Mercado Libre pidió regular a Shein y Temu: "Estamos subsidiando a los chinos para fundir la industria local", advirtió Gustavo Ludmer

El analista de la Federación de la Industria de la Indumentaria advirtió que las plataformas chinas no pagan los mismos impuestos que las pymes argentinas, lo que genera una competencia desleal. "Se pierden empleos, recaudación y se destruye producción nacional", dijo en diálogo con Radio Post.

A pesar de las llamas

El economista Gustavo Ludmer, analista de la Federación Argentina de la Industria de la Indumentaria, respaldó el reclamo de Mercado Libre para que el Gobierno nacional establezca regulaciones sobre las plataformas chinas de comercio electrónico Shein y Temu, al advertir que existe una "competencia desleal" que afecta al empleo y a las pymes locales.

"El planteo de Mercado Libre es completamente razonable y atendible", sostuvo Ludmer en diálogo con el programa "A pesar de las llamas" por Radio Post, luego de que el presidente de la compañía en la Argentina, Juan Martín de la Serna, reclamara públicamente reglas que equiparen las condiciones impositivas entre los comercios nacionales y los gigantes asiáticos.

Según el economista, la problemática no se limita a la caída de ventas del comercio tradicional, sino que involucra una distorsión fiscal y laboral profunda. "A las grandes plataformas chinas no se les cobran los impuestos que sí se les cobran a las empresas locales. El Estado les cobra IVA, Ganancias, Ingresos Brutos y transacciones bancarias a las pymes, y a Shein y Temu no. Además, están eximidos de derechos de importación. De alguna forma, lo que está pasando es que la sociedad argentina está subsidiando a estas compañías para fundir la industria local", explicó.

Ludmer sostuvo que la situación genera una "competencia desleal": "Si a uno no le cobramos impuestos y a otro sí, estamos haciendo que el consumidor compre ropa china barata en detrimento de la producción local. No necesariamente tiene que ser ropa nacional: también afecta a los comercios que importan legalmente pagando impuestos y aranceles".

Estrategias globales y precedentes internacionales

El analista recordó que el fenómeno no es exclusivo de la Argentina. "Brasil, Uruguay y Francia ya avanzaron con regulaciones para Shein y Temu. Es una oleada global, porque estas compañías adoptaron nuevas modalidades de comercialización que están conquistando el mundo y generando problemas en materia de empleo, financiamiento estatal y quiebras de empresas", señaló.

En esa línea, advirtió que el Gobierno argentino se mantiene al margen de esa tendencia: "Salvo el caso argentino, todos los países están tomando cartas en el asunto para regular esta desigualdad. Aquí vamos a contramano del mundo y eso está generando efectos concretos: cierre de empresas y pérdida de puestos de trabajo".

La estrategia del envío gratuito y el impacto ambiental

Consultado sobre la política de envíos gratuitos que utilizan las plataformas chinas para atraer consumidores, Ludmer la calificó como "una estrategia comercial para ganar mercado y desplazar competidores".
"Por su escala global, pueden negociar con proveedores y absorber costos que otros no pueden. Incorporan el costo de envío en el precio final, hacen fundir a otras empresas y concentran el mercado en pocos jugadores", explicó.

Además, mencionó el impacto ambiental de la llamada "moda ultra rápida" promovida por Shein: "Muchos países que están combatiendo a Shein lo hacen también por el daño ambiental que genera la sobreproducción de ropa. Pero en la Argentina, este Gobierno no puede apelar siquiera a ese argumento porque no cree en el cambio climático. Es una tormenta perfecta: una situación muy compleja y un gobierno dogmático que no hace caso a la evidencia científica".

"Se pierden empleos y se pierde recaudación"

Ludmer remarcó que la falta de regulación no sólo golpea a la industria textil, sino también a las arcas públicas: "Se pierden puestos de trabajo y posibilidades de recaudar. Terminamos subsidiando a los chinos".

Por eso, insistió en que "nivelar la cancha" debería ser una prioridad. "Lo que está planteando Mercado Libre y las cámaras del comercio y la industria es algo justo y equitativo: hay una competencia desleal, regulémoslo", concluyó.

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