La mora crediticia sigue en aumento: familias y empresas sienten la presión
Según el último informe del Banco Central, en julio, la irregularidad en los pagos de créditos volvió a crecer por décimo mes consecutivo, afectando al 5,6% de los préstamos a las familias y al 1,2% de las financiaciones empresariales.
La mora crediticia de personas y empresas volvió a subir en julio, según el último Informe sobre Bancos publicado por el Banco Central (BCRA). A nivel sistémico, la irregularidad en los pagos alcanzó el 3,2%, tres décimas más que en junio, mientras que los préstamos a las familias registraron un nivel de mora del 5,6% y los créditos a las empresas del 1,2%.
El reporte destaca que el 7,2% de la cartera de préstamos personales cedidos al sector privado presenta dificultades de pago, un porcentaje comparable al registrado hace cuatro años, en plena renegociación de financiaciones suspendidas o acotadas durante la pandemia de Covid-19.
El detalle de la morosidad
El crecimiento de la mora también se observa en las financiaciones a través de tarjetas de crédito, que alcanzaron el 4,8% en julio, con un aumento de un punto porcentual desde mayo, aun cuando las tasas activas de los bancos aún no reflejaban el apretón monetario aplicado por el Gobierno.
Estas cifras reflejan las dificultades que enfrentan muchas familias, en un contexto donde los salarios muestran un rezago y el empleo en el sector privado registrado sufrió en junio la peor caída mensual desde el primer trimestre de 2024, con la pérdida de 12.150 puestos de trabajo, según el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).
El deterioro también se nota en la cadena de pagos: la ratio de cheques rechazados por falta de fondos sobre el total compensado subió a 1,41% en cantidades y 1,11% en montos durante julio, lo que representa un aumento de 0,05 y 0,06 puntos respectivamente y sitúa los rebotes "por encima de la media del año", señala el informe del BCRA.
El uso de cheques sigue siendo clave para empresas, especialmente pymes, para financiarse y realizar pagos diferidos, complementando las líneas de adelantos por cuenta corriente pactadas con los bancos. Sin embargo, ante la escalada de tasas, se anticipa un posible deterioro adicional de estas cifras en los próximos meses.
La única línea de crédito que no experimentó un aumento de mora en julio fue la hipotecaria, que se mantuvo en 1,4% de la cartera bancaria, aun incorporando más de 4.200 nuevos deudores al sistema en ese mes. En los últimos doce meses, este segmento sumó 34.000 personas al sistema crediticio.