Conmemorando al gran Dante

Han comenzado ya desde junio pasado en Italia las celebraciones por los 700 años de la muerte del más grande poeta, Dante Alighieri. A inaugurar la primera muestra ha sido la ciudad de Ravenna, ciudad donde Dante murió en 1321. Abrió el sábado 12 de setiembre en la Biblioteca Classense la muestra "Inclusa est flamma. Ravenna 1921: il Secentenario della morte di Dante".

Esta primera muestra se refiere a un recorrido de documentación histórica que posee su núcleo central en las celebraciones nacionales por el VI Centenario dantesco 1921. Están expuestos libros, afiches, fotografías, pinturas, manuscritos y numerosos objetos de arte ofrecidos al poeta como homenaje y también a la Ciudad que fue su último refugio del poeta. Cada uno de los objetos testimonian la historia oficial, ofrece puntos para contar historias particulares, a menudo desconocida por el gran público y a veces sorprendentes.

Las fiestas dantescas y el olio (aceite) de Florencia

El sexto centenario de 1921 fue precedido de otros momentos celebrativos con valor nacional, como por ejemplo "Las Fiestas Dantescas" de setiembre de 1908, organizadas por la Sociedad Dantesca Italiana, que reunieron en Ravenna representantes de ciudades y territorios, en aquel entonces bajo la soberanía del Imperio de los Habsburgo. En aquel ano se encontraron en un abrazo fraterno Ravenna, Florencia, Trieste, Trento y las ciudades de la Venecia Giulia, de Istria y de la Dalmacia que después de la Gran Guerra completaron la Unidad de Italia. Nace en aquella ocasión la ceremonia del "olio" (aceite, en la cual anualmente Florencia ofrece el aceite destinado a arder en la lámpara al interno de la tumba, simbólico acto de expiación por el exilio impuesto al poeta. 

Fue justo en setiembre de 1908 que se presentó al público la Colección Dantesca Olschki, una de las colecciones bibliográficas dantescas más importantes del mundo. Adquirida en el 1905 por el librero anticuario y editor Leo Samuel Olschki, colección rica de más de 4000 volúmenes algunos de los cuales muy raros.

Además de lo ya citado, entre las piezas más importantes en muestra se podrá ver un modelo en bronce del monumento a Dante en Trento, realizado por Cesare Zocchi en el 1896; Dante en el pinar y Los funerales de Dante, operas del triestino Carlo Wostry (1865-1943) y los celebre sacchi (bolsas ) donados por Gabriel D'Anunzio y decorados por Adolfo De Carolis con el lema "Inclusa est flamma" ("la llama està al interno) que da el título a la muestra. 

Los "sacchi" en tela de yuta, conteniendo hojas de laurel en homenaje a Dante, fueron llevadas en avión a Ravenna por tres aviadores que habían participado a famosas empresas militares de D'Anunzio, como lo fue el vuelo sobre Viena del 1918.

Se estableció entonces un paralelo entre la llama que ardìa sobre la tumba del Dante y la llama perenne custodiada en el Santuario de Apolo en Delfi, considerada de los antiguos griegos el corazón vivo de su civilización. Una simbología iniciadora que quería representar al Dante visto como profeta de la Nación además de padre de la lengua italiana.