La experiencia de una app que ayuda a "celebrar sin desperdiciar"
Iniciativas como Cheaf -la app que conecta comercios con consumidores para rescatar alimentos en perfecto estado antes de que se tiren a la basura- cobran especial relevancia al ofrecer una alternativa concreta para optimizar el gasto y aprovechar mejor los recursos disponibles. Cómo funciona en Colombia.
Llega la época del año más anhelada por las familias: mesas abundantes con alimentos, encuentros familiares y las preparaciones tradicionales de fin de año, hacen parte de las celebraciones de millones de hogares argentinos. Sin embargo, este ambiente festivo también trae consigo una preocupación crítica: el aumento en la pérdida y el desperdicio de alimentos, una problemática que afecta a la sostenibilidad, la economía y la seguridad alimentaria del país.
En Argentina, anualmente, se pierden y desperdician millones de toneladas de alimentos (FAO), una cantidad suficiente para alimentar a cerca de 20 millones de personas. En el contexto económico actual, marcado por la caída del consumo y las pérdidas en los comercios, este fenómeno representa no solo un problema social y ambiental, sino también un impacto económico directo tanto para los hogares como para la cadena de consumo. Si bien el desperdicio ocurre durante todo el año, se intensifica en las fiestas de fin de año, cuando las compras por impulso, la falta de planificación y la preparación de comidas en exceso terminan generando alimentos que se descartan.
En este escenario, iniciativas como Cheaf -la app que conecta comercios con consumidores para rescatar alimentos en perfecto estado antes de que se tiren a la basura- cobran especial relevancia al ofrecer una alternativa concreta para optimizar el gasto y aprovechar mejor los recursos disponibles.
La seguridad alimentaria también es un derecho humano
Según recientes cifras del Plan Nacional de Reducción de Pérdidas y Desperdicio de Alimentos (PNRPDA) en Argentina se pierde aproximadamente el 40% de los alimentos producidos, lo que equivale a casi 16 millones de toneladas cada año. Esta pérdida no solo afecta la seguridad alimentaria, también genera, en gran parte, las emisiones de gases de efecto invernadero en el país.
"No es solo hablar de desperdicio y de cómo afecta el medio ambiente y la economía de un país, es hablar del derecho a la alimentación digna y segura. Cada alimento que se tira a la basura es perder la oportunidad de que llegue a quién más lo necesita" afirma Kim Durand, CEO Cheaf.
Por eso, abordar el tema de consumo consciente en este momento del año, es una manera de proteger el derecho humano a la alimentación, mientras algunos hogares viven en abundancia otros enfrentan carencias. Por esta razón, acciones como: la manera en la que se compra, se preparan los alimentos y se aprovechan, se pueden transformar en un acto de responsabilidad colectiva.
El uso de la tecnología para celebraciones equitativas
Frente a este panorama, Cheaf continúa expandiendo en países como Colombia su modelo de impacto, cuyo objetivo es reducir el desperdicio de comida mediante la conexión entre comercios y usuarios interesados en adquirir productos de calidad a precios accesibles. Solo en 2025, la app ha logrado rescatar más de 2,5 millones de kilos de alimentos en Latinoamérica, cifra que evidencia el poder que tiene la tecnología para convertir excedentes en oportunidades y promover un acceso más equitativo en la alimentación.
Este sistema, no solo se convierte en una solución concreta para disminuir el desperdicio de alimentos en etapas clave de la cadena de consumo, sino que además facilita que más personas accedan a alimentos nutritivos sin afectar su economía.
"Ser conscientes de cómo gestionar los alimentos es un acto de dignidad. Cada compra bien planificada, el manejo adecuado de los productos y cada comida bien aprovechada, sin duda, contribuye al acceso equitativo para todos". Dice Kim Durand.
