Ataque a colectivos: la falta de respuestas y el riesgo que sufren los pasajeros

En el último tiempo se ha vuelto común que los colectivos que viajan por la ruta sufran piedrazos con el objetivo de que se detengan y ser asaltados por bandas. Las pocas respuestas de la policía y el riesgo que corren los pasajeros que viajan en ellos.

Tenés que saberlo
Gabriel Conte, Ana Martínez, Ariel Fernández, Julián Chabert y Rodrigo Galdeano y sus personajes. En 92.1 de Radio Post

En la jornada de ayer, un colectivo que se dirigía al sur de Mendoza sufrió un piedrazo que terminó con la explosión de un vidrio en la parte baja del mismo y varios pasajeros heridos producto de la rotura. El médico Alejandro Brahim, uno de los pasajeros, habló en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y se refirió a lo sucedido.

"En la parte de abajo veníamos 5 personas, fue realmente una explosión lo que se escuchó, un proyectil bastante grande. Hay fotos donde se ve el boquete que dejó en el vidrio, que después terminó destruyéndose. No encontramos el proyectil, pero de haberle dado en la cara a alguien con la violencia que fue tirada esa piedra, yo creo que puede llegar a romperle la cabeza a alguien, si no matarlo", narró Brahim.

El médico señaló que el hecho ocurrió a los pocos minutos de salir de la terminal: "Fue a eso de las 20:30 del día de ayer, después de pasar el puente del río Mendoza yendo por ruta 40, en Luján. Pregunté a los choferes y me dijeron que no le avisan a la policía nada, dicen ‘la realidad es que no hacen nada: sacamos fotos, mandamos al seguro, arreglan con el seguro y listo, todo queda olvidado ahí'. En el Ministerio de Seguridad lo ignoran".

A su vez, Brahim comentó que es algo que sucede usualmente en algunos puntos de la ruta como Eugenio Bustos: "Hace un tiempo atrás, un año o algo así, en Eugenio Bustos se producían los mismos ataques hacia los colectivos y suponen ellos que es esperando que se paren en el lugar para poder meterse a robar dentro del colectivo. Ellos suponen eso, pero dicen que son muy frecuentes, incluso a metros de los stands policiales que hay en el ingreso y en la salida de Eugenio Bustos. Cuando salís siempre te encontrarás alguna patrulla que si bien por ahí no están parando vehículos, por lo menos están observando lo que sucede. Pero se paran, avisan y no se mueve la policía".

El pasajero explicó que el colectivo no se detuvo inmediatamente sino que lo hizo unos kilómetros más adelante en una estación de servicio para poder cambiar de colectivo unos 50 minutos después: "No quiero estigmatizar a nadie de ningún barrio, pero por lo general los ataques, estos suelen ser cerca del barrio La Gloria. Digo por lo general porque la gente que te habla de esto te habla como con cierta costumbre, estamos acostumbrados a que esto suceda dos o tres veces por semana en distintas líneas de colectivos de media distancia por lo general, que son los colectivos grandes. Me preocupa la naturalidad con la que aceptan este tipo de hechos, porque registro de dónde suceden estas cosas, seguro hay y se puede recabar fácilmente. Si cada una de las líneas estas hicieran la denuncia correspondiente y que quede registrado, debés en cuando habría una patrulla parada ahí".

Además, explicó que es una zona en donde no hay barrios ni casas y que uno continúa el viaje con miedo: "La gente que estaba dentro del colectivo, y me incluyo, te vas con una sensación de inseguridad e insatisfacción por la falta de respuesta de la gente que tendría que estar ahí en ese momento. Estábamos en la puerta del colectivo, charlando con los choferes, pasa una patrulla por delante de nosotros, nos ven con el vidrio roto y ni siquiera se paran".

En esa línea, agregó: "Terminamos todos con esquirlas de vidrio en el cuerpo, el brazo lo tengo como si me lo hubieran agarrado cinco gatos de la cantidad de esquirlas que me saqué, me sacudí y se me clavaron en la otra mano porque realmente fue muy fuerte la explosión. Toda la cabina de abajo estaba llena de vidrios, eso fue lo sorprendente: la velocidad que tenía ese proyectil fue muy fuerte. Después la desaparición extraña del proyectil, porque no lo encontramos dentro del colectivo, tampoco había un orificio de salida".

Sobre el accionar de la policía y de la justicia, Brahim comentó que charlando con otro pasajero este dijo que no era necesario denunciar: "Yo soy no me voy a perdonar si le pasa a alguien algo y yo me quede callado, me parece una vergüenza que tengamos que aceptar esto como algo natural y decir ‘bueno, menos mal que no pasó nada grave'. ¿Cómo nada grave? Estuviste a punto de morir con un proyectil".

Por otro lado, el médico señaló que no hay que explicar la inseguridad desde el punto de vista de "no tener las mismas oportunidades": "Si una persona es un peligro para la gente, esa persona tiene que estar encerrada, tenga la edad que tenga, y tiene que estar guardada. Ese es el problema. Se va naturalizando algo que está haciendo correr peligro la vida. Para mí, una persona que viene drogada o que viene alcoholizada y atropella a alguien, no hay que tenerle respeto. Como médico le vas a salvar la vida, lo vas a cuidar, lo vas a proteger, todo lo que digas. Pero esa persona, desde el lugar de atención, tiene que ir a la cárcel, hasta que se averigüen las cosas. Si un delincuente sabe que se lo van a llevar y que va a tener problemas por lo que hizo, van a dejar de hacerlo, va a disminuir la tasa de delitos, pero tenemos que participar nosotros como sociedad".

Finalmente, el pasajero comentó una conversación que tuvo con un policía en su momento: "Una vez un subcomisario me dijo, ‘a este lo tenemos fichado porque se ha cargado como a 7'. ¿Qué me estás diciendo? Me estás hablando de la inoperancia de la Justicia, de ustedes, que son los actores que tienen que ir a agarrarlo y dejarlo preso", concluyó.

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