Políticos eran los de antes: la gestión de San Martín como Gobernador Intendente de Cuyo

El 10 de agosto se cumplirá un nuevo aniversario de la declaración de José de San Martín como gobernador intendente de Cuyo. El historiador y administrador Marcelo Calabria, conocedor de la vida y obra del prócer, narró los hechos y la gestión del Libertador al frente de la provincia.

Tenés que saberlo
Gabriel Conte, Ana Martínez, Ariel Fernández, Julián Chabert y Rodrigo Galdeano y sus personajes. En 92.1 de Radio Post

Más allá de su gesta libertadora, el General Don José de San Martín también debe ser recordado por su gestión al frente de la Intendencia de Cuyo, puesto que ocupó por dos años. Marcelo Calabria, administrador e historiador sanmartiniano, habló con "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y contó acerca de la gestión llevada a cabo por el prócer en tierras mendocinas.

"Seguimos hablando de la Mendoza Sanmartiniana y seguimos hablando del sillón de San Martín porque fue un propulsor del ordenamiento de Cuyo y especialmente de Mendoza, del ordenamiento de la hacienda pública, del ordenamiento de los feudos, de la distribución del agua. La verdad que intervino en casi todo lo que conocemos como las ramas de gobierno con un equipo muy pequeño y con una gobernación que fue muy dinámica en los casi dos años que estuvo al frente de la gobernación intendencia de Cuyo. Este domingo 10 de agosto recordamos una nueva fecha de aniversario de cuando fue designado gobernador intendente de Cuyo a su pedido, porque él había pedido la gobernación, ese es un dato importante", comentó Calabria.

El administrador señaló que luego de su paso por el norte, San Martín eligió Cuyo porque era una parte estratégica de su plan continental: "Él ya termina de idear su plan de liberación continental y Mendoza o Cuyo era una parte en ese plan estratégico de independencia de América, porque la idea era desde Mendoza, como él lo expone, con una fuerza bien adiestrada, pasar la cordillera y con el apoyo de una nación amiga, iniciar lo que era la expedición libertadora del Perú para asestar el golpe final al dominio español en América".

En esa línea, agregó: "Es designado el 10 de agosto de 1814, el 27 de agosto estaba en Córdoba, emprende el viaje de Córdoba a Mendoza, llega entre el 7 y el 9 de septiembre y un mes después se produce la caída de la patria vieja en Chile, la famosa derrota de Rancagua, los realistas vuelven a tomar el poder. Eso trastoca los planes y la gobernación de Cuyo que iba a ser un paso, un interín, se extiende mucho tiempo: primero defensivamente y después ya generando el Ejército Libertador de los Andes".

Este contratiempo llevó a que la gestión de San Martín como gobernador intendente de Cuyo sea más larga de lo esperado: "La intención era acá tomar el poder político para tener los recursos suficientes para armar esta fuerza, este pequeño ejército bien adiestrado, que después terminó siendo un gran ejército, y en unos meses iniciar la campaña hacia Chile. Este cambio geopolítico y lo que sucedió en Chile hace que él tenga que extender el plazo de la gobernación y lógicamente ya no sólo fue un objetivo militar Cuyo, sino que se transformó en un objetivo político y civil porque recordemos que después desde aquí va a impulsar incluso la reunión del Congreso de Tucumán y la declaración de independencia".

Sobre su rol como gobernante, Calabria señaló que fue "un gran político" y que en Perú se transformó en "un gran estadista": "Yo siempre recuerdo, por ley 9085, los licenciados de la administración tenemos en Mendoza el 10 de agosto nuestro día y como patrono a José de San Martín, así como los economistas tienen a Manuel Belgrano, porque lo consideramos el primer gran administrador. Lo que pasa es que es un ejemplo molesto y ha sido a lo largo de la historia un ejemplo molesto para las dirigencias que lo sucedieron. Entonces yo creo que por eso su legado si bien lo rescatamos pero hasta ahí no más. Como decía Rosas ‘San Martín es un grande, pero de lejitos en Europa'. Él siempre, y hasta hace muy poco hay muestras, de que sigue siendo un ejemplo molesto para muchos de los líderes actuales".

Finalmente, Calabria marcó los pilares de la gestión sanmartiniana en Mendoza: "Un lema que después se instauró en los 80: orden, progreso, educación. Ese fue un poco su lema inmerso. Primero ordenó la administración, la provincia; después intentó el progreso, porque necesitaba un Estado y una sociedad que progresaran para que le diera recursos para la campaña de liberación; y desde acá hizo pie fundamental en algo que él con Manuel Belgrano compartían y tenían como horizonte, que era la educación y la cultura de los pueblos porque eran más poderosas que los ejércitos para afirmar la independencia y la libertad".

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