Cómo puede influir en Argentina la disparada del precio del petróleo
El conflicto en Medio Oriente elevó el precio del petróleo a nivel mundial, algo que puede impactar en la economía argentina y también en la cotización de las empresas energéticas.
La escalada del conflicto entre Israel e Irán generó una suba de los precios del petróleo a nivel internacional, el cual alcanzó su valor más alto en dos meses. La crecida que revierte la tendencia bajista puede impactar en la Argentina tanto en el precio de los combustibles como así también en la cotización de las principales empresas energéticas y el ingreso de divisas.
Los futuros del crudo Brent treparon por encima de los USD 78 por barril según consignaron especialistas internacionales, lo que llevó a que recuperen terreno tras las pérdidas acumuladas en este año, generadas por la guerra comercial y la reactivación productiva de las OPEP+. El crecimiento del crudo puede generar una presión alcista en los precios de los combustibles en Argentina.
El riesgo de desajustes fiscales también crece si el aumento del petróleo se traslada a la cadena de precios internos. En este escenario, el Gobierno podría tener que destinar más recursos para sostener los subsidios a la energía, lo que podría obstaculizar el avance en la reducción del déficit fiscal, una de las principales prioridades en la gestión de Javier Milei.
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Las empresas vinculadas al sector energético también podrían enfrentar volatilidad en sus cotizaciones en los mercados. En el caso de YPF, el principal actor en la industria hidrocarburífera local, un aumento significativo en los precios del petróleo podría beneficiar sus márgenes de ganancia.
En paralelo, las exportaciones de gas y petróleo pueden experimentar un incremento en los ingresos. Argentina tiene una posición estratégica gracias a sus reservas de shale oil y shale gas (no convencionales), especialmente en Vaca Muerta, que concentra gran parte de la producción de crudo de este tipo. La producción de shale oil viene aumentando significativamente, lo que podría favorecer la balanza comercial energética de Argentina como en el primer cuatrimestre de este año. Sin embargo, las importaciones de refinados como el diesel podrían verse afectados por las subas internacionales.