Izquierda en Mendoza: quiénes son y qué harán en estas elecciones

Lautaro Jiménez, senador provincial del Frente de Izquierda Unidad, brindó definiciones de cara a los comicios legislativos 2021. Aseguró que están con "los tapones de punta" para volver a ser la tercera fuerza y que hay mucha gente desencantada con el gobierno de Alberto Fernández.

Son varias las expresiones políticas que en Mendoza y de cara a las elecciones legislativas que tendrán lugar este año, buscan posicionarse como la tercera fuerza. Es decir, ser una alternativa para aquellos ciudadanos que --por distintos motivos- ya no quieren votar al peronismo, al radicalismo ni a ninguna de sus ramificaciones.

Una de ellas es el Frente de Izquierda Unidad (FIT), que desde 2019 en la provincia además de estar integrado por el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) y el Partido Obrero (PO) tiene al Movimiento de los Trabajadores Socialistas (MST) militando en sus filas. Así, para conocer cómo jugará este espacio en los comicios 2021, el diálogo de Memo fue con Lautaro Jiménez.

Con 35 años, el docente de primaria, tiene ya una trayectoria política consolidada. Actualmente, es senador provincial por el FIT y es, dentro del frente, uno de los más y mejor posicionados socialmente. Además, está cursando una licenciatura en Economía y dispuesto a ir donde el partido lo solicite en este 2021.

Así, para saber quiénes son hoy las principales figuras, cómo competirán, los motivos por los que creen haber perdido ese tercer lugar que alguna vez consiguieron (con más del 11% de los votos en Mendoza) y a qué sector del electorado apuestan a conquistar, charlamos largo y tendido con él.

Las primeras definiciones y los que encabezarán las listas

En cuanto a las definiciones concretas de quiénes dentro del partido competirán en estas elecciones, Jiménez contó que el fin de semana pasado hubo un congreso nacional del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) y allí se votó que Noelia Barbeito y Lautaro Jiménez serán dos de las posibles cabeza de lista.

De todas maneras, en una convención electoral que se hará justamente para definir el armado de listas se determinará a qué cargo aplicará cada uno de ellos. "Teniendo en cuenta que una de las definiciones que tenemos es que hay una pelea muy importante por buscar la representación de una tercera fuerza; tanto en el Congreso como en la Legislatura", comienza marcando él mismo.

Y sigue: "Noelia y yo iríamos uno al Congreso y otro a la Legislatura. Aún no definimos quién va a donde, hay que evaluarlo en la convención en qué categoría conviene. Quizá vamos los dos al Congreso, a la Legislatura, que ahí depende de qué distrito sos, o uno a cada lugar. Se analizará aquí en Mendoza. Antes del 14 de julio nuestros candidatos ya van a estar definidos".

-¿Qué lugar te gustaría ocupar?

-Yo voy a estar contento en donde mis compañeros y compañeras crean que debo estar. Ya de por sí me sorprendió, pero obviamente lo tomo para bien y es elogioso que me vuelvan a elegir como una figura pública. Ya he representado también anteriormente al FIT, he podido estar en la Legislatura en defensa de nuestras ideas con mucho ahínco y estoy muy conforme con eso.

Entonces, tengo agradecimiento y lo que quiero es ir en donde consideren que es mejor. No tengo una preferencia particular. Sí estoy con los tapones de punta para que podamos recuperarnos y volvamos a ser la tercera fuerza en Mendoza y a nivel país, que es una disputa muy importante.

-¿Por qué es tan importante ocupar ese tercer lugar?

-No es sólo por el lugar. Tiene que ver aquí con cómo se va a traducir esa enorme fuerza social que significó la lucha por la 7.722, por la educación pública, la marcha de la Salud que ocurrió esta semana. Buscamos que todo ese movimiento sea traducido políticamente en un acompañamiento de la izquierda y no en un fortalecimiento de la derecha reaccionaria como son los libertarios, el PD o todos los demás experimentos que también están tratando de buscar ese lugar.

O, una polarización en la que termina sólo quedando representado el Justicialismo y la Unión Cívica Radical, que han sido los dos partidos que han terminado concentrando todos los gobiernos en el último tiempo. Así que estoy muy enfocado en eso y me voy a poner a disposición para ir en cualquier lugar que los compañeros crean que puedo contribuir más.

