El alfajor de Mendoza y el Bonarda son "Maravillas de América Latina"

El historiador Pablo Lacoste, impulsor del Clúster Mendoza Este, da cuenta de una noticia de impacto para la identidad de Mendoza en Latinoamerica.

Pablo Lacoste
Pablo Lacoste - académico USACH. Proyecto ANID - ATE 220008

El alfajor de Mendoza y el vino de Bonarda como productos identitarios y el Cluster Mendoza Este, como asociatividad, fueron reconocidos para ingresar al Atlas de las Maravillas de América Latina en Turismo Eco-Cultural.

Así se dispuso en el Simposio Internacional celebrado recientemente en la Universidad de Santiago de Chile, con la participación de 115 expertos de 16 países, incluyendo referentes del sector empresario, el Estado y la ciencia. El jurado se conformó con especialistas de Francia, España, Chile, Argentina, México y otros países, incluyendo antropólogos, economistas, geógrafos, biólogos, arquitectos, economistas, historiadores, sociólogos, entre otras disciplinas.,

El Simposio aprobó la incorporación de 18 propuestas de seis países: México, Panamá, Perú, Bolivia, Argentina y Chile, incluyendo diez destinos turísticos, cuatro productos identitarios y cuatro por asociatividad.

El alfajor de Mendoza y el Bonarda son "Maravillas de América Latina"

La postulación del alfajor de Mendoza fue presentada por un grupo de historiadores de tres países, especialistas en paleografía (Sandra Montoya, Alejandro Salas y Daniel Moreno), los cuales realizaron un trabajo de larga duración, desde el siglo XVI hasta la actualidad, con documentos originales de archivos. Resultado de esa investigación se demostró el largo proceso histórico de cinco siglos, que culminó con el surgimiento del alfajor de Mendoza. Se reconoce que el alfajor tuvo sus primeros pasos en la cultura árabe, y los españoles lo introdujeron en América; posteriormente, este producto dejó de ser relevante en España, pero tuvo su desarrollo en Chile y Mendoza, donde finalmente se consolidó como producto identitario. La base material fue la red de molinos hidráulicos harineros, que permitió la temprana disponibilidad de harina de trigo; a ello se sumó el aporte de azúcar, proveniente entonces del Perú, y las frutas para elaborar mermeladas, de gran arraigo en Mendoza (durazno principalmente). Sobre esta base se comenzaron a elaborar los primeros alfajores, en la época colonial. 

Atlas de las Maravillas de América Latina

El estudio demostró la existencia de una matriz común para la repostería regional, que luego desarrolló diversos productos típicos, con nombres diferentes: los dulces de La Ligua, los dulces de Curacaví (ambos reconocidos como Denominación de Origen en Chile), la torta curicana y el alfajor de Mendoza. El monasterio de monjas, instalado en Mendoza en 1780, tuvo un papel clave en este proceso: sus alfajores fueron reconocidos en 1825 por el futuro papa Pío IX, así como numerosos viajeros extranjeros que visitaron Mendoza en esa época, lo cual fortaleció la fama y el prestigio de esta tableta. El alfajor se consolidó así como un producto emblemático de Mendoza, y evolucionó con el tiempo, con la incorporación del chocolate, hasta alcanzar sus modalidades actuales. El alfajor se expandió después a otras provincias argentinas, pero su cuna viva sigue en Mendoza, donde se ha convertido en uno de los productos más demandados por los turistas que visitan la provincia.

Los vinos de Bonarda, cepa emblemática del Este de Mendoza, fueron presentados por el titular de la Academia Argentina de la Vid y el Vino, Roberto González, y fue el único vino aprobado para el Atlas de las Maravillas. Como fundamento, se destacó su alta calidad enológica, sus características organolépticas y su arraigo territorial, profundamente enlazado con la tradición de los vitimigrantes europeos que colonizaron el territorio y convirtieron el desierto en un jardín, con su maravillosa red de canales, hijuelas y acequias de riego. Con amor y arraigo a su territorio, los vitimigrantes y sus sucesores construyeron un paisaje cultural de singular belleza, que han cuidado durante 150 años, hasta hoy.

En la categoría asociatividad, el Simposio reconoció al Clúster Mendoza Este por su visión y compromiso con el turismo eco-cultural, su calidad organizativa y su capacidad de gestión, reflejada en la organización de la I Cumbre Iberoamericana de Turismo Eco-Cultural (marzo de 2025). La propuesta fue presentada por una nutrida delegación argentina, liderada por el presidente del Clúster, Daniel Moreno, acompañado por Lorena Lancellotti (Bodegas Lancellotti), Irene Viggiani (restorán María Paz, San Martín), Alejandro Aruj (empresario de espectáculos y director de Cultura del Cluster), Liliana Fariña (Cámara de Comercio de San Martín) y el enólogo Roberto González. Los delegados presentaron los vinos de Bonarda, las conservas tradicionales de los vitimigrantes, y un libro de la escritora local, Marcela Muñoz.

El alfajor de Mendoza y el Bonarda son "Maravillas de América Latina"

Entre los ganadores de esta edición se encuentran también los Esteros del Iberá (Argentina), la ciudad de Sucre y el valle de Cintis (Chuquisaca), el paisaje agavero de tequila (México), la gastronomía moche (norte del Perú), el valle de Limarí, el ramal ferroviario Talca-Constitución y la Casa Chueca (Chile), entre otros. En categoría asociatividad, el jurado reconoció también a la Cooperativa Control Pisquero (1931-2025), el clúster de Limarí y el clúster barrio gastronómico Parque Bustamante (Santiago de Chile).

Pablo Lacoste: "La zona Este ha sido la Cenicienta de Mendoza, pero ahora le empieza a entrar el zapato"

En el marco de la Red Iberoamericana de clústeres de turismo eco-cultural, el Atlas de las Maravillas se propone promover la asociatividad de pymes, y dar a conocer nuevos destinos y productos de interés para enriquecer la perspectiva, y poner al alcance del público lugares de gran valor para competir con los mejores destinos turísticos de Europa y EEUU. Contrariamente a lo que muchos creen, en América Latina también hay lugares y productos capaces de emocionar, debido a su belleza escénica, espesor cultural y valor identitario.

El alfajor de Mendoza y el Bonarda son "Maravillas de América Latina"



Esta nota habla de:
Atlas de las Maravillas de América Latina