El problema de la pirotecnia: "La prohibición arrastra detrás un negocio ilegal"

Si bien su venta se encuentra prohibida en Mendoza, la pirotecnia se sigue comercializando de manera clandestina. Diego, representante de la empresa Cienfuegos en Mendoza, habló en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y se refirió al tema.

"Cienfuegos vendía pirotécnia en Mendoza y desde el 2020 no podemos vender más porque se prohibió y la empresa se transformó, fabrica otras cosas como aerosoles, cotillón, nos hemos transformado en otra cosa. Si se vende pirotecnia en otros lugares, donde está habilitado. La fábrica tiene 50 años en Argentina y dos fábricas en la provincia de Buenos Aires. En Mendoza no podemos vender desde el 2020. Lo que pasa es que hay muchas formas de hacerse del producto: si te metés a internet, las páginas de compra están por todos lados", explicó Diego.

El representante de Cienfuegos en Mendoza señaló que uno de los productos que más venden ahora es cotillón: "Vendemos todo lo que es aerosoles, nieves de carnaval, se compraron máquinas para hacer inflador de cubiertas, todo lo que es silicona, tenemos máquinas de humo y de papel picado que se usan en el boliche, insumos. Todo lo que es cotillón es lo que más se vende: velas de torta, velas número. Nos tuvimos que reconvertir para poder seguir funcionando porque quedaba mucha gente en la calle. La empresa se transformó".

A su vez, explicó que la fábrica continúa fabricando pirotecnia "friendly fire": "Hay un departamento que sigue haciendo los fuegos artificiales grandes, en algunos lugares se fabrica una pirotecnia que se llaman friendly fire, que es sin impacto sonoro, Cienfuegos no vende más petardos. Lamentablemente, la prohibición va hacia un negocio ilegal. Yo siempre digo que lo mejor no sería prohibir sino reglamentar la ley. Se puede ver lo que fabrica Cienfuegos, cómo lo fabrica, porque somos legales. Pero de esta manera, todo lo que suena no sabés de dónde proviene".

El empresario explicó que en las páginas de compra online el surtido de pirotecnia es muy grande: "Es casi imposible que sea fabricación casera porque no darían los números o los costos. Lo que sí, no podés saber de dónde es. Si esto estuviera reglamentado, vos hacés la guía de dónde viene o qué es lo que tiene, pero no de esta manera, así no sabemos. No debería ingresar a la provincia, faltan controles. Al estar prohibido y no reglamentado, no sabés nada: dónde está, cómo se acopia. Si esto se reglamentara de alguna manera, ahí podés saber de dónde viene, cómo está".

Finalmente, señaló que a la gente que le gusta la pirotecnia, la va a buscar y la va a conseguir: "En una empresa como la nuestra, que es completamente legal, se puede ver cómo se fabrica, cómo se traslada, cómo se acopia, desde el principio al fin podés hacer un seguimiento de la trayectoria del producto. En este caso no podés saber. Siempre la prohibición arrastra detrás un negocio ilegal, es lamentable pero es así, pasó con el alcohol. Yo tengo una hija con discapacidad, le afecta y lo entiendo. Pero si se trabajase en conjunto con las empresas, esto llegaría a otro punto. Va pasando el tiempo y la tecnología va avanzando y se puede buscar la vuelta para que esto sea mejor y para todos", concluyó.