Superávit cambiario en julio: exportaciones récord del agro sostuvieron el balance pese al déficit en servicios

La balanza cambiaria volvió a mostrar números positivos en julio, según el último informe del Banco Central (BCRA). Ese mes, la cuenta corriente cambiaria cerró con un superávit de US$1374 millones, el segundo resultado favorable en lo que va de 2025. El saldo se apoyó principalmente en el comercio de bienes, que aportó un ingreso neto de US$3887 millones, el más elevado desde septiembre de 2022.

No obstante, la foto acumulada del año sigue siendo menos optimista: entre enero y julio se registró una salida neta de divisas de US$1273 millones, lo que refleja que los ingresos de los últimos meses aún no alcanzan para compensar los fuertes egresos previos.

Bienes: el motor del balance

El grueso de los dólares que ingresaron en julio provino de las exportaciones. El BCRA precisó que los cobros por ventas al exterior alcanzaron los US$10.175 millones, mientras que los pagos de importaciones sumaron US$6289 millones. Esa diferencia dejó un saldo neto de US$3887 millones, que marcó un máximo en casi dos años.

El complejo aceitero fue el principal responsable de este desempeño: liquidó US$4933 millones, con un fuerte impulso de la rebaja temporal de retenciones que había vencido el 30 de junio pero que dejó un "efecto residual" en los primeros días de julio. El resto de los sectores exportadores totalizó US$5242 millones.

Por el lado de las importaciones, el gasto creció con fuerza: los pagos aumentaron 18% respecto a julio de 2024 y 9% frente a junio, alcanzando el mayor nivel mensual desde julio de 2022. El informe oficial detalló que casi todas las ramas de actividad mostraron alzas interanuales en sus compras externas, salvo el complejo aceitero y el rubro energético.

Servicios: déficit creciente por turismo y consumos con tarjeta

La cuenta de servicios volvió a mostrar saldo negativo en julio, con un déficit de US$928 millones. Este monto implicó un aumento de US$361 millones respecto a igual mes del año pasado y de US$184 millones frente a junio.

El rojo se explicó principalmente por tres rubros:

• Consumos con tarjeta, viajes y pasajes: egresos netos por US$817 millones.

• Otros servicios: US$333 millones.

• Fletes y seguros: US$132 millones.

En total, los consumos brutos de bienes y servicios en el exterior alcanzaron los US$1192 millones. De ese total, US$1063 millones correspondieron a gastos con tarjetas, US$129 millones a transporte de pasajeros y US$124 millones a giros de operadores turísticos.

Una parte de esas salidas fue compensada por ingresos netos de "servicios empresariales, profesionales y técnicos", que aportaron US$355 millones al balance.

Deuda y pagos al exterior

Otro factor que presionó sobre el resultado global fueron los pagos de intereses de deuda. La cuenta de ingreso primario cerró con egresos netos de US$1595 millones, de los cuales US$1563 millones correspondieron a intereses.

El "Gobierno General y el BCRA" realizaron cancelaciones netas por US$1275 millones, mientras que el sector privado abonó otros US$288 millones. A eso se sumaron US$32 millones por utilidades, dividendos y otras rentas enviadas al exterior.

Balance acumulado y perspectiva

El superávit de julio, sumado al de junio, permitió encadenar dos meses consecutivos de ingresos netos de divisas. Sin embargo, el acumulado de los últimos 12 meses muestra todavía una salida superior a los US$6847 millones, lo que refleja la fragilidad del frente externo.

En paralelo, la cuenta de ingreso secundario aportó apenas un superávit de US$9 millones, sin incidencia significativa sobre el resultado global.

En síntesis, el informe del BCRA confirma que el superávit cambiario de julio se apoyó casi exclusivamente en el sector exportador, con protagonismo del agro. El déficit en servicios y los pagos de deuda continúan actuando como contrapeso, y marcan que, pese a la mejora puntual de los últimos meses, el flujo neto de divisas del año todavía sigue en terreno negativo.