Una app echó al 50% de sus empleados por no ir a la oficina
Grindr obligó a sus empleados a trabajar presencialmente dos días bajo amenaza de despido. Ochenta personas arreglaron irse de la empresa.
El mundo laboral cambió con la pandemia del coronavirus y volvió cambiar en la pospandemia. Primero fue trabajar 100% desde casa, después un regreso híbrido y, en muchos casos, un regreso total a la presencialidad. A algunos le gustó volver más que a otros, por lo que muchas empresas debieron obligar la vuelta. Grindr, la popular aplicación de citas, fue una de ellas.
Sin embargo, la compañía sufrió un problema impensado: casi la mitad de sus empleados no quisieron volver y, en cambio, se fueron de la empresa.
Según informaron medios estadounidenses, los 178 empleados de Grindr recibieron el mes pasado un ultimátum: o vuelven a la oficina dos días a la semana o son despedidos. Sorprendentemente, 80 personas prefirieron abandonar la empresa.
Los empleados que se fueron de Grindr
La empresa otorgó indemnizaciones a los empleados que no podían cumplir con la política de regreso a las oficinas, lo que se interpretó como un intento de "silenciar a los trabajadores sobre sus condiciones laborales", según alegó el sindicato Communications Workers of America (CWA).
A finales de julio, un grupo de unos 100 empleados de la app anunció su intención de sindicarse, una iniciativa que aún no cuenta con el reconocimiento oficial de la dirección de Grindr. Pero los empleados favorables al sindicato afirman que la campaña cuenta con un amplio apoyo dentro de la unidad de negociación propuesta.
"Estas decisiones dejaron a Grindr con una peligrosa falta de personal y plantean dudas sobre la seguridad y la estabilidad de la aplicación para los usuarios", expresó en un comunicado Erick Cortez, miembro del grupo organizador. "Está claro que Grindr quiere silenciar a los trabajadores y disuadirnos de ejercer nuestro derecho a organizarnos, sin importar el coste", denunció.
Un portavoz de Grindr dijo que las últimas afirmaciones del sindicato "no tienen fundamento". "Esperamos regresar a la oficina en un modelo híbrido en octubre y mejorar aún más la productividad y la colaboración de todo nuestro equipo", declaró, citado por CNN.
El CEO de Grindr, George Arison, no se mostró contento con la decisión: "El equipo será más pequeño de lo que éramos antes y de lo que queremos ser", dijo en la conferencia Communacopia + Technology de Goldman Sachs.
Aunque se espera una mayor pérdida de personal, Arison no dijo estar arrepentido. "Queda demostrado que en este negocio se puede tener un gran apalancamiento, porque no se necesita un equipo tan grande para hacer las cosas que tenemos que hacer", declaró frente a inversionistas.
En este sentido, indicó que las reducciones en el personal van a aumentar los márgenes de beneficio a corto plazo, ya que los costos de personal ocupan el segundo lugar después de las tarifas de las tiendas de aplicaciones.
Todo se reduce en Silicon Valley
Según una encuesta de agosto a 185 ejecutivos de recursos humanos, el 73% de las empresas informaron dificultades para lograr que sus trabajadores regresaran al lugar de trabajo.
Las principales empresas de tecnología de Estados Unidos experimentan hace rato una fuerte tensión entre empresarios y trabajadores por el teletrabajo y la vuelta a la oficina. Elon Musk, por ejemplo, ya había avisado que el trabajar desde casa era "una estupidez" y avisó a sus empleados de Tesla que "ya no es aceptable" .
Gigantes de la tecnología que aplican requisitos más estrictos en sus oficinas, como Amazon, se encontraron con que sus empleados se resisten fuertemente a la vuelta, e insisten con poder trabajar con condiciones flexibles y desde cualquier lado . La solución fue la misma que Grindr: el CEO de la empresa, Andy Jassy, avisó que los empleados que no estaban de acuerdo con esta política podían irse de la compañía.
Meta, matriz de Facebook, dijo a sus empleados que antes del 5 de septiembre debían venir tres días a la semana si ya tenían una oficina asignada, y los gerentes realizarían un seguimiento de la asistencia. El incumplimiento podría dar lugar a medidas disciplinarias, incluida una calificación de desempeño más baja o, si no se aborda, el despido.
Aún con sus enormes problemas con trabajadores, Grindr subió sus previsiones de ingresos y beneficios para todo el año, gracias a la fuerte demanda de nuevas ofertas de suscripción premium. Las acciones de Grindr subieron un 17% en lo que va de año.
