El ritual del brindis, siempre presente en Navidad y Año Nuevo
El origen de la palabra "brindis", los matices y diferencias en la costumbre un fin de año con las copas en alto. ¿Mirándose a los ojos? ¿Con la mano izquierda? Aquí José Jorge Chade cuenta cómo es en el mundo.
Un ritual, un gesto, una costumbre que ha acompañado a la humanidad a lo largo de los siglos. Cuentan que ya en la época de los asirios-babilonios era costumbre celebrar los acontecimientos importantes levantando las copas al cielo como símbolo de devoción y gratitud.
En la Grecia Antigua se comía y se bebía en momentos distintos. Un comensal, el "simposiarca" viene de simposio, que era el presidente electo en los banquetes de la antigua Grecia (y posteriormente de Roma), y quien establecía la proporción de agua y vino, dirigía las sesiones de bebida y dirigía el entretenimiento. Figura de autoridad, garantizaba un equilibrio entre alegría y sobriedad, durante la conversación.
Tenía la tarea de preparar las bebidas y recitar discursos durante el brindis, a menudo dedicado a homenajear a los presentes o a las mujeres amadas, según una secuencia preestablecida.
El panettone, su incalculado origen y otras curiosidades
En la literatura antigua, uno de los brindis más famosos es el de Odiseo a Polifemo, que sirvió para convencer al cíclope de que bebiera vino para luego emborracharlo y matarlo mientras dormía.
También en los banquetes romanos el brindis era una costumbre ya consolidada, a menudo destinada a celebrar hazañas amorosas o militares, la salud de uno de los comensales (al que se invitaba a vaciar la copa exclamando: «bene tibi», «vivas» que en español es "y será para siempre") o de personas ausentes. En el brindis por la mujer amada se solía vaciar tantos kyathoi (antiguo vaso griego pintado)seguidos, como letras componían su nombre.
Ahora veamos un poco la historia de este ritual que perdura en nuestros días.
Origen de la palabra
El término "brindisi" proviene del alemán "bring dir's", que literalmente significa "te traigo (el saludo)". Se dice que la costumbre de acompañar el brindis con las palabras "salute" o "viva" se inspiró en el gesto de verter un poco de vino propio en la copa del invitado y viceversa, para asegurarse de que ninguno se envenenase.
La expresión coloquial "Chin Chin" deriva del chino "ch'ing ch'ing", que significa "por favor", y que los marineros ingleses de Cantón ( así se llamaban aquellos que formaban parte de la red comercial de la Compañía Británica de las Indias Orientales) utilizaban durante la época colonial para comerciar con China. El término más formal "Prosit" proviene del latín. Literalmente, es la tercera persona del singular del presente de subjuntivo del verbo prosum, que significa "beneficiar, ser ventajoso, favorecer".
Formalmente, la etiqueta o el ceremonial sugiere levantar apenas la copa sin dejar que las copas se toquen, evitando la habitual fórmula del "Cheers"(Chin, chin Salud!), considerada una expresión informal y poco elegante, esencial mantener siempre el contacto visual con los demás comensales.
¡Cada quién con su brindis!
En la actualidad, en todo el mundo, brindar es un símbolo de cordialidad y alegría, lleno de expresiones y gestos, a veces supersticiosos, que varían según el lugar. "Alla salute" en italiano, "A votre santé" en francés, "Prost" en alemán, "Salud" en español, "Cheers" en inglés, "Kanpai" en japonés, etc.
• Hungría: Nunca tocar las copas
En Hungría también es costumbre no tocar las copas, y la razón radica en un episodio histórico que se remonta a 1848, cuando las tropas austriacas ejecutaron a trece jurados húngaros, brindando con "choques" entre grandes jarras de cerveza. En memoria de sus compatriotas asesinados, los húngaros han evitado desde entonces el brindis chocando las copas.
• Polonia: El anfitrión primero
En Polonia, es tradición que el anfitrión inicie el brindis. Solo después de que el anfitrión haya dado el primer sorbo se permite beber a los demás invitados.
• China: Primero los mayores
En China, sin embargo, la persona de mayor edad comienza el brindis. Todos los participantes deben vaciar su copa de un trago y luego colocarla boca abajo para indicar que el recipiente está vacío y que no queda nada para beber.
• Japón: Primero que nada el ánimo de colaboración y complicidad
En Japón, es tradición rellenar las copas de los que están sentados uno al lado del otro. Exclamar "¡Salud!" está absolutamente prohibido. Además de Kanpai (Salud), existen otras expresiones más formales. En situaciones laborales, por ejemplo, se usa Otsukare-sama desu, también en las formas abreviadas Otsukare u Otsukare-sama ("Buen trabajo" o "gracias por tu esfuerzo"). Esta frase expresa gratitud hacia quienes han hecho un buen trabajo durante una determinada acción, o durante el día, el mes o el año.
• Reino Unido: Mojar pan en vino
En los países angloparlantes, el gesto de brindar se indica con el verbo "to toast", que de alguna manera evoca la palabra "bread"(pan). De hecho, parece que en la antigua Roma era común mojar un trozo de pan tostado en vino para contrarrestar su acidez. Esta costumbre todavía está bastante extendida en los países de habla inglesa.
• Escandinavia: Siempre mirar al otro
En el norte de Europa, el brindis se cierra con el contacto visual entre los comensales, que no debe interrumpirse hasta que las copas se encuentren. Este ritual debe realizarse con cada persona cuyas copas se intercambian. El saludo es "skal", que significa calavera, y tiene su origen en la costumbre vikinga de celebrar bebiendo de las calaveras de los enemigos caídos.
• Rusia: Brindis por el amor, con la mano izquierda
En Rusia, el brindis siempre va acompañado de un discurso de buenos deseos. Al brindar por el amor, la señal distintiva es sostener la copa con la mano izquierda.
Bueno, estas son algunas costumbres ancestrales sobre el brindis, pero lo que no tenemos que olvidarnos es que brindar es "relación" es "comunicación interpersonal", nunca brindamos solos. Brindar en la ocasión que sea y sobre todo ahora que estamos frente a una Nueva Navidad y a un Nuevo Año, el brindis debe ser para todos un momento de alegría y reconocimiento , un sentimiento y una demostración de gratitud y entusiasmo.
Fuente consultada: News de Caterina Pucci, Monteriggione, Siena ,Italia, 2023