Marita Perceval, la mendocina omnipresente

María Cristina Perceval asumió en la subsecretaría de Cooperación Internacional del Ministerio de Educación de la Nación. Más de 30 años de experiencia en la gestión local, nacional e internacional.

Hay un solo cargo, posiblemente, que la peronista mendocina María Cristina Perceval, Marita, quiso tener y no le otorgaron la posibilidad de ejercerlo: el de ministra de Defensa. En varios momentos estuvo nominada, pero otros le torcieron el brazo. Sin embargo, su protagonismo en la gestión o en la vida política, provincial, nacional o internacional, no se opacó por ello.

La noticia ahora es que la Subsecretaría de Políticas de Cooperación Internacional del Ministerio de Educación de la Nación quedó a su cargo, con el ministro Nicolás Trotta como su jefe. Así, Perceval vuelve a la Argentina desde un importante lugar internacional, Unicef para América Latina y el Caribe, al que accedió luego de ocupar la representación permanente del país ante las Naciones Unidas.

Desde su cargo en la ONU Perceval no obtuvo una plataforma para la política local, pero sí un escenario de desempeño sobre una de las realidades más dolorosas: el estado de la niñez, su situación socioeconómica, la vulnerabilidad que la afecta y, sobre todo, los casos especiales con los que le tocó lidiar, como el de los niños y adolescentes que se van o que se quedan en Venezuela.

Un breve repaso por su permanencia en cargos de decisión permite sumar 30 años de experiencia. Entre 1989 y 1995 desempeñó diferentes cargos en el gobierno de Mendoza, sobre todo en los vinculados a las mujeres, antes de que explotara la cuestión de género. A mediados de la década de 1990 fue nombrada coordinadora del Programa de Igualdad de Oportunidades en Educación, durante la gobernación de Carlos Ruckauf en la provincia de Buenos Aires, acompañando a su mentor político, José Octavio Bordón.

Se fue del Partido Justicialista justamente con Bordón para integrar el Frepaso primero y la Alianza después, y otros peronistas de izquierda en la coalición FrePaSo en las elecciones de 1995 y luego al Partido Justicialista. En 2001 fue elegida senadora nacional a través del PJ. Dos años después, revalidó su banca en las elecciones de 2003 y se integró al interbloque kirchnerista. Para las elecciones de 2007, se sumó a la Concertación Plural que impulsó el vicepresidente Julio Cobos, pero se separó del exgobernador mendocino en la lucha por la Resolución 125, para alinearse con el gobierno de Cristina Kirchner.

El gobierno kirchnerista la envió a la ONU como representante argentina y en enero de 2015, Perceval presidió la Asamblea General de las Naciones Unidas. De allí, fue designada por el cuerpo para presidir Unicef en América Latina y el Caribe.

La llegada de Alberto Fernández la devuelve a su tierra. Ahora, la vecina de Chacras de Coria (ocasional en los últimos años) tiene una nueva responsabilidad: buscar fondos en el mundo para mejorar la educación.

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