Crisis de seguridad en La Serena: advierten que bandas organizadas de la zona central se especializan en robar a turistas argentinos

La audacia de los delincuentes ha generado conmoción en Chile. Según expertos, el robo de camionetas de alta gama es un negocio "sumamente lucrativo" coordinado con mafias que operan en la frontera con Bolivia.

Tenés que saberlo
Ana Martínez, Ariel Fernández, Julián Chabert y Rodrigo Galdeano y sus personajes. En 92.1 de Radio Post

La ciudad de La Serena, tradicional refugio de verano para miles de turistas de Mendoza enfrenta una temporada marcada por la preocupación. El incremento en la violencia y el descaro de los robos de vehículos a familias argentinas ha encendido las alarmas de las autoridades locales, obligando a la alcaldesa Daniela Norambuena a convocar consejos de seguridad extraordinarios para frenar lo que ya se percibe como una amenaza directa a la imagen turística de la región.

En diálogo con el programa "Tenés que saberlo" por Radio Post, el periodista chileno Carlos Ruiz brindó un panorama detallado de la situación. Aunque las cifras oficiales de Carabineros indican una baja del 27% en delitos generales respecto al año anterior, la percepción de inseguridad es más alta que nunca debido a la "audacia de los delincuentes".

Bandas especializadas y el "relajo" del turista

Según Ruiz, los ataques no son fortuitos ni producto de la delincuencia común local. "La percepción que existe dentro de las autoridades es que, particularmente con los argentinos, es una banda organizada que ha llegado precisamente desde las zonas centrales de Chile a cometer estos delitos", explicó.

Las medidas de seguridad que prepara La Serena para cuidar a los turistas mendocinos

El periodista señaló que los delincuentes aprovechan la vulnerabilidad propia de las vacaciones: "Cuando la gente está de vacaciones un poco se relaja, deja las valijas dentro de los vehículos y eso es particularmente llamativo para estos delincuentes que se han especializado en el robo a turistas". Sin embargo, lo que más conmoción genera es el robo de unidades completas: "El ingresar a un recinto privado y robarse un vehículo de un lugar que uno piensa que es seguro es lo que llama mucho la atención".

El destino final: el mercado negro en Bolivia

Uno de los puntos más críticos de la conversación fue el destino de los vehículos robados, especialmente las camionetas 4x4. Ruiz confirmó la existencia de una ruta delictiva que termina en el país vecino. "Las camionetas terminan finalmente en Bolivia, pasan por pasos fronterizos no habilitados", relató, mencionando el fenómeno de los "autos chutos" (vehículos robados que circulan con patentes chilenas en territorio boliviano).

El periodista atribuyó la dificultad para combatir este flagelo a la falta de relaciones diplomáticas normales con Bolivia y a una "frontera muy permeable". "Se ha transformado en un negocio superlucrativo para verdaderas mafias que se dedican a robar vehículos y reducirlos por encargo en Bolivia", sentenció.

Seguridad y política: El efecto Kast

La entrevista también abordó el clima político en Chile tras la reciente elección presidencial que dio como ganador a José Antonio Kast. Ruiz reconoció que la seguridad fue el "caballito de batalla" de la campaña, pero descartó que los robos actuales formen parte de un sabotaje político contra el nuevo gobierno o que tengan un tinte xenofóbico."No tiene que ver con un tema ideológico ni xenofóbico, sino con un tema netamente criminal. Ven a las personas que vienen de turistas que quizás se distraen un poco y aprovechan la oportunidad", aclaró el periodista.

Al menos, 4 robos a camioneros mendocinos en Chile por mes y algunos, con secuestros 

Finalmente, Ruiz advirtió que el problema ya no distingue nacionalidades: "Es una situación que no solo viven ustedes (los argentinos), sino que también nosotros como chilenos vemos que les roban a los argentinos y decimos 'bueno, también nos pueden robar a nosotros'". Mientras tanto, La Serena refuerza su vigilancia con cámaras y patrullajes para evitar que las vacaciones de la región se transformen, en sus propias palabras, en un "mal recuerdo".

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