Fernández Sagasti admite una "fractura en mil pedazos" y tensiona el cierre de listas del PJ mendocino
A horas del cierre definitivo de listas, la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti reconoció que el partido "está roto, no en dos sino en mil pedazos" y advirtió que, de no lograr una síntesis real, su sector podría competir por fuera con una herramienta propia.
Durante una conferencia de prensa convocada este lunes, la senadora nacional y representante del kirchnerismo en Mendoza, Anabel Fernández Sagasti combinó la confirmación de su sobreseimiento en una causa judicial (supuesta malversación de dinero del Fondo de Integración Social Urbano) con un duro mensaje a la conducción del PJ provincial. Entre acusaciones de "vetos arbitrarios", cambios de reglas "a las tres de la mañana" y negociaciones fallidas, describió un clima interno al borde del colapso: "Hoy el peronismo está roto. No en dos pedazos, sino en múltiples pedazos. He hecho todos los esfuerzos personales y políticos para lograr unidad, pero no se encuentra la voluntad de construir un frente que represente a todos los mendocinos que la están pasando mal con las políticas de Milei y Cornejo", disparó.
En plena tensión preelectoral, la dirigente de La Cámpora apuntó a la conducción partidaria por "no garantizar reglas claras" y reclamó "una unidad real y no un rejunte de dirigentes pegados con alambre". Aunque evitó dar definiciones personales, dejó la puerta abierta a una ruptura formal: "Si no hay espacio para discutir un frente común, usaremos la herramienta electoral que hemos construido", adelantó, en alusión a Unidad Popular, la fuerza que su sector viene fogoneando.
Además, Fernández Sagasti reafirmó su estrategia de confrontar directamente con el oficialismo provincial y nacional: este lunes anunció que denunció penalmente al gobernador Alfredo Cornejo por supuesta malversación de fondos y abuso de autoridad por el convenio con Vialidad Nacional para reparar rutas federales. "Cornejo está haciendo que los mendocinos paguemos tres veces lo mismo: con impuestos, con fondos propios y con peajes", acusó.
El PJ mendocino tiene plazo hasta este martes a la medianoche para ordenar internas, cerrar candidaturas y evitar la fragmentación. En paralelo, la presión de la CGT, intendentes y otros espacios del peronismo no alineados crece minuto a minuto. Fernández Sagasti aseguró que "hay diálogo hasta las últimas consecuencias", pero insistió en que "la unidad por la unidad misma no sirve si no representa algo concreto".
Con una interna atomizada, el desafío del peronismo mendocino no es menor: rearmarse para disputar poder en una provincia gobernada por el radicalismo desde hace casi una década y con la ola libertaria aún en expansión. El reloj corre y, como advirtió la senadora, "siempre estaré dispuesta al diálogo, pero esta vez no seré cómplice de un rejunte sin convicciones".
