Niebla mental en la menopausia: el síntoma invisible que afecta memoria y concentración

Cada 18 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Menopausia, una oportunidad para visibilizar los cambios que atraviesan las mujeres durante esta etapa y cómo impactan en su bienestar físico y mental. Más allá del final del ciclo menstrual, que suele ocurrir entre los 45 y 55 años, existen síntomas menos conocidos que pueden persistir durante años, siendo la llamada "niebla mental" uno de los más silenciosos pero debilitantes.

La niebla mental se manifiesta como confusión, lentitud para razonar y dificultad para procesar información. Aunque episodios aislados de falta de claridad pueden ser habituales ante estrés o ciertos medicamentos, cuando estos signos se mantienen en el tiempo se convierten en un verdadero obstáculo para la vida diaria.

Alfonso Galán, especialista en envejecimiento explica que las pacientes describen esta sensación como "una mente espesa, que no responde con la agilidad de antes". No se trata de una enfermedad, sino de un síntoma complejo que refleja desequilibrios biológicos subyacentes, desde cambios hormonales hasta alteraciones metabólicas, intestinales y de energía celular.

Entre los efectos más frecuentes de la niebla mental se destacan:

• -Dificultades para concentrarse en tareas cotidianas o laborales.

• -Pérdida de memoria a corto plazo, como olvidar citas, nombres o ideas recientes.

• -Lentitud para procesar información y tomar decisiones.

• -Fatiga mental exagerada tras actividades que antes no resultaban exigentes.

• -Cambios emocionales, incluyendo irritabilidad, apatía o ansiedad.

• -En algunos casos, síntomas digestivos que sugieren un vínculo con la salud intestinal.

La causa principal de estas alteraciones está ligada a la caída de estrógenos y progesterona, que modifica la neurotransmisión, la vascularización cerebral y los ritmos circadianos. Los estrógenos, esenciales para la memoria y la plasticidad sináptica, comienzan a disminuir incluso durante la perimenopausia, lo que explica que muchas mujeres perciban niebla mental antes del último ciclo menstrual.

Otros factores pueden intensificar este síntoma, como el insomnio, la disbiosis intestinal, déficit de NAD (Nicotinamida adenina dinucleótido) tras infecciones como Covid-19, o resistencia a la insulina.

Aunque la menopausia es la causa más estudiada, los hombres también pueden experimentar confusión y lentitud cognitiva durante la andropausia, asociada a la disminución gradual de testosterona. En estos casos, la terapia hormonal bioidéntica puede mejorar la vitalidad y la agudeza mental.

La niebla mental puede resultar altamente incapacitante, afectando tanto el desempeño laboral como la vida familiar y social. "Hay profesionales brillantes que sienten que ya no rinden, o padres y madres que antes organizaban todo y ahora se sienten sobrepasados", comenta Galán. Este desgaste cognitivo genera pérdida de confianza y autoestima, generando un ciclo de ansiedad y bajo rendimiento que, según los expertos, puede ser más limitante que el dolor físico.