Panorama inmobiliario: ¿todo se vende?

Aparentemente, todo está en venta. Esta parece ser la situación actual del mercado inmobiliario

El efecto casas a medida

¿A qué llamarle "efecto casas a medida"? A una circunstancia muy puntual que está acaeciendo en la actualidad. Sucede que hace entre 10 y 20 años todo acontecía por ciclos. La gente cumplía su ciclo en una vivienda, por diversas situaciones y se mudaba. Su casa era rápidamente buscada por otro nuevo grupo familiar que se ponía en la situación de los anteriores moradores. Si un baño más, menos; que si el lavadero adentro, afuera; que si los pisos eran cerámicos... todo era susceptible de subsanarse.

¿Qué pasó?

Ocurrió que en la actualidad , nadie parece conformarse con meterse en los zapatos del otro. cada cual quiere su proyecto. Nos enfrentamos a un mercado con escasez de liquidez, donde todos los detalles cuentan, y además hay un salto generacional que cambió la forma de ver las viviendas.

Barrios privados masivamente en venta

Esto es muy notorio en ciertos barrios privados donde la gente adulta no tan mayor, decide cambiar, ya sea porque los hijos ya están grandes, porque no consideran seguir pagando expensas altas, o lo que fuere. ¿El resultado? No hay mercado .

Porque la zona donde está situada es más antigua, porque "ya no quiero carpintería que no sea de aluminio", porque el porcelanato -por decirlo amablemente- denigró al cerámico, porque "quiero más vista", "menos vecinos", "isla de trabajo", "más jardín", "menos jardín"...

¿Qué quiere la gente?

Lo que la gente quiere es hacer realidad su propio proyecto, su casa a medida, sólo que no están, en muchos casos, todavía decididos a emprender la titánica tarea para un amateur de construir.

La pregunta sería: ¿qué va a pasar con esa gran cantidad de viviendas que aún tienen mucho para ofrecer pero no parecen apetecibles a los ojos de los exigentes compradores?

Por ahora parece seguirán engrosando la lista de "todo está en venta".

Lamentablemente, no son buenas las noticias para los propietarios. Si pretenden salir de esta vivienda tendrán que considerar una seria readecuación al mercado. Un mercado que los engañó haciéndoles creer que se cotizaba a un precio que obviamente era parte de una burbuja.

En ninguna parte del mundo una casa con 20 años de antigüedad, lejos de disminuir su valor por depreciación de uso, aumenta por tres veces su valor original. Esto ha pasado y pasa.

Conclusión: mercado abarrotado y grandes niveles de frustración de los propietarios.

No maten al mensajero

Lamentablemente el rol del agente inmobiliario, tan vapuleado a veces, será valorado si somos serios, sabemos poner las cosas y los valores en su lugar. Esto va de suyo nos dejará sin varias de las propiedades que tenemos en cartera, porque es más fácil matar al mensajero que entender que quién nos engañó una vez más fue el mercado.

Todos, títeres en manos de un creador de ficciones. Las cosas no cuestan lo que nosotros decimos que cuestan. Las casas, terrenos, propiedades, valen lo que un señor llamado "comprador real" -porque tiene el dinero- está dispuesto a pagar por ese bien .

Se terminaron las listas de precios

Nada tiene un precio fijo. Todo, absolutamente todo, se negocia, se conversa, se financia. Los precios no son absolutos, son valores totalmente relativos, y tanto los grandes como pequeños desarrolladores lo saben y lo llevan adelante como política de venta. No dejamos escapar a ningún cliente esa es la consigna.

Tarea para el hogar

Los propietarios, individualmente, deberán comprender esta situación o quedarán al margen de cualquier transacción. 

Habrá quienes no estén apurados por vender y esperarán con esperanza las buenas nuevas del mercado. Pero también habrá de las otras situaciones cuando esperar, no es una opción.

En fin gente, ¡echenlé la culpa al mercado!

Fanny Cruz

CPI Matrícula 045