Una misma vocación de democracia, desarrollo y buen gobierno
En Argentina hoy se celebra el Día de la Democracia por la asunción de Raúl Alfonsín tras años de dictadura.
Cada 10 de diciembre Argentina celebra el Día de la Democracia y de los Derechos Humanos. Esta fecha recuerda la asunción de Raúl Ricardo Alfonsín en 1983, el presidente que inauguró la etapa democrática más larga de nuestra historia, y que lo hizo con un mensaje y políticas públicas claras, precisas y profundamente transformadoras: nunca más la violencia política, nunca más el autoritarismo, nunca más la resignación frente a la injusticia.
Desde ese momento, "Democracia para siempre" es una de las banderas centrales de la UCR. El partido nació hace 134 años para abrir las puertas de la participación política y garantizar que la ciudadanía eligiera a sus gobernantes. Alfonsín encarnó esa tradición, la llevó a su máxima expresión y construyó, con convicción y coraje, un nuevo sentido común democrático. Su gobierno impulsó hitos que marcaron un antes y un después: el Juicio a las Juntas, la creación de la CONADEP, la modernización institucional y social, la patria potestad compartida, la ley de divorcio vincular y la vocación integradora que dio origen al Mercosur. No fueron gestos aislados: fueron pilares para reconstruir un país devastado y devolverle dignidad a un pueblo que exigía verdad, justicia y derechos.
Ese legado democrático no es un capítulo cerrado de la historia. sino que es una responsabilidad vigente que guía e interpela a quienes hoy gobiernan.
Un partido que gobierna, transforma y sostiene la institucionalidad
El Radicalismo continúa honrando su identidad reformista y democrático-republicana desde la gestión concreta. Cinco provincias y más del 30% de los municipios del país están conducidos por gobiernos radicales que ratifican un camino: austeridad, planificación, solvencia técnica, cercanía y una lógica de servicio público antes que de personalismo político.
En tiempos de incertidumbre, de discursos fáciles y tentaciones demagógicas, la UCR demuestra que se puede gobernar con responsabilidad, sin ceder a la improvisación ni a la fragmentación social. Este partido sigue siendo, como lo fue en 1983, un actor que prioriza la institucionalidad, el diálogo y la construcción de consensos.
Mendoza, modelo de gestión en el país
Mendoza es ejemplo de esa tradición de buen gobierno. Desde 2015, la provincia emprendió un proceso de transformación profundo: ordenamiento de las cuentas públicas, modernización del Estado, decisiones basadas en evidencia, apertura a la innovación y una estrategia de desarrollo sustentable que trasciende coyunturas económicas adversas.
Este camino, iniciado por Alfredo Cornejo y consolidado por sucesivas gestiones radicales desde los municipios, demuestra que es posible combinar identidad partidaria, profesionalismo y resultados concretos. Cada municipio gobernado por la UCR replica esa lógica: soluciones reales para los vecinos, obras que mejoran la calidad de vida y un Estado presente, moderno y eficiente.
Democracia es presente y es futuro
Celebrar el Día de la Democracia es recordar un hito colectivo, pero también asumir un compromiso. El compromiso con la verdad, la transparencia, el respeto institucional y la responsabilidad republicana. El compromiso con una política que no se agota en consignas, sino que se traduce en gestión, planificación y capacidad de resolver los problemas reales de la gente.
A 42 años de aquel 10 de diciembre de 1983, seguimos encontrando en Alfonsín un punto de partida y una brújula moral. La UCR honra ese legado cuando gobierna bien, cuando mejora la vida de las personas, cuando apuesta por el desarrollo, la educación y la igualdad.
"Democracia para siempre" es una tarea cotidiana, que no debe despegar de la gestión, de los territorios y necesidades reales de crecimiento. Así, es en las decisiones concretas,donde nuestro partido sigue escribiendo historia.