Grupo Matheu: el equipo minero de Alberto que integra un mendocino

Reunidos en Matheu 130, sede del PJ nacional, preparan un plan estratégico minero para el próximo presidente.

Mientras que en Mendoza el peronismo resiste la reforma de la Ley 7722, que restringe el desarrollo de la industria minera, a nivel nacional el PJ avanza en un plan estratégico para la actividad. Para ello, un grupo de economistas, ingenieros y exfuncionarios de distintas provincias elaboran un documento final que deberá llevar a la práctica Alberto Fernández.

Entre los integrantes del "Grupo Matheu", que debe su nombre al domicilio de la sede del PJ nacional, donde se concetran, hay un mendocino. Se trata de Marcos Zandomeni, ingeniero vinculado a la actividad privada que en su momento fue ministro de Ambiente y de Energía de la Provincia.

Zandomeni ya se encontraba colaborando con el equipo del PJ que rodea a Alberto Fernández en temas energéticos, junto a otro mendocino: el expresidente de Cammesa Alejandro Neme. Ahora, particularmente tiene una activa participación en el Grupo Matheu, una especie de thing tank minero formado por el economista Marcos Fontela, un hombre de José Luis Gioja.

Justamente, Gioja y Ginés González García comenzaron a armar equipos dentro de la estructura del PJ para fortalecer a Alberto Fernández en la lucha de poder con La Cámpora y el resto del cristinismo, a la hora de diagramar el Gabinete y los planes de gestión. En ese contexto, fueron surgiendo estos grupos como los que integra Zandomeni.

En una reunión que se realizó a comienzos de noviembre, hubo acuerdo en reimpulsar la Ofemi (organismo que integran las provincias mineras), una entidad que pasó casi desapercibida durante la gestión de Mauricio Macri. Asimismo, se espera que en los próximos días, el Grupo Matheu emita un documento sobre la gestión minera.

Al respecto, el sitio Minning Press publicó lo que sería un borrador de ese documento que se viene preparando en el PJ:

Gestión Cambiemos:

+ Cambio de reglas de juego. Retenciones no, retenciones sí, retenciones a medias.

+ Desarticulación entre las provincias. Cada una empujada a llevar adelante sus propias políticas mineras.

+ Desaparición virtual de OFEMI.

+ Ausencia de grandes anuncios. No hubo proyectos de envergadura que empezaran durante la gestión (salvo pocas excepciones); más bien algunos avances respecto de inversiones ya existentes.

+ Nuevo Acuerdo Federal Minero que no terminó de consolidarse ni llegó a su tratamiento definitivo en el Congreso.

+ Mejora relativa en los canales de comunicación. Actualización de la página web de la Secretaría con informes de coyuntura.

Gestión Fernández - Fernández:

+ Creación de un Observatorio de Políticas Públicas e Inversiones Mineras. El mismo deberá trabajar en el estudio, investigación y elaboración de propuestas de mediano y largo plazo respecto de la actividad minera. Debe necesariamente estar articulado con las autoridades de minería provinciales las cuales formarán parte del mismo.

+ El Observatorio realizará además estudios estadísticos que se mantendrán constantemente actualizados respecto de la cantidad de proyectos en marcha; monto de inversiones existentes; fuentes de empleo directo e indirecto; estado actual de los proyectos; etc.

+ El Observatorio propondrá la actualización de normativa minera teniendo en cuenta el clima social y político para llevar adelante cada una de las iniciativas que requerirán acompañamiento legislativo.

+ Participación Público - Privado. Los tiempos que se vienen requieren de una sinergia especial entre el sector público y el privado en pos de la preservación de los puestos de trabajo y la colaboración mutua en el normal desenvolvimiento de los proyectos. La presencia del gremio de los trabajadores (AOMA) debe también estar garantizada

+ Desde el área de minería se propondrán reuniones semanales con los representantes de las cámaras mineras y el gremio.

+ Creación de la "Dirección (subsecretaría, otro)" de Investigación y Desarrollo (I + D). Es necesario que desde el área de minería se ponga especial énfasis en la investigación no solo de los lugares aptos para la inversión minera, los recursos existentes y las condiciones geológicas y geográficas; sino participar además (quizás a la par de privados o universidades) en la investigación de nuevos procesos productivos que incorporen la tecnología existente y sean cada vez más amigables con el ambiente.

+ Resulta asimismo de vital importancia que desde el área se trabaje de manejara conjunta y articulada con los máximos organismos de ciencia y tecnología que posee el Estado.

+ El LITIO debe ser considerado como una prioridad en el área de I+D a fin de lograr pequeñas metas de industrialización local. Se deben replantear políticas conjuntas entre las provincias productoras a fin de aunar esfuerzos y concentrar inversión en valor agregado con apoyo estatal nacional.