-¿A nivel nacional quiénes son sus principales referentes actualmente?

-Nicolás Del Caño, que tenemos encima el orgullo de que salió de Mendoza y que ahora será candidato en la provincia de Buenos Aires, que es uno de los centros políticos de las batallas nacionales más importantes. Y Myriam Bregman, que juntos fueron la fórmula presidencial la última vez.

-¿Qué perspectivas tienen en Mendoza de lograr reconquistar el espacio de la tercera fuerza, siendo que hay varias expresiones buscando lo mismo?

-Vemos que la gente que se está volviendo a acercar al FIT viene fundamentalmente de haberse desencantado con el Gobierno nacional porque tenía otras expectativas de Alberto Fernández. Nosotros habíamos caído mucho electoralmente porque se había instalado con una gran fuerza el supuesto de que el problema estaba únicamente centrado en la figura del expresidente Mauricio Macri y que una vez que sacaran a Macri las cosas iban a mejorar.

Se pensó que sin Macri y con Alberto la economía iba a estabilizarse, iba a volver el asado, nuevamente las personas tendrían la heladera llena y conseguirían trabajo. Eran cosas que, más allá de que uno desde lo político se daba cuenta de que no era así, mucha gente creyó. Justamente, porque era -y sigue siendo- una necesidad real, porque Macri estalló la economía.

-Sugerís con esto que la gente se desencantó con Alberto Fernández...

-Ahora, en estos casi dos años, se está viendo por ejemplo que con la pandemia los que reciben rescates y demás son los sectores más poderosos y se está sufriendo un ajuste muy fuerte. Entonces, mucha gente se está preguntando qué pasó con este gobierno que supuestamente venía para volver a favorecer a los sectores trabajadores.

Como esto no sucede, se están dando cuenta de que la Izquierda sí ha estado siempre en los procesos de reivindicación de los sectores más humildes y vulnerables. Ven que hemos acompañado el reclamo de los obreros vitivinícolas, que rechazamos el pacto político que fue uno de los más espurios que se ha visto en los últimos años, entre Anabel Fernández Sagasti (PJ) y Rodolfo Suarez (UCR) para modificar la ley 7.722.

Eso empezó a revalorizarnos y considero que hay mucha gente que se ha dado cuenta de que es muy necesario que esté la Izquierda. Sobre todo, porque estas elecciones son legislativas. Si la Izquierda no está en la Legislatura nunca se va a denunciar el desarraigo, los dietazos, todo lo que ha ido saliendo a la luz gracias a nosotros y a estar cumpliendo con llevar los reclamos de los trabajadores como legisladores. En ese sentido, creemos que el FIT tiene muchas posibilidades y fuerza para recuperar terreno.

-¿Qué autocrítica hacen internamente del motivo por el que perdieron ese lugar? Más allá de que Fernández captó una parte de su público, ¿en qué consideran ustedes que se equivocaron?

-Creo que no supimos lograr traducir un mensaje que afrontara esa tremenda polarización que se empezó a generar después de 2017. Nosotros llegamos hasta ese año con un apoyo y una fuerza muy grande. Habíamos sacado el 11,5% de los votos. En ese momento, cuando empieza a descontrolarse la situación con los golpes de mercado, se va la moneda muy arriba, se genera una angustia enorme y nosotros no logramos traducir un mensaje político que le diera seguridad a nuestros votantes de que el Frente de Izquierda podía ser una alternativa importante al macrismo.

En esa lucha política, en su momento, quedamos muy debilitados, no logramos afianzarla y perdimos mucho ese espacio con las promesas que venían del lado de una renovación del propio peronismo. Y tuvimos una fuerte fuga de votos hacia Alberto Fernández en la Nación y hacia Anabel Fernández Sagasti en Mendoza.

En ese sentido, tenemos que hacer una autocrítica de por qué no logramos convencer. Y tratamos de llegar, más que solamente pensando, yendo y estando donde tenemos que estar. Escuchando lo que nos dice la gente; los vitivinícolas, los docentes, el personal de la Salud, todos aquellos que nos van transmitiendo otras ideas y nos ayudan a pensar en otro mensaje. Porque la autocrítica también viene de lo que nos pueda enseñar la gente. 

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