¿El fin de la hegemonía radical/cornejista?: La irrupción de Petri desafía el status quo

El panorama político en Mendoza, tradicionalmente blindado bajo la férrea disciplina de la Unión Cívica Radical y la influencia ineludible del Cornejismo, comienza a mostrar grietas significativas. Lo que hasta hace poco se consideraba una hegemonía inexpugnable, liderada por el hoy gobernador Alfredo Cornejo, enfrenta un desafío interno y externo que podría redefinir el mapa de poder provincial entre la creciente figura de Luis Petri y la fuerza de La Libertad Avanza.

Hay preguntas claves que se hacen algunos de los analistas, y, es si la irrupción de Petri y LLA podrá desbancar el "oscurantismo" que algunos medios atribuyen al Cornejismo. Este punto describe una percepción de hermetismo, verticalismo y control estricto de la información y las estructuras internas del poder radical, que se ha sostenido gracias a una disciplinada estructura territorial y una gestión provincial ordenada.

Repasemos, la estructura territorial férrea del sistema cornejista, que domina históricamente intendencias y cuadros locales que hasta ahora funcionan como una "máquina" electoral efectiva.

La estabilidad administrativa de la provincia, defendida por la UCR, contrarresta las críticas internas con la bandera de la "orden y la eficiencia" le da Legitimidad en la Gestión

El rol de Luis Petri es clave y se convierte en la cuña libertaria en Casa Radical. Sin embargo, proviene de las filas del radicalismo, su salto al Gabinete nacional y su alianza con el presidente Javier Milei lo convierte en una cuña libertaria como potencial perturbador

La legitimidad nacional de Petri hoy es un ingrediente en potencia con el aporte de una cara mendocina al éxito de Milei, atrayendo posibles votantes que buscan "cambio" sin pasar al peronismo/kirchnerismo. El cornejismo es un sistema que tiene legitimidad de gestión provincial. Un testimonio a flor de piel de la UCR, es que puede argumentar que Petri abandonó el proyecto local por ambición personal.

Para atraer contrarios, Puede importar el discurso de Milei contra la "casta política" para captar a los radicales hartos del verticalismo interno de la UCR. Tengamos presente que Los cuadros dirigentes, intendentes y la estructura partidaria siguen alineados con Cornejo por supervivencia política y control de recursos.

Para desafiar seriamente la hegemonía, Petri necesita atraer cuadros que le brinden estructura territorial. ¿Quiénes podrían migrar? Los perfiles con mayor potencial de fuga son, los radicales "disidentes" de la cúpula, los dirigentes de territorio sin proyección asegurada, el voto joven e ideológico permeable a las ideas libertarias, y las figuras cercanas al PRO/Bullrich que buscan mantener el vínculo con el poder nacional.

La enmarañada relación entre el cornejismo y el mileísmo se resume en un delicado equilibrio entre apoyo estratégico, los desacuerdo y la fuerte defensa del modelo provincial.

Cornejo ha sido claro en proteger el tema del déficit cero y la orientación general de la economía de Milei (más sector privado, menos impuestos), e incluso ha celebrado la aprobación de la Ley Bases como una herramienta clave, pidiendo recuperar su espíritu de consenso.

El gobernador estampa una línea al señalar que, "no se puede desconocer el papel que tiene que tener el Estado en la igualdad de oportunidades" ,y critica los errores de mala praxis política del gobierno nacional. Ha reclamado públicamente por la falta de coparticipación federal y por la paralización de obras de infraestructura nacional en la provincia.

La UCR mendocina pactó una alianza electoral con LLA para las legislativas, pero con límites, en una maniobra puramente pragmática. Sin embargo, el gobernador asegura que él no se va a afiliar a LLA. dejando en claro que el pacto es solo funcional, no implicando una unión ideológica ni la renuncia al proyecto radical provincial.

Está más que claro que Ante la amenaza de la fragmentación que implica la figura de Petri, el cornejismo activará sus mecanismos de contención.

Las estrategias defensivas, reforzar la gestión y blindar la administración provincial, destacando la estabilidad fiscal como el antídoto contra el caos nacional. Utilizar la estructura partidaria para disciplinar a los cuadros intermedios con la amenaza de la pérdida de espacios de poder. Etiquetar a Luis Petri como un "oportunista" que priorizó un cargo nacional sobre la lealtad al proyecto provincial, buscando minimizar su influencia local.

Por último, la negociación directa con la Nación, evitando que el vínculo con LLA sea monopolizado por Petri, asegurando que el diálogo institucional con Milei se mantenga a través del propio gobernador y su equipo.

Es improbable que Petri logre un desplazamiento total del cornejismo en el corto plazo. Lo cierto es que el sistema radical en Mendoza parece demasiado robusto. Sin embargo, Petri y LLA sí tienen la capacidad de romper la hegemonía y minar el "oscurantismo" al fragmentar el voto y generar grietas visibles en la estructura partidaria.

El desafío para el cornejismo será contener esta potencial fuga mientras sostiene el equilibrio de apoyar a Milei en lo macro sin permitir que el mileísmo mendocino absorba su base política. La batalla por el liderazgo en Mendoza recién comienza y representa una amenaza real.

El factor Petri promete ser la principal alteración y un lento desplazamiento en la Casa Radical.

Mirando hacia el 2027,¿será Cornejo candidato a vicepresidente dentro de la LLA?