Actividad económica en pausa: tasas elevadas y caída del ingreso limitan la recuperación

Consultoras y bancos internacionales ajustan a la baja sus proyecciones de crecimiento para 2025. La economía argentina enfrenta estancamiento en consumo, producción e industria, mientras la política monetaria restrictiva complica la reactivación antes de las elecciones.

Los pronósticos de crecimiento para la economía argentina en 2025 se ajustan a la baja. Consultoras locales y bancos de inversión internacionales coinciden en que el endurecimiento financiero y la caída del ingreso disponible de los hogares mantendrán la actividad estancada durante el tercer trimestre. Este escenario contrasta con las expectativas oficiales, que aún proyectan un crecimiento más optimista.

Según la consultora Empiria, dirigida por el exministro de Economía Hernán Lacunza, el primer semestre del año estuvo marcado por un estancamiento generalizado, y el tercero se ve condicionado por "tasas altísimas". Su informe reporta caídas consecutivas de la actividad: 0,7% mensual en junio y un retroceso de 0,6% en el semestre, con una contracción en cuatro de los seis primeros meses de 2025.

La consultora utiliza la metáfora de la "raíz cuadrada" para describir el ciclo de caída, leve rebote y posterior estancamiento que ha caracterizado la economía en los últimos años. Tras un repunte parcial, la actividad volvió a descender desde febrero.

El consumo se mantiene estancado, y la economía, si se sostiene el nivel de actividad de junio durante el segundo semestre, crecería 3,7% interanual, muy por debajo del 5,5% planteado en el presupuesto oficial. Empiria advierte que alcanzar esa meta requeriría un ritmo promedio de 0,9% mensual en los próximos seis meses, algo considerado poco probable. Además, la salida del régimen de LeFis provocó dos meses de volatilidad extrema, duplicando las tasas de adelantos a empresas y de pases del Banco Central.

Por sectores, la construcción fue la más afectada, con caídas significativas entre 2023 y 2024 y una recuperación parcial que mantiene la actividad por debajo de niveles previos. La industria también mostró un comportamiento similar, aunque con menor intensidad. A su vez, los hogares registraron una disminución del 7% en el ingreso disponible respecto a noviembre de 2023, y las ventas en supermercados permanecieron estancadas. En el mercado laboral, primero se observó una caída y luego estabilización, mientras que las importaciones desaceleraron tras la salida parcial del cepo y la suba del tipo de cambio.

Orlando Ferreres y Asociados señaló que la actividad general creció 3,6% interanual en julio, pero la comparación desestacionalizada mostró una contracción de 1% respecto a junio, ubicándose apenas 0,3% por encima de diciembre de 2024. La industria manufacturera, especialmente alimentos y automotriz, fue la más afectada, mientras que intermediación financiera, minas y canteras, y construcción mostraron mejoras, aunque en un contexto de debilidad general. El informe también alertó sobre la creciente incertidumbre política y económica.

La consultora Invecq observó un avance casi nulo en la actividad durante el segundo trimestre, con un crecimiento de apenas 0,1% trimestral. Sus proyecciones anuales bajaron a 4% interanual, por debajo de las estimaciones oficiales y del FMI (entre 5% y 5,5%). El reporte registró retrocesos en industria, construcción, producción automotriz y molienda de soja, mientras que cemento, petróleo y acero evidenciaron subas. Los salarios formales privados en julio estaban 1,2% por debajo de febrero, y los créditos en pesos al sector privado crecieron 2,8% real, aunque con mayor mora, que subió al 5,2% en junio desde 4,5% en mayo.

Los bancos de inversión reflejan tendencias similares. JP Morgan redujo su estimación de crecimiento para 2025 del 5,1% al 3,8%, en línea con el contexto de tasas elevadas que persistirán hasta después de las elecciones. Las consultoras coinciden en que solo tras los comicios de octubre podría aliviarse la presión financiera, con una eventual reducción de tasas y un tipo de cambio más alto que ofrezca un respiro a la actividad en el cierre del año.


Esta nota habla de: