Ezequiel Parolari, analista internacional: "En Argentina la institucionalidad está totalmente erosionada"
El analista internacional y consultor político Ezequiel Parolari analizó académicamente la decisión de la Corte y también las implicancias que puede tener en el futuro tanto político como institucional del país.
El fallo de la Corte Suprema de Justicia en contra de Cristina Fernández de Kirchner despertó diferentes análisis no solo jurídicos, sino también políticos tanto del corto como del largo plazo. El analista internacional y consultor político Ezequiel Parolari habló con "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y realizó un análisis académico de lo ocurrido y lo que puede ocurrir.
"Lo que está sucediendo en la Argentina, el procesamiento de Cristina Fernández de Kirchner me pone una tesitura un poco contradictoria. Trato de ser lo más neutral posible porque no quiero socavar la decisión del del poder judicial, no quiero que piensen que soy kirchnerista o soy antikirchnerista y creo que acá está el mayor problema hoy en día de la sociedad argentina. Para algunos o para muchos, Cristina Fernández de Kirchner es inocente; para algunos o para muchos Cristina Fernández de Kirchner es una delincuente, una chorra, una corrupta que tiene merecido los 6 años de prisión y la inhabilitación. Y acá creo que está el principal problema, en esta polarización, en esta fragmentación que hoy en día vive la sociedad argentina donde no nos vamos a poder de acuerdo y donde la sociedad se sigue polarizando, se sigue fragmentando y siento que ya no hay vuelta atrás en un montón de problemas que hemos tenido a lo largo de nuestra historia", señaló Parolari.
El analista señaló que el proceso conlleva a una serie de análisis desde el rol del sistema judicial que desde un punto de vista académico se denomina lawfare: "La utilización del sistema judicial políticamente para amedrentar a opositores o en tal caso para dirimir ciertas cuestiones que se deberían de haber resuelto en la arena política, se terminan resolviendo en la arena judicial. Esto lo podemos ver claramente con lo que fue el caso de Lula da Silva en Brasil, donde después se terminó absolviendo al actual presidente de Brasil por una cuestión de imparcialidad del juez. Acá lo que vemos es la utilización del sistema judicial políticamente para un fin o una estrategia de un partido político, un dirigente. Acá es donde quiero poner mayor punto de atención y es en esto: en procesos de alta polarización y de alta fragmentación, no solamente en la Argentina sino en América Latina y creo que me atrevería a decir gran parte del mundo, este tipo de medidas acrecientan reacciones, injustificadas en algunos casos cuando se recurre a la violencia, injustificadas cuando por ejemplo se terminan rompiendo las instituciones, el Congreso, canales de televisión, que es lo que vimos el del día de ayer".
Frente a esto, Parolari planteó cuál es el rol de las instituciones y de la institucionalidad: "La pérdida de credibilidad de las instituciones repercute inexorablemente en el grado de confianza que la ciudadanía percibe sobre la democracia. Cuando las instituciones son débiles, cuando la institucionalidad no representa la ciudadanía, la democracia pierde credibilidad como garante de la mejor forma de gobierno. Es otro proceso que me preocupa y que debería preocupar a los líderes y a las líderes en América Latina, cuál es el rol de la democracia. Muchas personas en América Latina, según datos del Latinobarómetro, casi un 35% está dispuesto a aceptar gobiernos de tinte no democráticos, de tinte autoritario siempre y cuando resuelva sus problemas. ¿Qué representa, qué significa resolver sus problemas? Inseguridad, educación, agua, empleo, etcétera. Entonces, acá quizás es un poco el problema de la cuestión, de la institucionalidad".
En esa línea, el analista planteó los problemas que enfrenta la institucionalidad en nuestro país: "En Argentina la institucionalidad está totalmente erosionada, deslegitimada, no representa el conjunto de la ciudadanía y es cuando lo político no resuelve, lo judicial termina resolviendo lo que lo político no resuelve. Sin embargo, es percibido por gran sector de la población como justo, por otro sector de la población como injusto y en vez de generarse un consenso alrededor de una decisión judicial, se genera un disenso que no colabora con la sociedad argentina donde se va a recrudecer la narrativa, se va a recrudecer la acción, se va a recrudecer la cuestión más en términos de resistencia por parte de Cristina Fernández de Kirchner: por un lado vemos una narrativa de corrupción, década perdida, ‘Se robaron todo'; por el otro lado víctima, resistencia, ‘aunque me metan presa a mí no van a solucionar los problemas que hoy enfrenta la Argentina'".
Frente a este contexto, Parolari rescató el mensaje de Mauricio Macri en X: "En cierta forma celebra la decisión, sin embargo dice que es un día triste porque no le gusta ver o no le parece correcto que una expresidenta en Argentina termine presa debido a la cantidad de tiempo perdido que se pudo haber evitado por la corrupción. Creo que hay que quedarse un poco con ese mensaje, más que nada pensando en una reconstrucción de la sociedad. No por el interlocutor, sino creo que es triste que una expresidenta, sea quien sea, termine presa pero por una cuestión de lo que significa para la democracia argentina y para la institucionalidad y para la democracia. Pero también para que entendamos que la corrupción sí deja huella, sí deja marcas negativas en la sociedad y también para que entendamos que la política a veces utiliza la justicia en pos de ciertas estrategias que terminan beneficiando a unos y perjudicando a otros".
Finalmente, señaló que intentando ser neutral en el análisis, no es casualidad lo que pasó: "Trato de ser lo más neutral posible sin entrar en que estoy a favor de Cristina o estoy en contra de Cristina, sino entender que no es casualidad lo que pasó y que la Justicia se utiliza para dirimir bastantes hechos políticos o para dirimir lo que la política no puede resolver en las urnas", concluyó.