¿Cómo proteger a las mascotas de los fuegos artificiales?

Si bien es un hábito que ha ido disminuyendo con el paso del tiempo, la pirotecnia en las Fiestas sigue existiendo y los animales son uno de los grupos que más sufren en ese momento. El médico veterinario Leandro Ríos habló con "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y se refirió a las mejores estrategias para cuidar a nuestras mascotas en ese momento.

"Es un tema importante. Hay que tener en cuenta que hoy en día la pirotecnia está prohibida en la provincia y lo mismo se sigue utilizando; confiando en eso, nos relajamos un poco con las mascotas y se ocasionan los problemas. Lo principal es tratar de no dejar solas a las mascotas, en lo posible que esté acompañada. Un perro o un gato son nuestro animal de compañía y al encontrarse solos, pueden entrar en un pánico que puede ser poco controlable y desfavorable para su salud", comentó el veterinario.

El profesional explicó que el oído de los animales es mucho más agudo que el del humano: "Genera una mayor sensación auditiva, un pánico importante, un nerviosismo y a veces hasta la pérdida de control del animal: entra en un estado de pánico que no sabe a dónde dirigirse y por eso por ahí aparecen muchas mascotas perdidas".

Además, también advirtió en las fiestas el tema de la alimentación para las mascotas: "Hay animales que están con una dieta muy controlada, con alimento balanceado, uno dice ‘le damos unos huesitos, un poco de grasa' en el momento y en realidad provoca unos disturbios gastrointestinales que a veces comprometen la vida del animal".

A su vez, destacó que esto sucede no solo con los perros sino con diferentes animales: "Para todas lo mismo, hay algunas razas que son más nerviosas que pueden tener mayor consecuencia. No olvidemos que no es solo los perros: los caballos viven en un box y el otro día en la Fiesta de la Cerveza hubo un descontrol con la pirotecnia en el hipódromo, no se tuvo en cuenta y los caballos sufrieron mucho; y eso que fue un evento oficial. Los gatos también lo sufren mucho, pero el gato es más particular: presiente antes y va y busca sus lugares, se esconde. Tiene un comportamiento distinto al del perro, no es tan dependiente".

Por otra parte, explicó que lo importante en el momento es que el animal no se sienta abandonado: "Una vez que pasen los sonidos, el animal va a volver a la normalidad, por lo tanto tiene que estar contenido. Lo principal es no alejarse mucho del domicilio, tratar de contenerlo de una forma afectiva para que sufra menos y no sienta una sensación de abandono. Consultar con su veterinario de confianza para medicarlos, no todos los perros pueden usar tranquilizante, algunos animales pueden sufrir alguna patología que puede ser controversial darle algún tranquilizante. Hay muchas acciones que podemos hacer, como tapar los oídos con algodones, dejarles un lugar oscuro para que estén tranquilos, no encerrados porque pueden entrar más en pánico, pero sí que sientan la compañía y el apoyo del dueño".