Se pudrió el plan eléctrico de Ferrari, y se derrumba en los mercados
Los italianos están recalibrando sus ambiciones reduciendo a la mitad su objetivo inicial de eléctricos en el mix de ventas para 2030 hasta el 20%.
El superdeportivo eléctrico de Ferrari se pudre, poco a poco.
La firma de Maranello están viendo que las promesas en torno a un vehículo cero emisiones pierden atractivo en el mercado y no quieren ser los perdedores de una batalla que, de momento, han ganado los fabricantes chinos en Europa.
Por eso los italianos están recalibrando sus ambiciones reduciendo a la mitad su objetivo inicial de eléctricos en el mix de ventas para 2030 hasta el 20%.
Una revisión que han dado a conocer hoy en el Capital Markets Day del grupo automovilístico con un impacto en la cotización que se ha hecho notar hasta el punto de haber provocado la suspensión momentánea de negociación del valor en la Bolsa de Valores de Milán por elevada volatilidad para luego traducirse en un desplome del 10%.
Así, la nueva configuración de la gama de productos para 2030 establece una distribución más equilibrada: 40% de vehículos de combustión interna, 40% híbridos y 20% eléctricos. Una recalibración que representa un cambio fundamental respecto a las proyecciones anteriores que contemplaban una mayor penetración eléctrico.
Un cambio en la hoja de ruta estratégica del grupo que el presidente ejecutivo de Ferrari, John Elkann, lo justificó alegando que el compromiso de la compañía reafirma "la voluntad de progreso uniendo la disciplina de la tecnología, la creatividad del diseño y la artesanía de la fabricación".
Desde principios de septiembre, Ferrari acumula una caída de algo más del 2% hasta el punto de dejar el balance del año prácticamente en tablas con una evolución positiva del valor en Milán de apenas un 1%.
El consenso de mercado que recoge Bloomberg mantiene su recomendación de 'comprar' con un precio objetivo en los 447,96 euros por acción, lo que implica verle un potencial alcista del 13,8% respecto de los niveles de negociación actuales. Para los expertos, el nuevo plan estratégico de Ferrari refleja una mejor comprensión de la demanda del mercado y permite al grupo mantener la rentabilidad gracias a los modelos de combustión. "Es más realista y disciplinado", resumen.
Aterrizando esa visión general del mercado, en los últimos días HSBC ha actualizado su visión para con Ferrari de 'neutral' a 'comprar' elevando el precio objetivo hasta los 470 dólares desde los 413 anteriores ante la expectativa de un beneficio a doble dígito hasta 2030 y las nuevas oportunidades de personalización de vehículos que están ofreciendo a los clientes. Unos movimientos que también alaban los analistas de Deutsche Bank quienes proyectan un margen ebit ajustado que podría exceder el 30% .
Desde el punto de vista financiero, la automovilística ha elevado sus objetivos para 2025, al confirmar que los del año que viene se han alcanzado ya. La firma estima ahora que los ingresos netos correspondientes el actual ejercicio serán iguales o superiores a los 7.600 millones de euros, frente a la previsión anterior de 7.000 millones.
Además, la compañía prevé un ebitda ajustado de al menos 2.720 millones de euros (antes 2.680 millones), lo que supondría un margen del 38,3%. Asimismo, el beneficio diluido por acción ajustado alcanzaría los 8,80 euros, acompañado de un flujo de caja libre industrial de 1.300 millones de euros.
Ferrari Elettrica, la gran apuesta
A pesar del ajuste estratégico, Ferraro mantiene su compromiso de tener en el mercado su primer coche eléctrico, el Ferrari Elettrica a finales de 2026. De hecho, en las últimas horas ha presentado el chasis y el tren motriz del vehículo que, dicen, está listo para su producción íntegra en las instalaciones del grupo de automoción en Maranello.
"El Ferrari Elettrica abre un nuevo segmento en emociones de conducción, experiencia a bordo y usabilidad", ha asegurado el consejero delegado de la marca, Benedetto Vigna.