Cerrar la brecha digital, un desafío para el gobierno mendocino

El senador Lucas Ilardo responde a la consigna de Memo sobre el escenario pos pandemia.

Lucas Ilardo

La experiencia del aislamiento social obligatorio ha generado impacto en nosotros y seguramente habrá costumbres que cambiarán de cara al futuro; difícilmente la gente acepte viajar apretada en el transporte público, abarrotarse para realizar sus compras diarias, exponerse a esperar en largas filas o agolparse en espacios reducidos para realizar trámites ante organismos públicos.

Esta crisis ha acelerado experiencias sobre el trabajo realizado a distancia, la posibilidad de comprar mediante dispositivos móviles o seguir cursos educativos en las redes; sin embargo también ha desnudado una cara negativa de nuestra realidad porque una parte significativa de nuestra población no tiene acceso fijo a internet desde sus hogares y otros aún contando con dispositivos móviles tienen problemas económicos para acceder a paquetes de datos.

Con seguridad, el trabajo a distancia será una realidad en muchas áreas de servicios públicos y privados, los complementos digitales para la educación seguramente serán más utilizados, las compras online se afianzarán y la demanda sobre el Gobierno para mejorar la realización de trámites de manera virtual será significativa. 

Sin embargo, para que esto sea posible el principal desafío de la gestión provincial será trabajar más fuertemente en pos de cerrar la brecha digital garantizando el acceso a internet de miles de mendocinos que están excluidos por esta infraconectividad, esto será posible desde nuestra visión con un rol más activo del Estado en la provisión estratégica de estos servicios articulando acciones con organismos nacionales como Arsat, Enacom y los operadores privados.

Por otra parte, resulta necesario que el Gobierno articule políticas inteligentes convocando a desarrolladores, científicos y tecnólogos locales a fin de asegurar de manera transparente la elección de las mejores soluciones tecnológicas para gestionar el Estado y el acceso a los bienes públicos como salud, educación, justicia, seguridad, etc; contemplando cuestiones que deben ser incluidas en la agenda como el debate sobre soberanía tecnológica o el control del acceso a datos personales para garantizar la privacidad de las personas, etc.

Considero que se debe evitar el divorcio entre quienes tienen el conocimiento sobre las nuevas herramientas digitales y quienes toman las decisiones políticas.

Finalmente, estoy convencido que la emergencia por la covid-19 ha generado mayor conciencia sobre el valor de la participación ciudadana, de hecho la vacuna actual contra el virus fue la conducta responsable de la sociedad. Soy optimista aún en medio de la incertidumbre sobre cómo será el porvenir, simplemente porque en la medida que la gente participe y se involucre el futuro será como todos decidamos que sea.

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Observatorio económico