Murió el bodeguero Bernardo Weinert, fundador de Bodega & Cavas de Weinert
Don Bernardo Weinert, fundador y propietario de Cavas de Weinert, podría ser definido como un entrepreneur. Nacido en una pequeña colonia alemana del sur de Brasil, montó su historia empresarial sobre el transporte internacional en Sudamérica. Hoy se lo despide con agradecimiento por su aporte a Mendoza.
Pesar en el mundo vitivinícola causó este martes la noticia del fallecimiento del bodeguero Bernardo Weinert, fundador de Bodega & Cavas de Weinert.
El deceso se produjo esta tarde en Buenos Aires. Y más allá de su fama debido a la calidad de sus vinos, Weinert también fue un pionero en el uso del paso Cristo Redentor para unir el Atlántico brasileño -su país de origen- con el Pacífico en Chile. Era propietario, además, de Coral, una gran empresa de transporte en aquel país.
Weinert en los tiempos de creación de la bodega
Bodega & Cavas de Weinert fue fundada en 1975 en Luján de Cuyo. Don Bernardo Weinert estaba fascinado por el mundo de los vinos y decidió montar su propia bodega en Argentina con una filosofía incondicional: producir vinos de alta calidad.
Antes de embarcarse en tal tarea, hizo un extenso estudio sobre Mendoza: su clima, suelo y vides; y encontró en Luján de Cuyo el lugar ideal para su emprendimiento. Después de un arduo proceso de restauración en el edificio adquirido en 1974, trajo la última tecnología en vinificación de aquella época y se unió con Raúl de la Mota, conocido mundialmente como el padre de la vitivinicultura moderna y también nombrado mejor enólogo del siglo XX en la Argentina.
En 1996, se incorporó a la bodega el enólogo de origen suizo Hubert Weber, quien con tan solo 27 se convirtió en el principal enólogo de Bodega & Cavas de Weinert.
En 2015, Miguel López, empresario porteño que cobró notoriedad por ser el novio de Zulemita Menem, anunció que se quedaba con la conocida bodega ubicada en el carril Cervantes de Luján de Cuyo, pero el asunto quedó en medio de un litigio.
Hasta 2017, la bodega acompañó durante 23 años el añejamiento del Malbec en el tonel más antiguo del mundo.
Don Bernardo Weinert fue un hombre cuya filosofía de negocios es muy simple: "Mientras tengas tu propia filosofía y la mantengas durante los años, estarás en buen camino.".
Por muchas razones, Weinert fue una persona que cultivó el bajo perfil público, pero quienes lo conocen saben que su aporte a la industria mendocina fue mucho mayor que lo que se conoce.
El edificio de arquitectura española antigua, remaneciente de una vieja bodega de la familia mendocina Otero hasta 1920, llama la atención, invitando a aquellos que pasan por ella a conocer lo que guarda en su interior.
Don Bernardo Weinert, fundador y propietario, podría ser definido como un entrepreneur. Nacido en una pequeña colonia alemana del sur de Brasil, montó su historia empresarial sobre el transporte internacional en Sudamérica. Hoy se lo despide con agradecimiento por su aporte a Mendoza.