Investigación judicial

Quién es Miguel Ángel Calvete, el empresario que quedó en el centro de la causa ANDIS

La Justicia lo investiga como articulador de un esquema de sobreprecios que habría funcionado durante la gestión de Diego Spagnuolo. Fue el primer citado a indagatoria, aunque se negó a declarar, y está vinculado a una red de empresas, visitas y comunicaciones que lo ubican como pieza clave en la causa.

Miguel Ángel Calvete pasó en pocos días de ser un nombre conocido por su rol como vocero del sector de supermercados chinos a convertirse en una de las figuras principales de la investigación por presuntos sobreprecios en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). La Justicia lo apunta como un engranaje esencial dentro del sistema de contrataciones bajo sospecha.

El empresario fue el primer citado a indagatoria en los tribunales de Comodoro Py, aunque optó por no responder preguntas. Para los fiscales, actuó como operador clave durante la gestión de Diego Spagnuolo, articulando vínculos y favoreciendo a un grupo de proveedores mediante maniobras que ahora están bajo análisis.

Los investigadores reconstruyen que Calvete habría tejido una estructura de contactos que le permitió influir en la asignación de contratos millonarios. Dentro de esa trama aparecen firmas como INDECOMM S.R.L., Profusión S.A. y Profarma S.A., señaladas como beneficiarias de esa red de intermediación.

Buena parte de las pruebas surgió tras un allanamiento realizado el 9 de octubre en su vivienda de San Telmo. Allí se secuestraron tres teléfonos y cuadernos con planillas donde figuraban empresas, empleados de la ANDIS, dueños de droguerías y otros nombres que formarían parte del circuito investigado.

De acuerdo con la hipótesis judicial, Calvete operaba como una especie de "jefe paralelo" dentro del organismo, habilitando pagos y moviendo expedientes a través de vínculos tanto internos como externos. Su rol lo colocaba como nexo entre los proveedores y las decisiones administrativas de Spagnuolo y su entorno.

Chats, visitas y señales de influencia

Los mensajes que intercambió con Daniel Garbellini -segundo de Spagnuolo- son uno de los puntos más comprometedores. Allí se observa cómo Calvete sugería prioridades, consultaba por expedientes y presionaba para destrabar pagos. A eso se suman al menos cinco visitas registradas a la casa de Spagnuolo en un country bonaerense entre junio de 2024 y mayo de 2025.

El expediente también incluye imágenes del exdirector de la ANDIS entrando y saliendo del domicilio de Calvete, acompañado por audios donde el empresario propone coordinar entregas de manera discreta. En esas conversaciones aparecen referencias a "Coroa" -presunto apodo de Spagnuolo- y a otro operador señalado como "Play".

Otro elemento que complica al empresario es el rol atribuido a su pareja, Guadalupe Ariana Muñoz. Los investigadores creen que ella era quien administraba el flujo de dinero: retiraba efectivo, hacía transferencias, movía cheques y manejaba fondos guardados en cajas de seguridad.

Un actor político y un antecedente penal

Antes de quedar ligado a la causa ANDIS, Calvete ya era una figura visible en los medios. Durante años se presentó como representante de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas, opinando sobre aumentos de precios e inflación. También tuvo un recorrido político: fue concejal de Cambiemos entre 2015 y 2019 y aportó a distintas campañas, lo que -según la investigación- le habría facilitado acceso a áreas sensibles del Estado.

Su historial judicial tampoco es menor. En 2019, el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 8 lo condenó a cuatro años de prisión por explotación económica de la prostitución ajena, junto a su hermano y a un empleado del Consejo de la Magistratura porteño. El fallo incluyó el decomiso de dos propiedades utilizadas como prostíbulos y la prohibición de salir del país.

Mientras esa condena sigue vigente, avanza también su situación en la causa ANDIS. Este miércoles continuarán las indagatorias y será el turno de Spagnuolo, señalado como el líder de la organización dedicada a direccionar contratos millonarios vinculados a medicamentos, prótesis e insumos.

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