguro o servicio de evacuación que cubra rescate y atención médica desde los 5.600 metros de altura, excepto quienes utilicen prestadores nacionales durante la temporada con cobertura aérea y médica oficial, vigente del 1 de diciembre al 15 de febrero.
Las actividades de alto riesgo -como parapente, esquí en glaciares o ascensos por la pared sur- solo podrán realizarse a través de empresas habilitadas con pólizas específicas; la infracción de esta norma implica multas de hasta US$10.000.
En materia ambiental, la reglamentación incorpora cambios significativos: los campamentos base Plaza de Mulas y Plaza Argentina se relocalizan para cumplir la Ley de Glaciares, se exige la trazabilidad de residuos y materia fecal, y se refuerza el Programa de Bienestar Animal para las mulas, financiado mediante un "ticket mula" de US$6 por animal. Además, se establecen límites estrictos para la acumulación de residuos y sanciones de hasta US$7.000 por instalaciones no declaradas.
El canon para empresas prestadoras varía según el campamento y la estructura: US$1.150 por unidad en campos base y US$1.400 por domo en campamentos de altura. También se fija un arancel del 1% sobre los servicios turísticos y la obligación de mantener operativos los campamentos desde diciembre hasta la salida del último visitante.
Por último, las evacuaciones aéreas tendrán un costo que va de US$1.800 a US$9.750 según el tramo, mientras que los vuelos privados deberán abonar US$190 por operación.