En vivo, el Cónclave ya está en marcha: misa, juramentos y secreto absoluto
Desde hoy, la Capilla Sixtina vuelve a ser el centro del mundo: 133 cardenales votan al sucesor de Francisco. Hay favoritos, sorpresas y tensiones internas.
El Vaticano volvió a convertirse en el escenario de un hecho histórico: este miércoles comenzó el cónclave que definirá quién será el nuevo Papa, tras la muerte de Francisco. Son 133 los cardenales con derecho a voto, todos menores de 80 años, que participarán del antiguo y reservado proceso que la Iglesia católica mantiene inalterable desde hace siglos.
La jornada inició con la tradicional misa "Pro eligendo Pontifice", celebrada en la basílica de San Pedro y presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio.
Durante su homilía, llamó a sus colegas a actuar con discernimiento, oración y responsabilidad, conscientes del momento decisivo que atraviesa la Iglesia.
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Ya por la tarde, los cardenales se reunieron en la Capilla Paulina para iniciar la procesión hacia la Capilla Sixtina. Acompañados por el canto de letanías y el himno Veni Creator Spiritus, caminaron en silencio, invocando la guía del Espíritu Santo antes de encerrarse para comenzar las votaciones que definirán al nuevo pontífice.
Dentro de la Capilla, los cardenales realizaron su juramento de secreto ante los Evangelios, un gesto que refuerza el hermetismo de este proceso.
La lectura del compromiso para sostener el secreto de la votación
Luego, el maestro de ceremonias pontificio, monseñor Diego Ravelli, pronunció el emblemático "Extra omnes", la frase que ordena la salida de todos los no electores y da inicio al encierro.
Este el orden en que los cardenales votarán al nuevo Papa
Con las puertas cerradas, se apaga el mundo exterior y comienza el tiempo del silencio, la oración y la deliberación. En esa atmósfera espiritual y cargada de historia, el Vaticano aguarda la señal más esperada: el humo blanco que anuncie al próximo Papa.
El inicio de la jornada
Este miércoles, a partir de las 11:30 de la mañana (hora argentina), comenzó en la Capilla Sixtina un cónclave que podría marcar un punto de inflexión en la historia reciente del Vaticano. Los 133 cardenales menores de 80 años habilitados para votar deben consensuar al sucesor de Francisco, en un proceso que se anticipa breve, según coinciden analistas vaticanos.
El encuentro cobra especial relevancia tras un pontificado de doce años que dejó huella por sus reformas internas y las tensiones que generó entre sectores progresistas y conservadores. Durante los días previos, los cardenales -incluidos aquellos mayores de 80, que no votan pero sí participaron de las congregaciones generales- discutieron a fondo el perfil que debería tener el nuevo Papa.
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De acuerdo con medios italianos, los sectores reformistas llegan con ventaja, aunque no se descarta la posibilidad de que un candidato moderado surja como figura de consenso para preservar la unidad dentro del colegio cardenalicio y, al mismo tiempo, sostener el rumbo iniciado por Bergoglio.
Figuras en carrera
El nombre más fuerte que circula en Roma es el del italiano Pietro Parolin, actual secretario de Estado del Vaticano. A sus 70 años, es visto como un candidato equilibrado y hábil en diplomacia, lo que podría convertirlo en un puente entre las distintas corrientes. Sin embargo, su falta de carisma y escasa experiencia pastoral son señaladas como debilidades.
En la línea de los "bergoglistas", destacan Matteo Zuppi, arzobispo de Bolonia con fama de comprometido con las causas sociales, y el filipino Luis Antonio Tagle, muy querido por sus fieles y conocido por su carisma. También aparece el italiano Pierbattista Pizzaballa, patriarca latino de Jerusalén, aunque su juventud relativa (60 años) podría jugar en su contra, al implicar un papado potencialmente prolongado.
En el sector más conservador, el húngaro Peter Erdo se perfila como el referente más sólido. También figura el guineano Robert Sarah, quien podría hacer historia como el primer papa africano.
Hay, además, un grupo de candidatos con menor visibilidad, pero con chances, entre ellos el francés Jean-Marc Aveline, cercano al pensamiento de Francisco pero con un tono más moderado; el portugués José Tolentino de Mendonça; el congoleño Fridolin Ambongo Besungu; el italiano Fernando Filoni y los estadounidenses Blase Joseph Cupich y Robert Francis Prevost. Este último, exobispo en Perú y con doble nacionalidad peruana-estadounidense, es hoy el latinoamericano con mejores perspectivas, por encima del uruguayo Daniel Sturla. También se mencionan algunos argentinos, aunque sin expectativas concretas: Víctor "Tucho" Fernández, Vicente Bokalic Iglic, Ángel Sixto Rossi y Mario Poli.
Tiempo y dinámica del cónclave
Todo indica que los cardenales buscarán una elección rápida. La intención es enviar un mensaje claro de cohesión interna. Si se repite el patrón de los dos últimos cónclaves, la decisión podría concretarse en apenas dos días.
Se espera que la primera "fumata negra", señal de que aún no hay acuerdo, surja el miércoles por la tarde (alrededor de las 14 hora argentina). De no haber consenso ese día, el jueves habrá cuatro votaciones: dos por la mañana y dos por la tarde.
La Capilla Sixtina albergará el cónclave que elegirá al nuevo papa
La votación inicial servirá como termómetro: permitirá identificar cuáles son los nombres con mayor respaldo dentro de cada sector. A partir de allí, podrían abrirse negociaciones orientadas a definir un candidato de unidad, especialmente si ninguna figura logra imponerse con claridad.
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Si los reformistas logran articular mayorías desde el principio, la elección podría definirse rápido. En cambio, si el proceso se estanca, la pulseada podría alargarse y dar lugar a la aparición de un perfil moderado como salida negociada.
La fumata blanca, que anunciará al nuevo pontífice, podría aparecer entre el jueves y el viernes.
