La amistad y el té es un abrazo infinito
Marcela Muñoz Pan aborda con un té el día en que se celebra la amistad.
Amistad, la expresión más humana y significativa, desinteresada y absolutamente necesaria. El sentir del que no podemos prescindir, no tener amigos-amigas es como no poder andar livianos y con una larga historia entre los dedos, las risas y las miradas que lo dicen todo y conjugado en un blend de tes, que infunden elixir de sabores y recuerdos sellando un día más, un año más. Ceferina, un lugar cálidamente elegido entre los verdes y los rosas, nuestros corazones envueltos en el murmullo de hojas de árboles y el tintineo de tazas de porcelana, se encuentra la amistada para celebrarse.
Más que un simple local de infusiones y delicias dulces, Ceferina es ese blend de amistades, un espacio donde el tiempo se detiene para que las conexiones humanas florezcan como las flores de adornan sus ventanas. Las amigas son mujeres que inspiran, que conectan con lo simple, con lo humano, la tierra, el baile, las carcajadas, las complicidades y una eterna poesía.
Cada taza de té servida en Ceferina es como un verso de un poema que está servido para leerse, como su carta de presentación. Los aromas de naranjita, cardamomo, limón, menta y el infaltable pistacho, se entrelazan con los relojes de arena y sus teteras únicas, es un lugar donde la amistad se destila como el mejor de los tés, con notas de lealtad, comprensión y el calor de compartir. Su propietaria y creadora, ha tejido con mimo, cada rincón del lugar, las paredes, adornadas con cuadros, cuentan historias de vínculos forjados bajo el techo de su casa de té. Cada cliente habitual es como un ingrediente secreto en la receta de su éxito: juntos, crean una sinfonía de momentos inolvidables, otra manera de sentir la amistad.
En una época donde las conexiones digitales a veces eclipsan el valor del encuentro físico, la Casa de Té Ceferina es un recordatorio poético de que la amistad es un arte que se cultiva en la calidez de los espacios compartidos. Aquí, cada sorbo de té es un homenaje a la belleza de compartir, de escuchar, de reír y de crear memorias que perduran como el sabor de un té de blanco en el aire. Ceferina misma es como una hoja de té que ha infusionado la esencia de cada persona que ha cruzado su puerta. El ritual del té, tan milenariamente trasmitido para conectar entre la historia y el vaporcito perfumado del agua donde sigilosa se va acercando a complicidades silenciosas, musicales, pero fundamentalmente presenciales.
@casaceferina: La amistad sigue siendo el ingrediente más esencial de su receta.