+ Otros tantos minerales deben ser trabajados en esta misma sintonía. Es el caso, por ejemplo, de las Tierras Raras, en las que grandes multinacionales ya han puesto el ojo para saltear la hoy casi absoluta dependencia de China.

+ Especial tratamiento deben tener también los denominados "agro minerales" por su importancia para el desarrollo productivo del país. Debe trabajarse en forma mancomunada con las áreas nacionales y provinciales de producción.

+ Comunicación. Fortalecer el área de comunicación es imprescindible. El sector debe salir del "oscurantismo" que eligió durante muchos años y que no llevó a más que poner un manto de sospecha sobre muchos proyectos o posibilidades de inversión.

+ La minería debe terminar de consolidarse como una actividad productiva válida y fundamental para el desarrollo de las diversas regiones de la Argentina.

+ Se debe pensar en un plan de comunicación y difusión de la actividad minera poniendo en valor la importancia que representa para muchas de nuestras provincias en lo que hace a la generación de puestos de trabajo, el impulso al comercio local, los ingresos económicos, etc. Mucha de la información que se difunda será la que pueda producirse desde el Observatorio.

+ Integración Social. Se propone la creación de un Manual Nacional de Buenas Prácticas con lineamientos o pautas mínimas, que tenga en consideración la práctica de la minería no solo garantizando el total cumplimiento de la normativa ambiental existente sino todo aquello que refiere a la obligación de receptar los tratados internacionales y leyes locales que aseguran la participación de los pueblos originarios en los procesos productivos que involucran a su territorio.

+ Se propone un trabajo coordinado con la Secretaría de DDHH, el INAI y las dependencias provinciales en la materia a fin de elaborar un documento actualizado y dinámico que dé fe de los lugares en donde se asientan comunidades con personería jurídica otorgada o en trámite.

+ Política Internacional. Se debe retomar la participación en las principales ferias mineras internacionales y el contacto directo con los principales jugadores mineros del mundo. Esta misión debe nuevamente estar encabezada, organizada y dirigida por el sector público con el acompañamiento de los privados. El gobierno debe asimismo realizar su mayor esfuerzo para lograr que productores medianos o pequeños puedan ser parte de la comitiva.

+ Garantizar un verdadero Desarrollo local. El área de minería debe realizar un especial seguimiento y acompañamiento de las poblaciones en donde se desenvuelven los proyectos mineros. Pueblos pobres, mineras rica es un concepto que debe ser desterrado del todo y para siempre.

+ Para ello se propone trabajar en sintonía con las provincias y los municipios mineros o con potencialidad minera de manera que estos últimos puedan ir realizando un plan estratégico de desarrollo territorial y detectar las reales necesidades de la población. Sucede que muchas veces el Estado o las mismas empresas, (por responsabilidad social, convenios o lo que fuera) destinan gran cantidad de recursos que no son del todo aprovechados o puestos en valor; mucho menos visibilizados masivamente. Con una mirada estratégica del territorio se podría ir contemplando inversiones público - privadas que hagan al real y sustentable crecimiento de las comunidades aledañas. Esto tendrá además especial relevancia al comunicar luego las virtudes de la minería.

+ Otra vez, el Observatorio tendrá un rol preponderante. Se puede desde ese lugar trabajar en capacitaciones, cursos de formación o incluso en un involucramiento mixto con los municipios para pensar y delinear planes de desarrollo estratégico.

+ Acompañamiento y fortalecimiento de la Educación en materia de Minería. Con independencia del trabajo para lograr una mayor y necesaria diversificación de carreras vinculadas a la actividad minera en las provincias, con delegaciones o sedes además en los municipios mineros o con posibilidades de actividad minera; el área de minería nacional, en colaboración con las provincias y los municipios, debe implementar un novedoso plan de capacitación y formación minera que tenga en cuenta la efectiva posibilidad de inserción laboral en la minería, teniendo en cuenta las particularidades propias de cada provincia o región.

+ El Observatorio brindará la información completa y necesaria para detectar la real demanda del sector en cada una de las regiones y/o provincias/municipios.

+ Se firmarán convenios con universidades y centros tecnológicos a fin de utilizar las estructuras existentes y coordinar acciones en materia educativa.

+ Fortalecimiento de áreas institucionales. Desde la cartera minera nacional se debe asistir técnica y económicamente a las provincias a fin de que puedan lograr en primer lugar contar con los recursos técnicos y económicos necesarios para realizar todas las funciones que le corresponden como tal. Deben para ello tener personal idóneo, por ejemplo para las tareas de fiscalización o monitoreo de las actividades de las empresas.

+ El fortalecimiento implica poder contar con personal capacitado en lo legal, geológico, contaduría, ciencia, etc.

+ Significa además la posibilidad de ir hacia una modernización de los equipos técnicos.

+ La modernización implica por ejemplo, que las provincias puedan contar con sistemas digitales actuales de carga de datos que, a su vez, les permita un seguimiento en tiempo real de las acciones territoriales.

Esta nota habla de: