Tierra del Fuego amenaza con ir a la Justicia si se eliminan los aranceles a productos tecnológicos
El gobernador Gustavo Melella advirtió que accionará legalmente contra el gobierno nacional si se oficializa la medida anunciada por la Casa Rosada. La industria electrónica en la isla emplea a más de 8.500 personas. Las fábricas ya iniciaron un paro indefinido.
La decisión del gobierno nacional de avanzar con la eliminación de aranceles a productos electrónicos ensamblados en Tierra del Fuego desató un fuerte rechazo en la provincia. El gobernador Gustavo Melella advirtió que, de confirmarse la medida, iniciará acciones judiciales contra el Estado nacional por el impacto que podría tener sobre el empleo y el entramado productivo fueguino.
El anuncio, realizado por el vocero presidencial Manuel Adorni y aún pendiente de publicación oficial, generó alarma entre los actores políticos, gremiales y empresariales del sector, que consideran que la iniciativa pone en riesgo la continuidad de la industria tecnológica radicada en la isla.
"Si esto avanza tal como fue planteado, vamos a ir a la Justicia. No podemos permitir que se le falte el respeto al pueblo fueguino", afirmó Melella en declaraciones radiales. El mandatario provincial denunció que no fue consultado sobre la decisión, al igual que los referentes locales del oficialismo, y cuestionó con dureza los dichos del diputado José Luis Espert y del ministro Federico Sturzenegger, a quienes acusó de despreciar a la provincia.
El gobernador también hizo referencia a antecedentes negativos de políticas similares, al recordar los recortes implementados durante la gestión de Mauricio Macri: "Ya vivimos esto con las notebooks. Nos quieren hacer creer que competir sin protección será mejor, pero lo que se pierde son puestos de trabajo reales".
El descontento no se limita al plano político. Las fábricas electrónicas con asiento en la provincia iniciaron un paro por tiempo indeterminado como señal de protesta. Melella respaldó la medida y advirtió que el impacto trasciende los límites de la industria: "Cuando una planta para, no sólo pierde el obrero. También se ve afectado el comercio, el transporte, el turismo y la vida económica de toda la isla".
La ministra de Producción y Ambiente, Karina Fernández, se sumó a las críticas al advertir que la medida "pone en riesgo miles de empleos y la competitividad del sector", al tiempo que defendió la importancia estratégica de la producción local: "La industria es sinónimo de soberanía y de trabajo para nuestra gente".
Desde el sector empresarial, la presidenta de la Asociación Fueguina de Representantes de la Industria Electrónica (AFARTE), Ana Vainman, adoptó una postura cauta. Si bien reconoció que la anunciada simplificación aduanera podría mejorar la logística y reducir costos, advirtió que aún se desconoce el alcance concreto de las medidas. También cuestionó los argumentos sobre una eventual baja de precios: "Los celulares que mencionaron son importados. Además, la reducción de impuestos internos no se traduce automáticamente en precios más bajos, porque el stock actual ya absorbió esos tributos".
En medio de la incertidumbre, Tierra del Fuego se prepara para dar batalla legal en defensa de su régimen industrial, mientras crece la tensión con el gobierno nacional.