Educación: 3 de cada 4 jóvenes terminan la secundaria en la Argentina

En las últimas horas se conoció un informe de Argentinos por la Educación, en donde entre otros datos se supo que cerca del 75% de los jóvenes concluyen sus estudios secundarios en la Argentina, creciendo el porcentaje en relación a 10 años atrás. Federico del Carpio, coordinador de Políticas Educativas de Argentinos por la Educación, habló con "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y se refirió a los datos que arrojó el último estudio.

"Quisimos investigar cómo eran estos datos acerca de la terminalidad, hicimos este nuevo informe en donde vemos que tres de cada cuatro jóvenes, alrededor del 75% terminan la secundaria, obtienen el título de secundaria, lo que es una muy buena noticia porque vemos que es un porcentaje que viene aumentando en los últimos años. Hemos pasado de tener más o menos el 50% de terminalidad hace diez años a tener hoy más del 70%, así que es una muy buena noticia", comentó del Carpio.

El coordinador de Políticas Educativas de la organización explicó que en este caso detallaron los números según el género y el nivel socioeconómico: "Cuando lo vemos por género, nos está dando una constante a lo largo de los años, que es que las mujeres terminan en mayor cantidad que los varones. Si bien siempre fue así, ahora como ha aumentado, se ve un poquito más. Los varones terminan alrededor del 70% y las mujeres el 77% por ciento. Hace diez años atrás también terminaban más las mujeres que los varones, pero era 62% contra 72%, eran diez puntos de diferencia, hoy se acortó un poquito, pero siguen siendo las mujeres quienes más terminan".

En esa línea, añadió: "Cuando lo vemos por nivel socioeconómico, acá lo que vemos también es una constante: quienes tienen mayor nivel socioeconómico, mejor poder adquisitivo, tienen una terminalidad muy alta históricamente, ha pasado de casi el 90% al 92%, es muy alto. En los niveles socioeconómicos más bajos ha aumentado también, aunque pasando del 40% al 60%. Para simplificar, los más ricos lo terminan en una gran proporción, 9 de cada 10, y los más pobres terminan 6 de cada 10, hay una diferencia ahí de 30 puntos porcentuales. La buena noticia es que en los últimos diez años los más pobres han crecido un montón en la terminalidad".

En referencia a los motivos, del Carpio destacó la obligatoriedad del nivel secundario y los planes de finalización: "Hay que tener en cuenta la progresión histórica, en términos de que la educación secundaria es obligatoria pero no hace tantos años, en relación a la escuela primaria que tenemos la obligatoriedad desde hace muchísimos tiempos y en cambio la secundaria es desde el 2006. Han pasado casi veinte años, pero todavía es un nivel que se está consolidando. Un nivel que nació pensado más para las elites y hoy está pensada para todos. Entonces, viene con una matriz que ha dificultado al inicio el acceso y la permanencia de los estudiantes".

En referencia a esto, añadió: " Por otro lado también podemos pensar que este aumento en los últimos años tiene que ver por un lado con la asignación de becas para ayudar en la terminalidad educativa, que eso ha significado bastante, pero también los programas que han ayudado a la terminalidad como postsecundaria: si bien hay un montón de chicos que no terminan en la edad correcta, por ahí terminan la secundaria un poco más tarde y esto es gracias también a los programas vinculados en la educación de jóvenes y adultos".

A su vez, señaló que "el gran desafío" es sumar la calidad educativa: "Hace tiempo armamos el Acuerdo por la Educación, desde Argentinos por la Educación, en donde se establecieron las prioridades educativas, donde más de 200 expertos se pusieron de acuerdo en cuáles eran las prioridades, y la que está vinculada a la educación secundaria es que los alumnos puedan terminar la secundaria, pero con calidad educativa, que aprendan lo que tienen que aprender, esa creo que es la deuda".

En esa línea, señaló que solo 1 de cada 10 chicos que comienzan primer grado termina la secundaria en tiempo y forma y con conocimientos suficientes en lengua y matemáticas: "Es una buena noticia que estén terminando más, es excelente y hay que continuar con eso, pero sin duda hay que reforzar en términos de aprendizaje, porque eso es lo que requiere hoy el mundo para poder luego desenvolverse mucho mejor".

Del Carpio también señaló que también hay que trabajar en palear las diferencias socioeconómicas dentro del ámbito educativo: "Si bien es una muy buena noticia que haya aumentado, en términos proporcionales, mucho más la terminalidad en los sectores más desfavorecidos, todavía queda bastante camino por recorrer. Otros países tienen mayor terminalidad en términos de diferencia en el socioeconómico, me parece que ahí nos queda un trabajo por hacer. Hoy tenemos 60% de terminalidad en los niveles más pobres, hay que seguir trabajando para lograr consolidar eso y que sea cada vez mejor ese porcentaje".

Finalmente, destacó que no hay estudios de impacto sobre casos puntuales en las provincias aunque ponderó los planes de terminalidad educativas como el programa Fines y otros que aparecieron después del 2006: "No hay, me parece, evaluaciones de impacto acerca de eso, pero vemos que entre eso y otro tipo de políticas, han ayudado a la terminalidad. Hoy vemos que gran parte de las provincias están trabajando en transformar la educación secundaria, cambiando no solamente contenidos curriculares sino también los regímenes académicos, otorgando mayor flexibilidad en términos de cómo es la trayectoria educativa del alumno de la secundaria, que me parece que también ayudan a hacer una secundaria que sea mucho más atractiva en términos de la motivación que le puede generar al estudiante que regímenes anteriores, en donde tal vez la secundaria era más estructurada, o más estandarizada, y no ayudaba a esa terminalidad de poblaciones que antes no accedían a la educación secundaria y hoy por suerte sí están accediendo", concluyó.