Un ulpianista rompió con Cornejo, dos concejales se fueron al Caribe y el hijo de un intendente que quebró una alianza
Perlitas polítIcas al borde del fin de semana, con datos que surgen desde los partidos políticos, en donde todavía no catalizan las "calenturas".
Las calenturas son malas consejeras. "El que se enoja, pierde", suele escucharse como máxima a cumplir en la política. Pero no todos hacen caso y se enojan. Y pierden.
Otros se relajan demasiado y una vez cerradas las listas y con laburo atornillado por "mandato popular", se van al Caribe.
Hay más casos, pero los iremos dosificando.
Una candidata para la Legislatura de Mendoza vive y trabaja a más de 1.000 km
El primero es el concejal que hallaron conduciendo ebrio tras ir a una fiesta en Alvear junto a asesores legislativos. Se llama Miqueas Burgoa, estaba convencido de que, enojado con sus pares radicales, se iría a ser candidato de la lista de Difonso (Provincias Unidas) o del Partido Verde. Pero no lo convocaron.
Ulpianista de la primera hora, no le gusta teñirse de violeta. Y así como el intendente de la Ciudad, Ulpiano Suarez, pasó y se fue del acto en Talleres en donde se junto la lista de LLA más Cambia Mendoza, el tal Burgoa pegó un portazo a su bloque en el Concejo Deliberante de Guaymallén (que no lo echó y en donde sigue cobrando) y armó un bloque aparte.
Lo hizo con pompa, con un comunicado de prensa, pero, en los hechos, no significa demasiado. Su "Movimiento Provincial Alfonsinista" alardea jurisdiccionalmente, pero solo cuenta con su banca y en Guaymallén. Y se le termina el mandato, así es que poco implica la movida.
El video meme que copa los grupos de whatsapp radicales
Dos colegas suyos sí la hicieron mejor. La sesión de hoy del Concejo Deliberante de Guaymallén no tuvo dos presencias: sus dos vicepresidentes. Uno es Ezequiel Genovese, radical y el otro es Pedro Bastías, que entró por el Partido Verde pero que denominó a su bloque como "Mejor Mendoza". Los dos vacacionan en el Caribe.
El otro dato fuerte es lo que sucede en el armado político de Rivadavia. Allí, otro radical que se enojó en su momento y que armó otro partido, Sembrar, tenía como aliados a los Libres del Sur, que ahora se fueron de Cambia Mendoza y del Gobierno y son parte del Frente Verde, junto a Mario Vadillo.
El asunto es que el referente de Libres era Andrés Mansur, el hijo del intendente, quien decidió terminar con los acuerdos del partido de su papá con sus amigos. Andrés, secretario de Desarrollo Social les dio de baja.
Se desconoce si es solo por el armado de listas para sus elecciones municipales de febrero (ya que Rivadavia desdobló) o si incluye a los puestos de gestión. Lo cierto es que en esa comuna se sigue cultivando la antigua relación que nació hace muchos años con el Partido Socialista, de la mano de Manuel Liberal (vaya paradoja su apellido) en tiempos de la Alianza, por la que fue legislador provincial. Ahora esa gente está con Jorge Difonso en la reedición de "Vamos Mendocinos!" y "La Unión Mendocina", que se llama por ahora "Defendamos Mendoza Provincias Unidas".
